Cap. 10 "Suponiendo"

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Donghae

Como pude saque a Hyuk de aquel bar, no sabía si llevarlo a mi casa o la suya, las dos opciones me daban miedo, ya que en ambas había tentación, además no se me olvido como me vio con miedo y luego rechazo e incluso puede decir que asco, pero pese a la horrible sensación no pude dejarlo en ese lugar y arriesgarme a que le pasara algo, aunque si lo pienso bien, si yo no hubiera llegado él tendría que arreglárselas solo –maldita sea mi conciencia- no puedo dejarlo aquí, no voy a dormir tranquilo, además él cargo conmigo la vez que salimos a tomar, así que ahora me toca auxiliarlo y lo mejor sería llevarlo a su casa, así me aseguro que está seguro y como no es tarde me puedo regresar.

Como Dios me dio a entender lo trepe a un taxi y nos dirigimos a su apartamento, Hyuk iba babeando en mi hombro ya que se quedo profundamente dormido y por más que lo zamarree no despertó, así que tuve que registrar sus bolsillos buscando sus llaves, este emitía risitas mientras que mis manos hurgaban hasta que por fin las encontré, bajar del taxi fue otra historia, lo cargue al más puro estilo "saco de papas" y tratar de abrir la puerta fue toda una odisea ya que medio despertó y comenzó a agitarse, tanto así que por poco me vomita en la espalda; una vez dentro lo acosté en su cama, le quite sus zapatos y afloje su cinturón, no pensaba realizar ningún movimiento más, me dispuse a irme, cuando repare en una fotografía que tenía en su repisa, era él con una chica ambos sonreían y se veían muy felices, incluso puedo decir que era de años anteriores ya que se veía más joven, a la chica la tenia cargada sobre su espalda como si la llevara a caballito, fue curiosa la mezcla de sentimientos y emociones que me asaltaron, me sentía feliz de ver como sonreía, envidia ya que al parecer él tiene a alguien a su lado, tristeza como deseo ser yo al que cargue y lo peor celos porque estoy seguro que nunca pondría una cara tan feliz estando conmigo como la que tenía en ese momento, fue cuando comprendí que no sé nada de Hyuk fuera de la vida del hospital, no se su pasado, como era antes, si siempre fue la persona calculadora que se muestra en el hospital, aunque conmigo no fuera así, no quise seguir divagando ya que de seguro me deprimo más, lo mejor era marcharme deje, sus llaves en la mesa de noche y me fui, dude si dejarle una nota o no, al final le deje un kakao.

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Una vez en mi casa abrí el refrigerador encontré una botella de vodka y no pare hasta verle fin no quería dormir, quería olvidar todo lo que había vivido con Hyuk, fui un tonto por dejarme llevar, por besarlo y sobre todo por creer que yo le podía interesar, ahogue mi tristeza en licor con jugo de piña pero al final fue inevitable caer rendido y en mis sueños aparecía Hyuk junto a la chica de la foto.

Eunhyuk

¿Desde cuándo el sol es tan molesto?, ¡alguien le subió el sonido a la vida! Que dolor de cabeza, todo me da vueltas, me levante de la cama y fui al baño una vez duchado y con la mente más despierta caí en la cuenta que estaba en mi casa ¿cómo había llegado?, lo último que recuerdo fue la barra donde estaba apoyada mi cabeza y al final no hable con hae, soy un cobarde, mire mi foto en la repisa y una sonrisa involuntaria salió de mis labios.

-Boa, ¿qué pensaras de mí? De seguro estarás partiéndote de la risa.

Una vez terminado de desayunar decidí salir, no quería estar en casa, al coger el móvil y verificar la hora veo un kakao y para mi sorpresa es de hae.

"Ojala la cruda no sea tan fuerte"

Cuando lo leí mil preguntas saltaron a mi mente, ¿él me había traído a casa?, ¿Cómo dio conmigo en ese bar?, ¿por qué no se quedo toda la noche conmigo? Pero si sere tonto, obvio no querría estar a mi lado después de todo lo que le dije, mis animos cayeron no quise salir, tenia cosas que pensar.

Días después en el hospital de Seul (narrado en tercera persona)

Fue toparse en el checador y verse, solo un "hola" salio de sus bocas, no dijeron nada más, hae bajo la mirada y hyuk se dirigió a los vestidores sin voltear, no había nada que decirse aparentemente, ambos suponían lo incorrecto del otro, pero uno era muy tímido y el otro tan soberbio que al final callaron lo que tanto deseaban expresar, perdón y amor, pero la vida da muchas vueltas y no sabes quién entrara en esta inesperadamente, haciendo que hae confié más en sí mismo y enseñándole a hyuk apreciar lo que pudo haber sido suyo.





Pudiste ser mi todoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora