SÍ, CAPITÁN

24

Plan de escape

(Narra Ryan)

- ¡ NO ME TOQUES ! - grité con todas mis fuerzas mientras me revolvía en las cadenas.

- Tranquila nena , no te haré daño- rió mientras arrastraba sus asqueros manos por mi pecho.

En ese momento vi al Capitán entrar en la puerta , y comprendí que había usado la minúscula navaja que le había pasado para deshacerse de sus ataduras y , probablemente , para matar a su carcelero y escapar.

Sonreí aliviada en mi interior .Pronto huiría de allí.

- Aparta tus sucias manos de mi cuerpo - le espeté mirándole con toda la furia que tenía acumulada.

- No seas tan cabezota , sin en el fondo lo estás disfrutando - respondió seductoramente , pero aquella sonrisa no era nada comparada con la que me dirigió el Capitán aquel día en el campo de tiro.

Sabiendo que él estaba justo detrás, me eché hacia adelante y aprovechando lo pegado que estaba ese tío a mi, pasé mis piernas por su cabeza manteniéndole inmóvil y apretándole para cortarle la respiración.

Antes de que pudiera gritar , el Capitán ya había deslizado la navaja por el cuello de mi vigilante , y soltándolo , su cuerpo cayó en redondo al suelo.

- ¿ Ryan , estás bien ? - se preocupó mientras fruncía el ceño.

- Bájame de aquí , por favor - suspiré más tranquila.

Él se estiró para alcanzar mis ataduras y las soltó, agarrándome antes de que me golpeara contra el suelo.

- Gracias - susurré poniéndome colorada al sentirlo tan cerca de mi.

- N-no hay de qué - tartamudeó, dándome a entender que también estaba nervioso - Al fin y al cabo si vamos a salir de aquí es gracias a ti.

Me dejó en el suelo y me agarró de la mano antes de abrir la puerta.

- Ahora vamos a tener que movernos silenciosamente por gran parte de su barco, ¿ lista ?

Asentí algo asustada.

- ¿ Sabes donde está la doctora ? No podemos dejarla aquí- susurré mientras avanzábamos mirando a nuestro alrededor.

- Oh, no te diste cuenta, ella no es la doctora- respondió con una sonrisa y él me miró confundido.

- ¿ Quien es entonces ?

- Es una soldado rusa , un topo en "el Oceanus" .

- ¿ Una traidora ? ¿ Y cómo es que no la han reconocido si trabaja para ellos ?

- La chica pasaba información , nunca se han visto en persona. Y para que no pudiera hablar la verdadera doctora le dió una pastilla que paralizaba parte de su cuerpo.

Salimos a la cubierta sin problemas.

- El teniente Darren nos estará esperando más adelante , pero tendremos que nadar un poco.

Él miró el mar con el ceño fruncido y asintió. Por suerte estaba en calma.

- Vamos allá entonces - apretó nuestro agarre y tras hacernos una seña , saltámos a la vez hacia delante.

Salimos en seguida hacia la superficie.

- Joder que fría - me castañearon los dientes.

- Será mejor que empecemos a nadar . Cuanto antes lleguemos a la lancha, antes saldremos de este líquido negro.

Conforme , le solté de la mano y comenzamos a nadar con rapidez.

Tras diez minutos de un increíble esfuerzo , divisé a Darren.

- Mira , allí está el teniente - tartamudeé del frío.

- Genial, vamos - hizo un gesto con la cabeza y continuó.

En ese momento , un calambrazo recorrió mis piernas que dejaron de moverse. Y comencé a hundirme.

- ¿ Ryan ? - me preguntó confundido al ver que no le seguía.

Chapoteé con los brazos , luchando por mantener la boca fuera del agua.

- ¡No puedo moverme! - grité asustada , y mi cabeza se hundió.

Aguanté la respiración mientras seguía agitándome para volver a subir mientras el aire se acababa en mis pulmones.

Entonces sentí sus brazos en mi cintura y me empujó hacia arriba.

(Narra Lymingway)

- ¡ Heming ! - grité asustado mientras se hundía.

En un minuto estuve a su lado. La agarré y tiré de ella hacia arriba.

Ella tomó una gran bocanada de aire y comenzó a toser expulsando agua.

- Respira , tranquila - le aconsejé mientras agarraba su cintura para que no volviera a hundirse - te tengo.

- T-tengo f-frío - tembló violentamente y observé preocupado como su nariz y sus mejillas adquirían un tono liláceo.

- ¡ Capitán , vamos ! - me susurró Darren desde la lancha.

Pegué a Ryan a mi cuerpo, aguantándo el dolor al restregarla contra mis heridas, y la besé intensamente , con la esperanza de que su cuerpo reccionara y sintiera algo de calor.

Pero ella sonrió antes de caer inconscientemente.

- Darren, súbela - le pedí empujándola hacia arriba para que pudiera cogerla.

- Ya la tengo , Capitán , suba - me tendió la mano y me ayudó a entrar en la lancha.

Me tendí sintiéndome medio muerto y congelado mientras la lancha arrancaba , y el teniente me tiraba un par de mantas mientras abrigaba él mismo a Ryan. Y yo también cerré los ojos.