Narra Town:
Me desperté cerca de las 6:30 A.m, con el cabello revuelto y con una cara de cansancio que no me quitaba nadie. Soy Town, tengo 19 años y estudio en la universidad. Hablando de eso...
"Tengo que arreglarme" pensé mientras me vestía. Me coloqué un pantalón color negro junto con una camisa gris que, a mi parecer, combina con mis ojos marrones, ¿no? Al terminar de vestirme bajé a la primera planta donde mi madre me esperaba en la mesa para desayunar.
- Hola cariño- Me saludó con una sonrisa.
- Buenos días mamá - Besé su mejilla y me senté para poder desayunar con ella.
Mi madre es una ama de casa, desde que mi padre nos dejo yo soy el hombre de la casa. Mi mamá, al contrario, se queda aquí haciendo los quehaceres del hogar. Ella es lo único que tengo y por eso la amo tanto.
Después de desayunar me despedí de ella como siempre lo hacia, con un beso en la mejilla. Tomé mi bolso y salí de mi casa para ir a la universidad.
- Espero ver a Jack después de clases - Dije para mi solo.
Al llegar a la universidad, saludé a mis amigos y entramos a clases. El salón se llenaba de estudiantes y junto a ellos entraba Jack, el chico de cabello blanco. No entiendo el porque se burlan de el, esos chistes crueles no hacen reír a nadie. Se preguntaran, "¿eres su amigo?" En realidad no, no lo considero mi amigo pero, tampoco un desconocido, mas bien, me agrada el pequeño.
-Saquen sus hojas y lápices, tendremos un examen sorpresa - Dijo el profesor de historia al entrar al salón.
La mayoría de los demás estudiantes se quejaban , pero en cambio, yo solo obedecí y empecé a copiar las preguntas que el profesor anotaba en la pizarra que estaba en la pared.
No evité mirar de reojo al peliblanco que se encontraba concentrado en su examen. Bien, el es el mejor de la clase y con tan solo 17 años sabe más que el profesor. Y no, no me burlo, el pequeño es inteligente.
Pasaron varios minutos y terminé la evaluación. Como esperaba, Jack fue el primero en acabar.
"¿Y si lo invito a tomar un helado?" Pensé mientras escribía en mi cuaderno borradores de letras de canciones que se me ocurrían. Sentí que me golpearon con una bola de papel, miré al rededor y la tomé.
"Oye Town, quitale el cuaderno a la bola de pelos blanca"
Al terminar de leer lo que decía, miré al dueño de esta con desdén. Volví a arrugar la hoja y me levante para tirarla a la basura. Al sentarme de nuevo en mi respectivo puesto seguí con lo mío sin prestar atención a los demás.
Sonó la campana. Me levanté tomando mis cosas y le avisé a Jack que ya habían tocado, el me agradeció y salió del salón.
- ¡¡¡Oye!!! ¡¡¡Pequeño!!! - Lo llamé y el paró en secó para voltear hacia mi.
- D-Dime...- Dijo inseguro, a lo que yo le regalé una sonrisa tierna.
- ¿Quieres ir conmigo a tomar un helado? - Le pregunté sonriendo.
- Me encantaría - Contestó sonriendo - pero... - Su expresión de alegría se desvaneció - Tengo que hacer algo importante en casa - Dijo un poco triste.
- Bueno, sera luego - Dije alegre - ¿tienes teléfono? - Le pregunté.
- Si - Respondió amablemente.
- ¿Me lo das? - Le pregunté lo mas gentil que pude.
El me miró inseguro, pero después me lo pasó y yo lo guardé en mi móvil.
- Gracias, pequeño - Le agradecí. El me dedicó una sonrisa con un leve sonrojo en sus mejillas.
Pasamos la mañana hablando, no entiendo por que es tan solitario si es muy agradable. Además, es lindo el pequeño. Las personas al verme con el empezaban a murmuras cosas sin sentido, algo que no presté atención, ya que el pequeño no paraba de hablar de su fascinación por los gatos. Varias risas salieron provenientes de nosotros dos. "Eres muy tierno, pequeño" pensé mientras miraba sus grandes ojos.
La mañana terminó y me ofrecí a acompañarlo a casa y el aceptó luego de varios ruegos por parte mía.
Caminábamos a su casa cuando un auto se montó en la acera, yo rápidamente tomé al peliblanco de la mano y corrí con él fuera del camino de aquel hombre irresponsable. Tropecé y caí junto con Jack al suelo. El callo sobre mi.
El pequeño se sonrojó casi instantáneamente y yo sonreí.
- L-L-Lo siento, Town - Se disculpó y se levantó.
- No te disculpes, si no fuera por aquel tipo que casi nos mata no hubiéramos caído - Dije mientras sonreía.
El desvío la mirada, ya se había puesto colorado hasta más no poder. Me levanté del suelo quitando el polvo que estaba en mi ropa y volví a dirigir vista hacia el.
- Gracias Town....- Dijo casi susurrando.
- De nada pequeño - Le respondí.
Luego de casi ser atropellados, terminé de acompañar al pequeño a su casa, nos despedimos y me encaminé a la mía.
Al llegar, mi madre estaba terminando de poner la mesa, la salude y me senté con ella para almorzar. Somos muy unidos, ella es todo para mi, pero.....desde que vi a Jack....un espació en mi corazón se abrió para el, creo que....¿estoy enamorado? ¿esto es amor, lo que siento? O... ¿solo estoy confundido...?
- Cariño, ¿que tienes? - Preguntó mi madre logrando sacarme de mis pensamientos.
- Nada, mamá- Le Sonreí - solo me quede pensativo.
- ¿En que piensas pícaro? - Preguntó y yo reí ante su última palabra - Dime, ¿tendré nuero? Quiero ser abuela - Hizo un puchero.
Reí de nuevo.
- Mama, por favor, tengo solo 19 años - Dije sonriendo - y, aparte los hombres no pueden embarazarse o....¿si pueden? - Pregunté a lo que mi madre me golpeó leve la cabeza.
- Para que te esta sirviendo la universidad - Dijo aguantando la risa en un intento de regaño - ¿Qué es esa pregunta? Que si los hombre pueden embarazarse, no puedo con este muchacho - ahí empecé a reír y ella igual - vale, come que se te enfría la comida.
Asentí y empecé a comer. Mi madre siempre esta alegre y hasta cuando me regaña se ríe, la quiero mucho.
Al terminar el almuerzo, levanté los platos y los lavé, me sequé las manos y me fui a mi cuarto, donde me tiré a la cama.
"Que día agotador" pensé mientras miraba el techo blanco de mi cuarto. Tomé mi teléfono y le envíe un mensaje a Jack.
- Oye pequeño, recuerda que me debes esa salida.
Lo envíe y, minutos después, mi teléfono sonó.
- No lo he olvidado Town. Creo que no iré a la universidad estos días.
No entendía el por que, pero no quise preguntar. Me despedí de el para dormir un rato.
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Hasta que te conoci (yaoi) [Concurso lemon]
RomanceComo me arrepiento de haberme suicidado aquella noche, haber abandonado al ser que mas he amado por solo una anormalidad en mi cuerpo y por aquella miseria que me trajo un ser diabólico. Sigo vagando por este bosque en busca de tu mirada hermosa, se...