¡Demonios! no había actualizado desde hace una eternidad, siento mucho eso, pero en realidad no tuve tiempo y pues estaba corta de inspiración, pero esta volviendo poco a poco.
La verdad es que este tiempo ausente hice muchas cosas, pase una divertida semana e Cancún, México y conocí Alemania por primera vez y debo confesar que estoy enamorada de Berlín y de Hamburg, ¡Demonios! fue la mejor experiencia de mi vida.
No voy a negar que mi corazón latió a mil por hora cuando vi a mi apuesto cazador. Y volvió a latir cuando recordé a un inconsciente Killian.
Corrí al coche, mire a Mary colgada del brazo de Killian, y a Sophia durmiendo a su lado.
-¡hey!¡hey!, ¡despierta! ¡Killian despierta!- moví su brazo repetidas veces, pero no respondió, seguía inconsciente.
-¡Tom, Mary! Necesito que me ayuden- ordene un poco desesperada- no permitiré que muera.
.....
Todo ocurrió tan rápido, de un momento a otro, Carol tenía entre sus brazos a la pequeña Sophia , ambas lloraban a la par.
Rick, Glenn y Carl estaban estupefactos, al igual que yo. Parecían no encontrarle explicación a lo que sucedía.
-¿Pero qué demonios ha pasado? ¿De qué me perdí? - Pregunto Tom confundido, ambos sosteníamos a Killian inconsciente- no podemos perder más tiempo.
- lo sé, no lo tienes que decir-
Rick y Hershel se acercaron, les conté lo ocurrido y a toda velocidad, llevamos a mi hermano dentro de la prisión, Mary venia tras nosotros, no había tiempo para presentaciones, saludos y muchos menos explicaciones, tal vez dentro de unas horas, podríamos hacer aquello, pero ahora la prioridad era la salud de mi hermano.
Junto a Hershel, hicimos todo lo que estaba en nuestras manos para curarlo, y ahora solo faltaba que despertara.
- Gracias Hershel- anuncie sincera- no sé qué hubiera hecho sin ti
- Aun no me lo agradezcas, hasta que haya despertado -
Salimos de la celda y caminamos al comedor, Hershel venía a mi lado, lucia exhausto y demacrado al igual que todos en la prisión, al llegar al comedor, todos estaban ahí, en una esquina se encontraban Carol y Sophia, aun abrazadas, parecía no querer separarse nunca, en las escaleras como era de costumbre estaba Dixon, cabizbajo, a un lado estaban Tom y Mary angustiados
Y después estaba yo, parada en la entrada, con cientos de emociones y preocupaciones, recorriendo mí ser, dejándome confundida.
Todos guardaron silencio al percatarse de nuestra presencia, Tom y Mary, se levantaron y casi corrieron a mí, estaban desesperados por saber el estado de Killian.
- Solo hay que esperar a que despierte- musité, mordiendo mi uña y dando un paso atrás - necesito un poco de aire, ¿podrían cuidarlo... ya saben mientras...- asintieron alejándose.
Hice lo mismo, salí al patio, buscando un respiro, relajarme, asimilar todo lo que pasaba.
Me deje caer en el césped, cubriendo mi rostro con mis manos y dejando salir todo lo que me agobiaba, escuche pasos, pero decidí no voltear, al cabo de unos minutos, alguien se sentó junto a mí.
- Se va recuperar- dijo una voz ronca... Daryl- aun así saca todo, puedes gritarme si quieres, tal vez lo merezco.- voltee y su aroma me pego fuertemente, desorientándose,
- No lo mereces- gire la mirada- es una mierda, todo es una mierda- mordí mis uñas nerviosa.
- ¿también yo?- gruño
- No, tu no, hablo de la vida en general- me miro pidiendo más- acabo de encontrar a Killian y le pasa esto, no sé, no sé, qué voy hacer, sin él... pero luego.. luego estas tu- lo señale - se supone que debía estar angustiada, triste y desesperada, cuando llegue aquí, pero no fue así, me sentí feliz, aliviada, por verte aquí, a salvo.-
-Yo sentí lo mismo cuando te vi- susurro, llevando su mano a la nariz, su típica manía-
No aguante más y me aventé a sus brazos, - creí que no volvería a verte- lo besé mientras acariciaba su largo cabello- no quiero volver a alejarme- confesé hundiendo mi rostro en su hermoso y varonil cuello.
=====
Ha pasado casi un mes, lo que me pareció una eternidad ya que Killian no se recuperaba por completo, por otro lado mi "relación" con Daryl iba de maravilla. Empezaba a abrirse más, me refiero que había veces que no era tan frío ni tan tímido, incluso llegaba a ser tierno y esa nueva faceta que estaba conociendo de él, me enamoraba mucho más.
- ¿A dónde vas?- pregunte perezosa
El cazador termino de ponerse sus botas y acto seguido tomo su inseparable ballesta
- Alguien tiene que cazar y nadie lo hará más que yo - soltó, acercándose a la salida de la celda
- Y nunca nadie, lo hará mejor que tú- añadí provocando que sonriera, salte de la cama y me acerque a él abrazándolo fuertemente- por favor, cuídate mucho - él asintió levemente y deposite un casto beso en sus labios.
Cuando de pronto, comenzó a escucharse un grito desgarrado y después otro y luego otro.
Dixon y yo nos miramos confundidos - ¿Qué esta pasando ? - pregunte asustada
- ¡Quédate aquí! ¡No te muevas!- ordeno y comenzó a correr
Se escucharon llantos, gritos y disparos, me rehusé a obedecerlo, no quería quedarme con los brazos cruzados mientras allá abajo necesitaban mi ayuda. Me vestí rápidamente y baje las escaleras.
El panorama no era nada bueno, todos corrían desesperados, había sangre y caminantes por doquier.
Tenia cuchillo en mano para ayudar pero estaba paralizada, se suponía que este lugar era seguro y nos equivocamos, no me di cuenta cuando mas de un caminante venia por mi, uno muy gordo se abalanzo a mi y su peso me derribo, me encontraba evitando sus mordidas, y un pensamiento llego a mi "Mierda"
