No dejes de mirarme.

Capitulo 6.-¿Eres su novio o que?

Después de una plática acerca de lo que podía hacer y no, mi tía y mi abuela se fueron de la habitación. La abuela no quiso tocar nada más, dijo que cuando asimilara la información podría ir a preguntarle directamente acerca de algo en especial.

Básicamente mis poderes consisten en manipular la energía, hacer hechizos, cambiar las cosas de estado por un determinado tiempo, según entendí nada era permanente al menos en mi caso de principiante, pero supongo que de un apuro si me sacarían. También podía invocar rayos, sacarlos, electrocutar, manipular los elementos, conectarme con la naturaleza etc. No pensaba utilizar mis poderes, seguía siendo la misma a pesar de ya no ser tan humana, seguiría llevando una vida normal y por otra parte aun las cosas no estaban muy claras. Anotaría en una libreta las preguntas que quería hacer, porque la verdad tengo muy poca retención.

Aún en mi mente, estaba la maldición. Solo deseaba encontrar a alguien que estuviera dispuesto a esperar mientras el destino nos juntaba. O quizás sería mejor que nunca amara, según entendí a nadie en la familia le había ido bien en las relaciones amorosas. O tal vez enamorarme de alguien inmortal para que no pueda morir. Mejor dejaría de ser tan ingenua.

—Ahora entiendo porque tu abuela, parece tu mama, tu tía parece tu prima y tu mama parecía tu hermana—Liz se tapó la boca con la mano, al darse cuenta que había tocado el tema de mi madre.

—No te preocupes Liz...—Dije fingiendo que no me dolía.

—Entonces...—Dijo Liz pensando—.Volviendo al tema de Azrael, dices que te dijo que lo buscaras, cuando estuvieras lista. Pero no sabes cómo, ni que quería decir con "estar lista"—Simulo las comillas con los dedos. Asentí con la cabeza.

— ¿Azrael? ¿Así se llama?—Dije mostrando más interés del que debería.

Ella me miro entrecerró los ojos y sonrió con malicia.

—Bueno...—Se encogió de hombros—.Pues así le llamo Melek, no sé si sea su nombre—Se sonrojo y entendí el mensaje.

¿Ella y el tal Melek?

—¿Quién es Melek? ¿Acaso es el que te guiño el ojo antes de que me desmayara?—Dije con voz melosa, ella se sonrojo más y puso una sonrisa idiota en la cara.

Sí, si es ese.

—Si—Dijo y no pudo ocultar nada de su entusiasmo.

Dramática.

— ¿Sabes que tienes una sonrisa muy tonta en tu cara, no?

—Si—Gritó de la emoción—.El me pidió mi número, es tan lindo...—Movió las manos enfrente de su cara—.Y tan guapo, con sus ojos azules... Y tan sexy...

Revolee los ojos.

—¿Te gusta?

—¿Qué si me gusta? ¡Dios! Me siento enamorada, podría casarme ahora mismo, tener bebes y una enorme casa en la montaña con vista al lago—Hizo una pausa—. Respondiendo tu pregunta, si, si me gusta. Me encanta.

Esta vive en la ilusión.

Le sonreí, me sentí feliz de que ella hubiera conocido a alguien, aunque esos tipos no tenían muy buena pinta que digamos.

—Oye por cierto, hay una fiesta en el pueblo, en la noche, hay que ir—Dijo Liz leyendo el mensaje que acababa de llegar a su teléfono—. ¿Qué dices?—Me miró.

—No, no tengo ganas de salir, tengo muchas cosas en que pensar.

— ¡Ay, no! No, no, no—Negó con la cabeza—.Tenemos que ir, necesitas olvidarte un poco de esto—Movió las manos en círculo y unió las cejas.