RESET (jikook)

3

Camine de vuelta a mi casa sin querer gastar ningún peso innecesario en locomoción si tenía piernas buenas porque no usarlas en vez de gastar ese dinero que podría ocupar en medicina o comida para nuestra casa. Inserte las llaves en la puerta y esta se abrió dejándome ver la oscuridad. Una hora completa caminando, mi casa queda demasiado lejos. Pero no me podía mostrar cansado no lo haría delante de mi agotada familia.

-kookie...eres tú? –di un brinco en mi lugar intentando calmar mi susto con mi mano reposada en mi pecho. Encendí la luz encontrándome así con mi hermano con ojos llorosos.me acerque rápidamente y le abrace-

-porque lloras? –tome a mi hermano de la cintura y lo senté en el sofá junto a mi acaricie su cabeza con aquel gorro que siempre llevaba puesto y le sonreí. Él me sonrió-

-mama no me quiere dejar salir...-mi confusión se hizo presente, mama nunca ha dejado salir a taehyung, no sé porque pero siempre le reta y le prohíbe sus salidas conmigo-

-no te preocupes mañana ambos iremos y comeremos helado con el dinero de propina que me dieron hoy, si? –el asintió y me abrazo, las escaleras rechinaron y mi madre cruzada de brazos se hizo presente-

-no te lo llevaras de acá –mi sonrisa se borró me puse de pie-

-hablemos en la cocina –mi madre se soltó de mi agarre y apunto a taehyung acusadoramente-

-no, él me debe escuchar, él es el culpable de lo que a tu padre le sucedió, él tiene prohibido salir de aquí –taehyung comenzó a llorar y me acerque abrazándolo rápidamente-

-tranquilo...iremos igual

-NO JEON JUNGKOOK, él no se va entiéndelo, él no puede –taehyung sujeto mi mano y la entrelazo débilmente pudiendo así sentir como estas tiritaban-

-porque no...-dije entristeciéndome por taehyung. Era su hermano y me dolía verle de tal forma solo tenía un año menos que yo, pero su apariencia era de un chico tan débil como suena, su cabello ya no estaba pero vagamente recuerdo lo guapo que solía serlo cuando aquellas hebras castañas decoraban su cabeza. Su piel es tan blanquecina por no tener contacto con el solo y es que mi madre ni para las rehabilitaciones le deja salir alegando con que debía sufrir lo mismo que mi padre.-

-él, es una vergüenza...arruinara tu reputación...-me puse de pie y lleve taehyung conmigo en brazos y lo recosté en su cama. Como desearía irme a veces de casa y alejarme lo más posible de mama, pero yo no podía mi padre estaba con ella...-

Taehyung suspiro tristemente y limpio sus lágrimas mostrándome una sonrisa triste

-hyung, como estuvo tu día? –sonreí y negué riendo-

-hoy solté el pastel y tuve que comprar uno con mi dinero, luego vi a un chico que...-enmudecí sin comprender de donde diablos recordé al chico que lloraba. Taehyung me miro interrogante y yo reí-

-que...? –me reí y taehyung se sentó en la cama observándome-

-bueno...él estaba llorando –taehyung frunció el ceño-

-solo eso? –asentí jamás le diría que lo encontré lindo mientras lloraba- hyung eres un aburrido! –reí mientras me quitaba la camisa y la colgaba en el perchero de nuestra habitación compartida. Deslice mi pantalón y me gire encontrándome con taehyung durmiendo. Sonreí y le bese la frente-

-te amo...-puse mi pijama y me tendí en el piso mientras el dormía en la cama. Lo prefería de aquella manera de otra forma el lastimaría más su columna-

-hyung...-me senté enseguida y taehyung me hablaba con los ojos cerrados- cuando vuelva a caminar, podremos caminar juntos e irnos verdad? –sonreí y asentí aunque no me viese- hyung...

-mmh?

-me haces dos favores? –asentí- apaga la luz me duelen los ojos –reí poniéndome de pie- y por favor, me puedes cantar lost stars?

Cante toda la noche lentamente casi en susurros taehyung pareció dormirse y me acosté dejando soltar suspiros de frustración como siempre lo hacía en las noches.

El tener 16 años para mí era tener una edad ajetreada donde todo depende de mí, pero estaba bien de esa forma, si tenía a taehyung conmigo para siempre podría serlo para siempre...podría despertarme como todas las mañanas tempranos ayudar a vestirle tanto a él como a mí, bajarlo, ir a clases, trabajar, volver a casa y así esforzarme lo más que pueda.

'��