Adicto al sexo (Yaoi)

Futuro

— ¡Y la guinda del pastel fue que los vi juntos, felices y satisfechos luego de una pasional sesión de sexo en la cama de mis padres! —finalizó Alex estallando en carcajadas junto a Scott.

Lo miré sin poder creer lo que acababa de decir— Dime Alex que es una broma —le pedí casi suplicando con la mirada.

— No te estoy mintiendo —dijo entre risas—, de hecho mientras tú dormías como bella durmiente alcoholizada, tu noviecito cambió sábanas y te vistió —mis ojos no dejaban de mirarlo con horror—. Por lo que veo te no te lo dijo —volvió a reír.

Asentí— No me dijo nada de aquello, desperté en mi habitación con el cuerpo adolorido, pero pensé que era producto del alcohol.

Bufó divertido— Parece que la pasaron fantástico, Will tenía una sonrisa de oreja a oreja —tras decir aquello volvió a reír.

Me senté en el suelo ocultando mi rostro, estaba más que avergonzado, lo peor de todo es que no recuerdo nada y está más que claro que Alex me molestara con esto para toda la vida.

— Me hubiera encantado haber visto eso —escuché a Scott hablar ya intentando controlar su risa.

— Sí, pero estabas tan concentrado en pedirme que te transformara en una Monster High que no te diste cuenta.

Aquello hizo que esta vez fuera yo quien acompañara a Alex en la carcajadas, miré a Scott y tenía una expresión seria.

— Cállate —dijo cruzando sus brazos.

— Ay —dijo Alex que limpiaba una lágrima imaginaria de tanto reír—, ustedes son la causa de mi felicidad —se acercó hasta Scott para pasar un brazo por sus hombros—. Tranquilo, para la próxima me dedicaré a mantenerlos alejados del alcohol, aún son unos bebés para estar tomando tanto.

Me levanté— Más te vale, no quiero hacer cosas y no poder recordar.

Rió— Está bien, por cierto, ¿donde está Mabel?, no la he oído gritarnos ni nada por el estilo.

— Está enferma, salió junto a sus amigas y comió pizza, el resultado fue ahora parece manguera de bombero vomitando, creo que el queso le hizo mal —le respondí.

— ¿Debería ir a verla? —preguntó con una sonrisa.

— Sí vas estoy seguro que te echará de inmediato, al único que quiere aquí es a Eliott, a ti te odia y a mi también, y eso que nunca le he hecho nada malo —dijo Scott.

— Le quitamos a su mejor amigo —respondió Alex con una sonrisa—. ¿Irás a verla? —me preguntó.

Asentí— Quiero verla antes de que muera.

— Le mandas mis saludos —dijo Alex.

— Dudo que los quiera —respondimos al mismo tiempo Scott y yo haciendo que de inmediato los tres comenzáramos a reír.

*

Cuando volvimos a clases sólo estuve dentro cinco minutos, hasta que me dijeron que debía retirarme, que un primo había venido por mí, ya que, mí tía le había ocurrido un accidente. Por lo que yo recuerdo no tengo ninguna tía ni un primo. Así que un tanto desconfiado me retiré del salón hasta llegar a la entrada del colegio topándome con una silueta familiar.

— ¡Tú! —me dirigí hacia él corriendo para encararlo mientras que sólo me observaba con una sonrisa—. ¿Por qué no me dijiste sobre lo que ocurrió entre nosotros durante la fiesta? —pregunté con un volumen moderado para que nadie dentro del colegio escuchara.

— Se me olvidó —y tras decir aquello Will volvió a sonreír.

Lo miré con desconfianza— Tonto, estoy seguro que abusaste de mí sólo por estar bajo los efectos del alcohol.

Bufó divertido— ¿Yo abusar de ti? —comenzó a reír con exageración provocando que un par de personas se nos quedaran mirando con extrañeza—, más bien tú abusaste de mí, yo intenté contenerme con todas mis fuerzas pero tú me incitaste y no estuviste satisfecho hasta que lo hiciéramos, y como el buen novio que soy debí hacer caso a tus pedidos.

Crucé mis brazos— No recuerdo nada, así que no tengo ni la menor idea de como me comporté.

