Capítulo 27: En bandeja.

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Los tacones de los botines de Alison resuenan por la solitaria calle donde sólo ella anda ahora mismo.

Son estos los peores momentos, cuando se queda sola, cuando no hay nadie distrayéndola.

Entonces se acuerda de él.

La charla que tuvo con Lindsay la ayudó. Ella hizo lo que Alison esperaba de ella: la animó, le ayudó a superarlo, y aunque se lo agradece mucho, las cosas no se olvidan de un día para otro.

No han vuelto a hablar.

Sabe que él lo ha intentado. Le ha esperado despierto todas las noches, ha estado a la hora que ella volvía del instituto para comer...

Sin embargo, ella ha hecho un voto de silencio.

Realmente cree en lo que le dijo a Taylor. En un principio pensó que se arrepentiría.

Está completamente segura de que está enamorada de él, pero, ¿a qué precio? ¿Merecen la pena las peleas, las continuas diferencias, las complicaciones?

Porque le quiere sigue adelante con lo que tiene entre manos, porque quiere verle libre y completamente feliz.

Si bien aún no tiene claro qué hará después, no está preparada para volver a empezar de cero. No todavía.

Ahora, en sus vacaciones de Navidad, su único objetivo es terminar de una vez por todas.

Por fin llega de nuevo a la nave en la que la semana pasada conoció a Chuck Sullivan.

Esta vez, cuando entra, aunque no son los mismos hombres, estos no le cierran el paso.

Sonríe con satisfacción mientras sube las escaleras a paso lento.

Él la espera recargado en la puerta de su despacho.

-Hola –saluda primero él.

Ella le devuelve el saludo con un gesto.

-¿Qué me traes?

-Te traigo –dice apartándole para pasar al despacho- la cabeza de Mackenzie.

-¿Cómo puedo creerte?

-No tienes por qué hacerlo. No tengo ninguna prueba que lo demuestre. Pero tampoco tienes por qué no hacerlo.

-Es un juego interesante, pero no puedo arriesgarme, cielo. En mis filas no confío en nadie que no me demuestre algo.

-Y haces muy bien. No tengo pruebas de haber matado a Mackenzie, pero lo he hecho. Lo encontré en una pensión destartalada donde a punta de pistola lo arrastré fuera. En un lugar alejado acabé con él. Es la verdad. Pero no tengo pruebas. Sin embargo confío en que la información que tengo de Taylor Green te empujará a creerme –dice ella con la calma de quien se esperaba la reacción de su rival.

Repentinamente interesado, Sullivan se echa hacia delante.

-¿Y qué información es esa?

-Sabe que vais a por él. La madrugada del 31 de diciembre al 1 de enero cogerá un avión a Brasil, donde ya lo tiene todo organizado. Sus colegas le ayudarán; él ha hecho mucho por ellos. Hay que pillarle antes de que escape o será tarde.

-¿Qué sugieres?

-Yo misma me encargaré de entretenerlo esa noche, y a la medianoche debéis entrar. El vuelo saldrá a las 1:30 de la madrugada, para entonces ya estará muerto. Asunto arreglado.

-¿Cómo has conseguido esa información?

Ella sonríe tristemente.

-Eso es asunto mío.

-Está bien. Si tu plan sale bien, estás dentro.

-No me vale estar dentro.

-Quiero decir que serás, bueno, ¿qué te parece mi mano derecha?

Sonríe fríamente.

-Claro. Será estupendo.

Hace amago de marcharse, pero suavemente él la detiene.

-Me preguntaba si esta noche tenías planes.

Una carcajada estalla en su interior.

¿Realmente le está pasando esto a ella?

¿El criminal más buscado de todo Nueva York le está pidiendo una cita como un chico tímido?

Definitivamente, es la cosa más increíble que le ha pasado.

Se acerca a él y le besa, apenas un roce de labios.

-En realidad no. Pero no creo que mezclar trabajo y placer sea lo mejor, ¿no? Pero cuando termine lo de Green, estoy segura de que no tendré planes demasiadas noches. Entonces, avísame.

Él asiente y Alison baja las escaleras.

Sale ante la respetuosa mirada de los dos hombres apostados a la entrada y hace la misma ruta de siempre hasta llegar al coche de Mike.

-¿Qué tal ha ido?

-Me ha... pedido una cita.

-¿Te ha pedido una cita?

-Sí, joder. El tío más cruel de Nueva York me ha pedido salir. Alucinante, ¿verdad?

Mike arranca, y ambos empiezan a reír.

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El final se acerca!! Espero que os guste. Muchas gracias, hemos pasado de los 400 votos!!! (Actualmente 433) Un beso


Una Princesa en Apuros ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora