—Lauren.. te voy a besar —me advirtió Justin
—No Justin —agaché la cabeza —Te queda prohibido hacer eso —le apunté
— ¿Por qué? —se rio
—Porque no quiero, ahora bájame —le dije y me fué dejando despacito en el suelo, pero bueno es Justin Bieber el no me iba hacer caso a mi así que me besó
Pero esta vez fue diferente no sé porque no quise detenerlo, Justin tenía una forma única de besar, era delicado, dulce un beso lento de esos que te quitan el aliento, no me percate de nuestra cercanía hasta que sentí los brazos de Justin envolverse en mi cintura, jamás me habían besado de esa manera, jamás había sentido como mi corazón amenazaba con salirse, pero Justin solo me parecía lindo, por eso no entendía porque estaba sintiendo ese tipo de cosas
— ¿Por qué hiciste eso? —le pregunté
—Yo te lo advertí —me sonrió
—Quiero hablar contigo —suspiré
—Estamos hablando —se rió
—En un sitio donde no nos este mirando todo el mundo —dije y me sonrojé
— ¿Quieres hacer cositas? —me susurro al oído
—No Justin —me reí —Solo quiero hablar
—Está bien, ven conmigo —me tomo de la mano pero yo me solté y solo lo seguí
Se sentó en un lugar un poco alejado pero aun podía verlos a todos, ya no nos prestaban mucha atención así que eso era buena señal, me senté junto a Justin y suspiré.
—Mira Justin no sé si tú estarás acostumbrado a que todas quieran besarte o a que todas giren a tu alrededor pero —empecé a decir pero él me interrumpió
—Ya sé lo que dirás tú no eres así ¿verdad? —me sonrió
—Exacto, es por eso que de verdad no quiero que me vuelvas a besar —lo miré seria
—Pero tú de verdad me gustas —levantó los hombros
—No Justin yo no te gusto, tu solo no puedes con la idea de que alguien no caiga a tus pies —fui lo más sincera posible
—Golpe bajo —hizo una mueca
—Lo siento si fui muy sincera —me disculpe
—No eso estuvo…bien supongo —dijo confundido —Tal vez tengas razón —suspiró, me sentí un poquito mal, ya sabía que no le gustaba pero escucharlo de sus labios fue un poco incomodo
—La tengo —sonreí
—Cambiando de tema ¿Por qué no te gusta el agua? —me pregunto divertido
—Bueno no es que no me guste es solo que a esta hora se ve muy oscura y me da un poco de miedo —dije tímidamente
— ¿Por qué? —me pregunto
—Porque no veo lo que está debajo de mí y no me gusta —levanté los hombros
— ¿Por qué te mudaste hasta aquí? —me pregunto
—Por el trabajo de mis padres —lo dije sin mucho ánimo
—No suenas muy animada —se rió
—Me da igual el lugar en el que esté —levante los hombros
— ¿Y tus amigos? —me pregunto
—Yo no tengo amigos —me reí
—No es bueno estar solo —dijo Justin