— Hiciste cosas que estando sobrio jamás harías —soltó con cierto misterio con la intención de que me quedara con la intriga, cosa que tuvo éxito.

— ¿Qué hice? —pregunté rápidamente y Will sólo hizo un gesto de un cierre sobre su boca, no hablaría—, ¡Will!, ¡¿qué cosas hice?! —comencé a tironear su camisa pero nada resultaba.

Se acercó más a mí para susurrar en mi oído— Si quieres podemos revivirlo en mi departamento —dijo con un tono seductor provocando que me sonrojara de inmediato.

— No, gracias —me separé de él con rapidez para luego mirarle—. ¿Qué es esto del primo perdido que nunca conocí con la tía imaginaria que nunca he tenido?

Sonrió— Necesitaba una excusa para sacarte de aquí, después de clases no podrías por Liz —lo miré con curiosidad—. Te llevaré a mi Universidad, tengo autorización para que puedas ir en este horario, hoy mismo buscaremos algo que te guste y te pueda garantizar un futuro mejor al que imaginabas como vago.

Sonreí con ansias— Eso espero.

*

Me pasé el resto del día junto a Will, caminaba junto a él como si fuera a perderme, no pensaba que las Universidades eran tan enormes, esta quintuplica el tamaño de mi escuela, lo peor es que estaba lleno de jóvenes, algunos corriendo apurados por los pasillos u otros que solo estaban descansando en el suelo, debía comenzar a acostumbrarme a esta escena, yo pronto estaría en un ambiente parecido, claro, sólo si encuentro algo de mi agrado.

Durante mi trayecto en la institución muchas chicas se paraban para saludar a Will, algunas de forma amistosa y otras con claras doble intenciones, me causaba mucha gracia ver como él se ponía nervioso al intentar de que yo no me diera cuenta, aquello en verdad fue divertido.

Me senté junto a él en una de las bancas instaladas en el gran patio de la institución, estaba agotado y muy emocionado por todas las personas que se sentaron a dialogar sobre lo que les apasionaba, cosa que provocó en mí un nuevo sentimiento, el de querer en verdad ser bueno en algo, y eso es lo que a mí me faltaba.

— ¿Qué tal? —me preguntó Will que me extendía una botella con agua—, ¿ya has encontrado algo que te guste?

Lo pensé por unos segundos, y la chica que me habló sobre el periodismo se vino de inmediato a mi cabeza— Creo que Periodismo es lo que más me gustó —respondí mientras recibía la botella.

Me sonrió— Sabía que te gustaría aquello, vi como tus ojos se iluminaron cuando Stela te hablaba de lo que se trataba.

— Nunca pensé que sería tan genial, he visto los noticieros y he leído periódicos, pero jamás me puse a pensar sobre lo que uno debe investigar para llegar a tener tanta información —lo miré con una sonrisa—, es tan simple pero tan genial a la vez.

Sentí la mano de Will despeinar mis cabellos de forma cariñosa— Podrás viajar si trabajas a un canal de televisión, aunque me pondré celoso, muchas personas te verán en la tv y te encontrarán sexy —dijo con un puchero en sus labios.

Comencé a reír— ¿Y tú piensas que tendré la personalidad para salir en la tv? —bufé divertido—, no, para nada, si es que estudio aquello trabajaría para un periódico, ser cronista o tener una parte especial en él.

— Parece que te gustó, ya hasta te estás imaginando tu trabajo.

Lo miré y se me fue inevitable tomar su mano haciendo que se sobresaltara— Gracias Will, si no fuera por ti estaría estresado por no saber que estudiar.

Me mostró una hermosa sonrisa— No hay de qué, sin mí estarías perdido.

— No es para tanto —dije burlón.

— ¡WILL! —escuché una voz masculina llamar a Will desde lejos.

Cuando dirigí mi mirada hasta el extraño vi como un joven de la misma edad que él se acercaba corriendo hasta nosotros, era un colorín y hasta que estuvo enfrente de nosotros me di cuenta que tenía unas pocas pecas en su rostro.

— ¡Will! —dijo jadeando intentando que su respiración volviera a la normalidad—. Escuché que trajiste a tu novio a la Universidad, ¿dónde está? —preguntó con emoción.

