Capítulo 1

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--Sueltame monstruo -- le gritó a un centímetro de su cara. Le tenía sujeta del cuello y apenas podía respirar. Soltó un gemido ahogado cuando apretó más aun su agarre.
-- Escucha zorra de pacotilla, --su rostro estaba tan cerca del suyo que podía sentir su aliento en la cara-- podemos hacer esto por las buenas o por las malas.
--- Vete al infierno.
No iba a dejar que un maldito monstruo la asustara. Estaba confundida y si, debía admitirlo, tenía miedo. ¿Qué rayos se supone que era? ¿Un vampiro? Esas cosas no existían. Era como decir que un dinosaurio violeta vivía bajo su cama. Espera. Eso sí era ridículo.
Pero aún así, ella sabía que habían más criaturas además de los humanos en el mundo. Lo supo en el mismo momento en el que, cuando era una niña estaba hablando con un "niño en el cementerio" claro, un niño al cual nadie más parecía ver. Durante su vida le había pasado muchas veces. De repente alguien que vestía como de siglos atrás pasaba por su lado. Siempre intentaba pasar por alto. Sin notar que ella los veía.
Pero con este demonio fue diferente porque en el momento en el que lo vio, él se había dirigido a ella.
Era atractivo, y bueno quizás creerían que ella estaba loca, pero... Ya basta, deja de pensar en eso. Se regaño mentalmente. Esos ojos rojos la miraban con mucho odio. ¿Por qué? No lo sabía. Pero estaba segura que por esa cabecita no pasaba otra idea, más que la de matarla.
Se río en su cara, una risa fría y malvada que le hizo erizar la piel.
-- Ya estoy en el infierno muñeca.
Él dirigió la vista hacia su cuello, y se inclinó lentamente. Paula intentó zafarse, pero era como empujar un muro.
Derek la mordió. Espera. ¿La mordió? SÍ, y dolía horrores. Quería gritar pero era tanto el dolor que apenas si podía moverse para intentar escapar.
Se le empezó a empañar la vista, se empezó a marear y le daban escalofríos.
La iba a matar. Realmente lo iba a hacer. No podía. Ella aún era muy joven.
Él la apretó más a él, pegando sus cuerpos total mente. Gimió y ella pensó que era un adorable sonido. ¿Adorable? Si. Pero Dios, como le dolía. Ya hasta estaba delirando. Las fuerzas le flaquearon cuando empezó a desmayarse. ¿Por qué el mundo era tan cruel, y una especie de Dios pagano tenía que matarla? Debía reprocharse a sí misma por pensar en eso. Iba a morir ¿Qué rayos pasaba por su cabeza ?

...
Hola, espero realmente que os guste esta historia. Y bueno UnUr.... lindo día :*

Derek el VampiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora