Mine.

-Capítulo 13.

—Capítulo 13.

El fin de semana al lado de Harry fue increíble. Pasamos cada segundo juntos, definitivamente necesitaba pensar las cosas. No sabía que haría con Zayn, porque Harry me demostró que él puede ser el hombre de mis sueños.

Con Zayn solía estar bajo presión. La sensación de ser poca cosa para él solía me invadía cada vez que veía a su familia. Las peleas eran constantes por el tiempo que dedicaba al trabajo y la escuela, yo tenía claro que era importante para él, pero si esto sería igual cuando nos casáramos no nos veía un futuro.

Harry, por otro lado era sencillo, honesto, encantador, sincero y sus tatuajes. Dios, estaba más confundida que nunca.

— ¿Hola? —Mi teléfono comenzó a sonar una vez que el tren llego por fin a Londres.

—Amor, no pude localizarte el fin de semana, ¿todo bien? —La voz de Zayn me saco de mi ensimismamiento.

Tome mi bolso pasando la correa en mi hombro. —Lo siento, en Holmes Chapel no hay muy buena recepción.

—Bueno, solo quería saber si hoy quieres salir a cenar. Tengo una sorpresa para ti. —Sonaba más demasiado que nunca.

—Ah, estoy algo cansada ahora. —Salí a la avenida para tomar un taxi.

—Oh, ¿Mañana después del trabajo? —Su voz sonó tan desanimada que se me rompió el corazón.

—Claro, mañana es genial.

—De acuerdo, te amo. — ¿Cómo responder a eso?

—Igual.

Al cortar la llamada solté todo el aire que tenía contenido. No podía seguir con esto, debía tomar una decisión y debía hacerlo cuando antes.

(...)

El lunes por la mañana sentía que la cabeza iba a reventarme. Toda la noche estuve dando vueltas al asunto de Zayn y Harry. Había llegado a la conclusión de que no podía ser tan perra y dejar mi compromiso y empezar una relación.

Así que hasta que aclarara por completo mi mente, cancelaría el compromiso.

Baje las escaleras encontrándome con mi familia. —Buen día. —Salude caminando hacia el armario buscando una aspirina.

—Te ves algo cansada. —Dijo mi padre, bebiendo un sorbo de café.

—No dormí muy bien anoche. —Hice una mueca tomando asiento a su lado, como siempre.

Mamá puso un plato con el desayuno frente a mí. — ¿Hablaste con Zayn sobre la cena del compromiso? —Chillo ella.

—Hoy lo veré después del trabajo. —Removí la comida con el tenedor.

—Bueno, avísame con tiempo, necesito saber que voy a usar.

Ella, como siempre, mucho más emocionada que yo. ¿Por qué le entusiasmaba tanto? ¿Acaso estaba de la misma forma cuando se comprometió con mi padre?