Ha pasado dos semanas desde aquel día en la sala audiovisual y cada día despierto con la misma imagen en mente... Aquel momento se reproduce en mis sueños como una película, a pesar de lo que paso Ian esta como si nada hubiera pasado, como si todo lo que vivimos solo fuese un loco pensamiento mío, pero he notado que su mirada es más madura y cómo si su rostro fuera más serio mientras que su forma de ser cambio a la de un chico mayor. Es viernes al fin y las clases de matemáticas están por terminar (gracias a dios) pero no he logrado entender absolutamente nada de la clase de hoy, estoy pensando seriamente en abandonar todo para salir corriendo y dejar de pensar en números y en mis sentimientos pero no puedo, no puedo sacar de mi mente las maravillosas sensaciones que el chico de cabello negro me hizo vivir y de las cosas que mi corazón me dice que faltan por vivir pero a la vez no se si sentir culpa ya que es mi amigo... Tan sumida en mis pensamientos estaba que no me di cuenta cuando la clases terminaron sino hasta que el profesor me hablo.
-Señorita Nicole necesito hablar con usted- la voz del profesor de matemáticas sonaba molesta.
-¿Que sucede? - estaba segura que me llamaría la atención probablemente por no pensar en su clase.
-Últimamente parece muy ausente no sólo en mi clase sino que en todas aparentemente, ¿Que le sucede? ¿Se encuentra bien? Es que usted no es así.
-Perdoneme profesor, no pasa nada, es solo que me esta costando trabajo entender las clases eso es todo - por un momento pensé que no me creería.
-Bueno siendo eso lo que la tiene tan ausente, será mejor asignarle a un tutor de esta clase para que vaya al corriente con el resto de sus compañeros- dijo el maestro mientras miraba por todo el salón buscando a alguien - joven Ian ¿puede venir un momento? - maldecía por dentro mi suerte al escuchar ese nombre.
-Diga profesor - contesto Ian al llegar a lado mio.
-Quisiera que fuera el tutor temporal de la señorita Nicole ya que parece tener problemas no solo en mi materia, ¿Puede hacerce cargo?
-Por supuesto, no tiene de que preocuparse.
Cuando salió el profesor del salón regrese a mi lugar para tomar mis cosas y salir pronto de ese lugar esperando que Ian no me hablará o me mirara con esos hermosos ojos grisáceos, me sentía aún más incómoda al notar que no se movía del escritorio y que el salón ya se encontraba vacío logrando que mi mente reproduciera como una especie de flashback el "día uno", cuando menos lo esperaba ya estaba el parado justo detrás de mi apoyando su cabeza en mi espalda.
-Te veré mañana en mi casa a medio día para poder estudiar la materia... No llegues tarde por favor- me hablo con voz sería pero a la vez algo seductora.
-Espero que solo me des la asesoría que el profesor te pidió - tenía miedo de que se repitiera lo de hace unos días.
-¿Que pasa Nicole? ¿Ya te asustó el reto de los 15 Días? - pregunto sarcástico pero a la vez desanimado.
-Lo que piense o deje de pensar no es asunto tuyo - conteste para acto seguido voltear a darle la cara -además de que no quiero mezclar ese "reto" con lo que verdaderamente importa - sabía que lo lastimaría pero era necesario decírselo.
-Y yo lo entiendo... Además ¿cuando mencione eso desde el principio?
Silencio, eso paso, tenía la razón ya que el jamás me menciono sobre el reto, fui yo la que se adelantó ante los hechos pero que esperaba ¿Qué olvidará el incidente así cómo el?¿O que saltará de gusto y alegría? No logro entender aun que es lo que pasa en mi mente y mi corazón ya que mi mente da mil vueltas, mi corazón late a más no poder y algo en mi ser hace que las mil emociones de antes regresen a mi.
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15 Días Contigo
RomanceNicole una chicha de 17 años acepta un reto de su mejor amigo Ian quien le propone hacer el reto de los 15 días, sin saber que este reto o juego la llevaría a un mundo lleno de experiencias nuevas e inexplicables