RISKI GAME

Pijamada (2da parte)

-Solo vine a dejarte tu oso de peluche: "El osito JU". -me lo entrega.

Veo de perfil, y Alex se esta meando de la risa...

"Genial..."

"Hasta en momentos como este, no deja de ser un jodido imprudente."

-Largo...-susurré para que Alex se vaya de alado de la puerta.
Y lo hizo, logró esconderse detrás del sillón.

-¿Y bien?-me distrajo mi padre.

-¿Qué pasa?- me confundí ante su pregunta.

-¿Cómo va todo? ¿La están pasando bien?

"¡¿Y ahora que coños digo?!"
"¡Maldito papá! ¡¿Por qué serás tan chismoso?!"

-Ehhh...esta-estamos bien. Todo va bien...-hice notar mi nerviosismo al tartamudear.

-Bueno... saludos a Caro, a Karlita, y a ese tal amigo tuyo: Alexander.- a este último lo nombró con desagrado...

-Ah... sí, sí. Claro papá. No te preocupes.

-Bueno...creo que ya me voy...

"¡Gloria a Dios!"

-Em... claro, gracias por traer a JU.

-De nada mi pequeña.-despeina mi cabello en signo de cariño.

-Jajaja...-se tapó de inmediato la boca.

-¿Qué fue eso?-preguntó mi padre con su típica cara de intuición negativa.

"¡Alerta roja!" ¡Maldito Alexander que no puede cerrar su bocota!"

-¡NADA!-me exalté- Nada pa, nada... Solo mi voz interna riéndose...-mentí.

-Ah...bueno, bueno. No olvides que paso por ti a las 10.-me informó con una ceja enarcada. De seguro no me creyó, ¿y quién lo haría? Si ni yo misma me la creo. Soy pésima para mentir.

-Aja...Sí. No te preocupes.

Me sonrío con ternura y se fue.

Cierro la puerta al fijarme que ya no está, y noto como me mira.

-Así que... Osito JU, nos va acompañar en nuestra velada.

-¡Oh cállate!

-¿Pero acaso estoy mintiendo?

-Cierra el pico, ya que por tu culpa de reírte casi nos descubren.

-Pero yo no soy tan malo mintiendo.- se cruza de brazos en mi delante.

-Aysh... pero si que eres un jodido engreído...-dije desviándome de él y tomando asiento en el sillón de antes.

-Jajaja...-ríe y se sienta a mi costado.

-¿Y ahora qué te causa gracia?

-Nada. Es que se me hace muy gracioso verte.

-Uy si, como no.-ataqué con mi sarcasmo.

-Bueno ya. A ver, préstame a JU.-intentó coger a mi osito, pero fui más rápida y se lo quité del alcance.

Gruñó y me tiró un cojín...

-¡Alex!-me quejé al notar mi cabello despeinado.

-O me das el peluche, o todo tu cabello queda enredado. Tú decides Thalia...

-¿Quieres a JU?-lo miré con picardía.

-Sí...-desvió su mirada al oso.

-¡Pues ven por él!- me paré del sofá y empecé a correr por el apartamento.