Durante la semana, entre tantos desfiles de moda coincidimos con Jared un par de veces. Él me saludaba como un conocido más.
En una cena benéfica entre tantos desfiles, volví a encontrármelo. Todo el mundo íbamos de etiqueta.
A la hora del café todo el mundo se levantó de su mesa y pasó a otra sala distinta del restaurante.
-Hola Tamy.-Me saludo Jared al cruzarnos, yo salía de la sala para hacer una llamada.
-Hola, buenas noches.
-Has pensado mi oferta?
-Lo siento pero no puedo aceptar, la señora no confía en nadie mas que en mi.
-Pero mírate, eres digna de admiración, que gran lealtad. -hizo un gran cumplido.- Eres demasiado joven para marchitarte a su lado.
-Como?- no entendía a lo que se refería.
-Necesitas probar cosas nuevas, creo que no valora realmente tu trabajo.
-Te equivocas…
-Apuesto a que te encargas también de sus medicinas…- realmente dio en el clavo y se dio cuenta por mi cara.-No puedes ser su cuidadora, terminaras derrochando por el suelo todo tu talento.
-Jared lo siento, a que viene tanto interés por mi?
-Realmente no lo se, el primer día que te vi captaste toda mi atención, te vi tan centrada en tu trabajo aunque estuvieras disfrutando del desfile, estabas mas centrada en tus tareas. Con forme te he seguido viendo los siguientes días he observado como te las gastas, lo realmente viva que llegas a ser, derrochas toda la energía que tu clienta no tiene. -Consiguió meterme de lleno en su pequeño discurso.
-Disculpa pero tengo que hacer una llamada.
-Lo ves, vuelves a la carga de nuevo, primero tu trabajo antes que tu.
Le miré mientras le daba a la tecla de re-llamada, me puse el teléfono al oído y me aleje.
Una vez en Barcelona estuve dándole vueltas al tema de Jared. Pero nunca me decidía. Mi jefa seguía manteniendo relación con su exmarido, incluso tenían encuentros íntimos, la única que lo sabía era yo.
Su exmarido era un viejo verde, siempre que venia a verla cuando estaba yo por su casa me hacía miraditas y soltaba algún que otro comentario fuera de tono cuando ella no estaba presente.
Hasta que una noche se propasó, mi jefa se encontraba fuera de casa, era su hora de yoga en el gimnasio, yo llevaba un par de horas en su casa archivando viejos documentos. Su ex llegó antes de lo previsto y me encontró en el despacho haciendo mis tareas. Se acercó y empezó a acariciarme el brazo, yo me aparté, pero no le bastó, empezó a decirme que era muy bonita, que le gustaba mi carne firme y se moría de ganas por lamerme. Me levanté con intenciones de salir de allí pero me agarró del brazo y me tiró sobre el diván, se echó encima de mí y me beso el cuello. Le supliqué que parara, pero no hizo caso. Una se sus manos agarraba mi pecho y la otra mi nalga. Reuní coraje y le asesté con la rodilla en todo sus genitales, haciéndole retorcerse del dolor. Cogí mi bolso y salí corriendo de esa casa.
Al llegar a la mía, Raquel se asusto al verme llorar.
-Dios mío Tamy qué te ha pasado?
-El asqueroso de Giovanni ha intentado violarme. -Raquel ya conocía todo el historial de ese hombre, siempre le contaba todo lo que me pasaba.
-Será hijo de puta!!! Vamos a denunciarlo!!
-No Raquel por favor. Ensuciaríamos el nombre de mi jefa.
-Eso es lo que menos importa ahora mismo.
-No tía, no pienso denunciar, lo que no pienso volver a esa casa.
-Vas a pedir el cese?
-Si.
A la hora me llamó mi jefa preguntándome donde estaba, le dije que me empecé a encontrar mal y me vine a casa. Sabía que no serviría de nada que le contase lo ocurrido, ella seguía amando a su ex y estaba realmente ciega para creerme a mi.
Al día siguiente pedí el cese, me rogó por que me quedara y me pregunto el porque, solo le dije que por temas familiares tenía que irme a cuidar de mi abuela. Acabó creyéndome, me pagó lo que me debía y me dio un buen finiquito, me hizo una generosa carta de recomendación.
Entre lo que tenía ahorrado y lo que me acaba de pagar tenía para poder pagar el alquiler todo un año, así que me desconecte de todo por un tiempo.
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Qué os parece? acepto comentarios :)
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Asistente personal
FanfictionUna joven dedicada al mundo de la moda comienza a abrirse puertas, propuestas de cambio de trabajo y nuevas decisiones que le haran dar un giro inesperado a su vida y al amor.