Will comenzó a reír— Thomas, él es mi novio Eliott, Eliott, él es mi mejor amigo Thomas —miré a el chico que tenía una expresión asombrada como si estuviera viendo algo realmente asombroso haciendo que una sonrisa se asomara en mis labios.

— ¡¿Tú eres Eliott?! —preguntó con una sonrisa y yo asentí—. ¡Oh!, ¡por fin pude conocer al chico que tiene loco a mi amigo!

— ¡Hey! —le dijo Will y reí—. ¿Fumaste algo antes de venir?, estás como muy energético, ah no, tú eres así —rió y su amigo se acercó para golpearle levemente el hombro.

— Por cierto —se sentó a mi lado—. ¿Tú eres muy amigo de Mabel? —preguntó.

Sonreí— Sí, de hecho su mejor amigo.

Se acercó más a mi como si fuera a decir algo secreto— ¿No sabes si le gusta algún chico?

— Desde que pudo conocer en persona a su grupo favorito dudo profundamente que quiera algo con personas occidentales.

Suspiró derrotado— Casi...

Will comenzó a reír— ¿Querías conocer a mi novio sólo para poder preguntarle aquello?

Le miró como si lo hubieran descubierto— ¡No...!, para nada.

Sonreí— Aunque Thomas —me miró—, yo tengo un amigo que igual anda interesado en Mabel.

Abrió sus ojos a más no poder— ¡No!, ¡¿por qué?! —frunció el ceño y apretó su puño—. ¡Esto significa la guerra!, ¡yo la vi primero!

— ¡Yah! —gritó Will—, es mi hermana, no cualquier cosa.

Miró a su amigo— Querido amigo, ¿por qué no me llevas a ver a tu tierna hermana?

— Si no quieres que te vomite en la cara es mejor que te quedes aquí —Thomas lo miró sin entender y él rodó los ojos—. Está enferma, muriendo en su cama.

— Casi —se levantó—. Me debo ir, tengo que hacer un exámen para el maldito profesor de Mecánica —me miró—. Ha sido un gusto pequeño Eliott.

Sonreí— Para mi también.

Sonrió y observó a Will— Nos vemos amigo.

Él se limitó a despedirse con la mano, y tras de eso Thomas se fue dejándonos solos.

— Tú amigo es muy divertido —le dije.

— He estado casi toda mi vida junto a él, todos los días es una nueva aventura con ese chico.

Reí— Me la he pasado muy bien hoy.

— Esa era la idea, y lo mejor de todo es que ya tienes algo en mente.

Suspiré feliz— Sip —lo miré—, en serio gracias.

Se acercó peligrosamente a mí haciendo que me alejara un poco, pero su mano que se aferró a la mía provocó que no pudiera escapar, quedando sólo a centímetros de mi rostro— Quiero que me beses como regalo de agradecimiento.

Sentí mis mejillas arder y mi corazón palpitar con descontrol contra mi pecho— No...

Acercó su mano libre para tocar mi rostro con delicadeza— Vamos, hazlo o lo haré yo, y tú sabes como son los míos.

Desvié la mirada para que dejar de estar tan nervioso, pero se me fue imposible y volví a conectar nuestros ojos haciendo que mi cuerpo temblara. Acorté lo poco de distancia que nos quedaban para besar sus labios, en un comienzo tenía planeado hacer que fuera fugaz, pero Will aprovechó la ocasión para que fuera más profundo, dejándome llevar de inmediato por su adictivo sabor.

Cuando sentí la mano de Will comenzar a tocar mi muslo interno me di cuenta del nivel al cual había subido el beso y el lugar en el que nos encontrábamos, así que me di el trabajo de separarme lentamente de él. Al abrir mis ojos me topé con los suyos y me sorprendí al ver sus pupilas dilatas, eso sólo significaba una cosa...


Will se había excitado...

— Vayamos algún baño —dijo él parándose y llevándome consigo dentro de la Universidad.

— ¿Eh? —me detuve haciendo Will detuviera el paso—, no pienso hacer nada aquí, alguien podría encontrarnos.

Me observó por unos segundos para luego suspirar— Está bien —sonrió de una manera seductora haciendo que un escalofrío recorriera toda mi espalda—, iremos a mi departamento.