CAPÍTULO 12

137 11 9
                                    

¡¡AVISO!!

Este capítulo contiene partes que quizás puedan dañar la sensibilidad del lector. Leer bajo tu propia responsabilidad.

*Lol, en realidad no, pero queríamos sentirnos especiales, ¿okay?*

Vale, ya pueden leer c:

~AMELIE'S POV~

Hoy ha llegado el día, un día que desde que el alba ha asomado aparenta ser duro, lleno de emociones y no se como haré para seguir adelante.

Al abrir los ojos solo veo rayos de sol que se filtran por la ventana de la habitación de mi mejor amiga, Abby. Esa última noche deje atrás el colchón y dormí junto a mi amiga. Cuando despierto, ella me abraza con fuerza y agradezco que así sea. No sé cómo agradecérselo: Todo el apoyo, la estancia... En fin, sin ella sé que me habría caído al vacío cuando mi madre decidió enfadarse y abandonarme del todo. Abby y su hermano me acogieron sin pensárselo. Ella me comprende, ella sabe lo que es ser una mariposa atrapada en un tarro de cristal; gritas y gritas pero nadie te oye.

- Abby... - Susurro en su oído, tocando ligeramente su hombro.

- Mmh... Cinco minutos más. - Dice con voz somnolienta y estira un brazo como se suele hacer para apagar un despertador. Su mano, en cambio, no alcanza el despertador, sino que recae en mi pecho derecho.

Yo comienzo a reír sin parar, ella en cambio se incorpora con gran rapidez y se apresura a disculparse, sus mejillas se tiñen de rojo al hacerlo.

- Tranquila, tranquila, no pasa nada. ¡Oye, mejor que me toques tú que algún viejo verde! - Consigo articular entre carcajadas.

- No se lo digas a... - Hace una pausa. - Lauren... - Pronuncia su nombre de una manera un tanto extraña, algo más marcado de lo normal. - No creo que le haga mucha gracia que te tocara... Ya sabes... Lo siento. - Se disculpa aun más roja que antes.

La abrazo en ademán tranquilizador.

- No te preocupes, este momento rollo bollo mañanero no saldrá de aquí.

Ambas reímos y nos acostamos en la cama boca arriba, hablando de todo y de nada, riendo y hablando de los secretos de nuestro universo.

Después de un rato nos mentalizamos para lo que viene a continuación: Hoy es el día. Hoy volveré a intentarlo. Necesito volver a mi casa, no puedo quedarme aquí eternamente...

Mientras tanto, no decimos nada, solo nos teletransportamos a otra galaxia a través de la música que suena en la habitación, un idioma increíble que solo unos pocos conocen.

Cuando estoy lista para irme nos dirigimos a la cocina, donde nos encontramos a Patrick apoyado en la encimera y con un cuenco de cereales en las manos. Al oírnos llegar levanta la mirada, deja en la encimera de granito su desayuno y viene hacia nosotras.

- Bueno, pelirrojilla. - Dice sonriendo. - Aunque ahora te marches sabes que puedes contar con nosotros sin dudarlo. - Me atrae hacia sí, envolviéndome con sus fuertes y cálidos brazos.

- Gra-Gracias, Patrick... Nunca olvidaré esto. - Siento como una lágrima de cristal amenaza con salir de mis ojos, pero en cambio sonrío, sonrío con fuerza, como si nada pudiera conmigo.

- No es nada. - Me responde sonriente y besa mi coronilla.

Le he cogido cariño al hermano de Abby en estos días. Es cariñoso, divertido y atento. Ojalá pudiera tener una familia como él...

Abby me acompaña y sale al porche. No aparta la vista de mi, ni yo de ella. Le doy las gracias unas cinco veces y cuando la abrazo algo estalla en mi; todo lo que se acumulaba en mi interior cae, el agua mana de mis ojos, pero no lloro de tristeza, por primera vez en mucho tiempo lloro de felicidad, y ella me abraza, acaricia suavemente mi espalda y besa mi mejilla.

Lonely Hearts Club (H.C #1) // #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora