Zack, ¿Tú la quieres?

Capítulo 3.

Se apartó poco a poco y me quedé mirándole - Dios...- resopló- Eres tú, ¿verdad? - me quedé callada, parada. Miró a su alrededor y terminó en el portátil ,abrió el compartimento de los CD's y ahí estaba, el suyo - Sí, eres tú- confirmo casi emocionado -Tienes una habitación muy bonita - rasqué mi cuello incómoda y caminó hacia mí - ¿Cómo te llamas? - chupé mi labio inferior y miré hacia otro lado - Vamos, háblame, porque deseo escuchar tu voz, saber cuál es- pasé saliva- Si no me dices tu nombre mañana pasarán lista y lo sabré - susurró y yo agaché la cabeza.

Coloqué un mechón de pelo detrás de mi oreja y me balanceé en mis talones -Empieza por N- dije en voz baja y él sonrió.

-Tienes una voz muy bonita- cogí aire- ¿Natalia? - miré y negué - ¿Nadia? - puse cara de asco - ¿Nerea? , ¿Nagore?, ¿Noelia? Dame una pista- gimió.

-Sigue por I- él se quedó pensativo - Me llamo Nina- dije finalmente.

-¿Nina? ¡Pero eso es nombre de mascot...- se quedó callado -Ups, perdón.

Resoplé -Está bien- alguien llamó a la puerta y abrí de forma rápido.

-¡Hola chicos os traigo vitaminas para que hagáis el trabajo al 100%! - apreté los puños enfadada y tiré de mi madre hacia afuera mientras ella gritaba por la rendija de la puerta a Zack que si éramos amigos.

-Sí, llevamos juntos...- exageró -Desde el primer día que empezó en el instituto - le asesiné con la mirada, lo que faltaba, echar leña al fuego. Saqué de un tirón a mi madre.

-Es guapo- sonrió de forma cómplice - ¿Es tu novio? - alzó ambas cejas.

-¿Qué? ¡No!

-¿Por qué nunca le has traído, se quedará a comer?

-Mamá. V-E-T-E - ella bajó contenta, creía que por fin su hija la rara había conseguido pareja. Entré roja de la vergüenza y Zack me sonrió para luego cogerme las manos, miré raro su muestra de afecto.

-Chica anónima, siento haberte mandando una nota con tantas barbaridades- miré intranquila hacia otro punto de la habitación -Pero te ruego que me ayudes, necesito que lo hagas. Sidney sigue con ese tal amigo tuyo y yo ya no sé qué más hacer, necesito tus consejos...

- Pero yo... yo sólo he estado con un chico en mi vida yo no sé de esas cosas y...

-Pero eres una chica- me cortó -Sabes lo que la gusta, usáis sujetadores y esas cosas- rodé los ojos - Por favor ayúdame, de verdad la quiero.

Y entonces lo sentí.

Sentí algo roto.

Algo que no había sentido antes.

Algo que no había logrado comprender.

Yo, junto otras cientos de chicas más estaba perdidamente enamorada de Zack.

Del verdadero Zack.

Y él, bueno...él estaba enamorado de otra.