Capítulo 3

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Alison se colocó una parte de su cabello detrás de su oído mientras se acomodaba al lado de la morena.

Cada movimiento que hacia lo realizaba lento para que la morena se cansara y prefiriera hablar otro día, sin embargo, si se trataba de la seguridad de la rubia, Emily haría todo lo posible y mas por mantenerla a salvo.

-Bueno- Comenzó hablando Alison, tenia las mejilla pálidas y las manos temblorosas. Emily noto el miedo en sus ojos, tomo sus manos y entrelazó sus dedos con los de la rubia para hacerla sentir mas protegida. -Un día antes de decirte lo que sentía, "A" me golpeó en mi auto- Alison no disfrutaba hablando de ese tema, por lo que describir cada detalle le significaba recordar cada momento como si se tratase de una película. -Al golpearme, me fui de espalda contra el vidrio y me formo una cicatriz, en la espalda- Alison fue interrumpida por una apenada e impotente Emily.
-Ali...- Dijo Emily para que la rubia se detuviera si eso era lo que necesitaba.

Alison se saco la polerita de pijama que llevaba puesta, dejando descubiertas sus dos cicatrices.

-Y en el brazo, pero descuida Em- Le dijo mientras le acariciaba la mejilla a la morena, Emily había dejado caer una lágrima por su rostro, se sentía inútil por no poder haberla protegido. -Ya estoy mucho mejor- Dijo la rubia en un tono calmado y dulce para que Emily no se estresara mas de lo que ya estaba.

A Alison aun le dolían mucho las heridas que tenía pero lo sabía disimular bien, sin embargo, el disimular no era suficiente para Emily, ella supo al instante que la rubia sentía dolor y miedo de que alguien las hiriera a una de las dos.

-Ali, tu herida del brazo tiene puntos..- Hablo Emily mientras acariciaba cada una de las cicatrices que estaban en el cuerpo de Alison.
-Son tan sólo puntos Em, sanaran en un tiempo- Le respondió Alison a Emily mientras se cubría con su polera.
-No dejare que algo mas te pase Ali, no puedo... Tu estas viviendo en una casa vacía, siendo un blanco mucho mas fácil. No puedo irme a mi casa sabiendo que puedo perderte esta misma noche..- Le dijo Emily a la rubia mientras rompía en llanto.

-Emily, por favor no llores, Em, yo estaré bien. Yo quiero que tu te mantengas asalvo. Quizás antes yo no te cuidaba lo suficiente pero en este momento tu eres mi debilidad y "A" sabrá como aprovecharlo..- Le dijo Alison a Emily mientras le acomodaba su cabeza en su pecho, no podía ver a la morena, a su morena así... Y menos por culpa de ella.

-Lo siento mucho Em..- Término diciendo Alison con una lágrima resbalándose por su mejilla.
-Por qué dices eso- Dice la morena confundida por tal comentario.
-Porque me conociste. Si tan solo te hubieras alejado ese día, ambas en este momento estaríamos preocupadas por que usaríamos mañana.
-No digas eso Ali- Interrumpió Emily. -Yo te quiero, y eso fue lo mejor que me pudo pasar. En este momento yo no me podre ir, de tan sólo pensar que tienes puntos en tu brazo por no haber estado ahí, por mi orgullo que me impidió defenderte- A la morena se le comenzó a quebrar la voz. Alison reacciono a esta lágrima de Emily y la beso, fue un beso dulce, apasionado y expresivo, que con tan solo un roce, sintieron como todo su mundo se ponía de cabeza.

-Si tan nerviosa te pone que yo este sola, ven a dormir conmigo- Sugiere Alison con los ojos puestos directamente en los de la morena.
-O alrevez- Dijo la morena con una expresión de científico cuando encuentra la formula que necesitaba. -Tu te vendrás a mi casa, a mi madre no le molestara... Ni a mi tampoco..- Dijo Emily son una sonrisa juguetona y una mirada dulce.
-Si así lo deseas, estoy a sus órdenes- Dijo Alison haciendo el gesto que hacen los marinos al despedirse de su capitán.

Luego de esa conversación, Alison comienza a empacar apresuradamente, Emily estaba deseando compartir habitación, y cama... Con la rubia de sus sueños. Quien diría que luego de tanta espera, por fin podría estar con Alison cuando esta siente lo mismo.

A Emily aun le cuesta un poco creer que Alison, Alison DiLaurentis, estaba enamorada y sufría por no tener en sus brazos a Emily Fields.

Emily sonrió y se ruborizó de tan sólo pensar en cuando Alison le dijo que la amaba, quizás ambas habían cometido errores pero, podrían superarlos, después de todo se amaban y eso es lo que importa.

Luego de terminar de empacar, Emily tomó las maletas de Alison por miedo a que le sucediera algo en el brazo, y luego prosiguió a tomarle la mano.
Alison se enrojeció al sentir el tacto de la morena con su piel, quien diría que el simple tacto, haría que Alison se sintiera tan protegida y por sobre todo, amada.

-Vamos, vamos, vamos- Dijo Emily mientras subía al auto, estaba emocionada, como cuando le das una paleta a un niño, Alison era su paleta y estaba dispuesta a saborearla un poco.

-Ya voy Em, que juguetona te pones cuando tienes visitas- Dijo Alison entre risas mientras subía al aciento del copiloto.
-No es cuando tengo visitas, es cuando estas tu- Murmuro Emily pensando que no la había escuchado, gran error, Alison lo escuchó y se enrojeció al instante.
-Yo también te quiero- Dijo Alison mientras se burlaba de la apresurada y emocionada Emily.

Al llegar a casa, Emily abrió la puerta con sus llaves. La madre de Emily, Pam, la quedo mirando con confusión al ver dos maletas medianas.

-Em, cariño, de donde sacaste eso- Preguntó la madre a su hija mientras veía una sombra detrás. -Hola Alison- Continuó Pam sonriendo.
-Hola- Dijo sonriente la rubia hacia la Fields mayor. -Que conste que esta idea fue de su hija- Dijo mientras se disculpaba.
-O no te disculpes cariño- Le hicieron creer a Pam que la rubia se iba a quedar por un tiempo por la soledad de la casa DiLaurentis. -Siempre eres bienvenida aquí, mi hija te quiere mucho.
Emily escuchó como su madre comenzaba a hablar sobre ella y se limitó a darle una sonrisa que demostraba incomodidad.
-Y yo a ella Sra. Fields- Le respondió Alison a Pam pero mirando dulcemente a Emily. La morena al ver tal gesto de insinuación frente a su madre, se dio cuenta de que Alison en verdad haría todo por protegerla, la haría sentir tan amada como Emily la hacia sentir siempre.

Continuaron cenando juntas.

-Bueno chicas- Habló Pam. -Es hora de ir a la cama, mañana tienen escuela y ya es tarde.
-Tiene razón, creó que me iré a poner pijama- Dijo Alison mientras le guiñaba un ojo a Emily, esta se enrojeció y se dio vuelta con la intención de seguir a Alison por la escalera.

Se despidieron de Pam y se fueron a su habitación.

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