36

31.9K 2.1K 68
                                        

(Nota de la autora : Querid@ lect@r , solo quería avisarte de que estas leyendo el último cap de esta novela. El siguiente será el Epílogo )

Asesinato

(Narra Ryan)

Mañana por la mañana nos iremos de este puerto, así que nos han dado esta tarde para descansar.

Yo he aprovechado para dar una vuelta y despejarme. En eso estaba cuando vi un supermercado : "Chocolate&friends".
Y que mejor modo de alegrarse cuando estás deprimida que un poco de chocolate. O mucho.

Entré haciendo sonar la campanilla de la puerta, saludé y me metí en la sección de dulces. Simplemente delicioso. La puerta volvió a sonar un par de veces más mientras yo escogía una buena cantidad de chocolate con leche.

Caminaba hacia la caja cuando escuché un grito :

- ¡EL DINERO DE LA CAJA , RÁPIDO! ¡TODO EL MUNDO QUIETO!

Algunos chillaron asustados tirándose al suelo. Me escondí en uno de los pasillos y saqué mi pistola de debajo de mi camiseta. ¿ Quien me mandaba a mi a comprar chocolate en la tienda a la que iban a atracar ?

- ¡ TÚ ! - escuché andar con pasos rápidos y fuertes a aquel tipo. Me asomé para ver que hacía. ¿¡Espera , ese no era Tex?! - Con que de la marina, ¿no? Más te vale que no quieras hacerte el héroe porque te tengo en una situación bastante comprometida.

Mierda. Le apuntaba con su pistola a la cabeza.

- QUE SAQUES EL DINERO DE LA CAJA JODER , ¿ QUIERES QUE TE MATE ? ¿¡ O LO MATO A ÉL ?! - gritó furioso y la chica que estaba tras el mostrador pulsó unos cuantos botones temblando. Ese tío no se iba a salir con la suya.

- ¡TIRA LA PISTOLA!

Esta vez , fui yo la que vociferó.

- ¿ Y TÚ QUIEN CARAJOS ERES ? AH, OTRA DE LA MARINA , ¡¿ ES QUE NO ME VAIS A DEJAR TRANQUILO ?!

- La pistola, en el suelo. Ya- ordené calmadamente mientras le apuntaba y él estalló en carcajadas.

- Mira, niñita , tengo a tu capitán con una pistola en la cabeza, ¿ y tu vas y me amenazas ? Me parece que no eres muy inteligente - se burló mientras que llevaba su dedo al gatillo.

Entonces tomé una decisión. Tex pareció entenderme, porque asintió de forma casi imperceptible. " Te quiero " movió los labios y mi corazón dió un vuelco.

- Está bien. Dejaré la pistola, pero no le hagas daño - fingí, llevándome la pistola a la espalda.

El ladrón soltó un poco su agarre aliviado, y fue cuando disparé.

Los peores segundos de mi vida. Si fallaba aquello que nunca había logrado conseguir, mataría al hombre que amaba.


SÍ, CAPITÁNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora