In Love Enemies

Capitulo 19 Luz De Oscuridad

🌟Gladis________________________________________________
Mis ojos se quiebran y dejan expulsar un ardor terrible cuando Benazir me exclama la noticia. Adelize está muerto y mi interior expira dolor y amargura.

-No puede ser- exclamo una y otra vez.
-Estoy destrozado Gladis, tan destrozado como tú- responde Benazir, a quien el traje se le ha manchado de sangre y lágrimas.
-¿Cómo te enteraste?- le pregunto mientras me trago las lágrimas que ruedan sin cesar hacia mi boca.
-Pues...- se ahoga en una bocanada de aire frío- no sé- y llora a moco tendido.
Mi siguiente reacción es abrazarlo mientras me contagia el doloroso llanto. Pero la duda sigue repicando en mi cerebro.
-Vamos, que tal si solo es una suposición- le hablo con el mayor respeto posible.
-No hay sobrevivientes Gladis, ni uno solo, todos se achicharraron en el Puente.
-¿Cómo que todos? ¿Qué ocurrió en sí?.
-Unas flechas terribles de electricidad hicieron contacto con los enormes cables de metal, convirtiéndolo en una gigantesca máquina de muerte, ¡hasta el concreto se electrificó! ¿Quién podría salir vivo de eso?.
-¿Lucas...?.

Y cuando menciono ese nombre a Benazir se le detiene el llanto y su cara irradia un odio y un enojo que no había visto antes en él. Y comienza a crujir los dientes y a golpear el suelo.

-Tranquilo, tranquilo- trato de calmarlo mientras grita exasperado, su dolor interno le quita toda la elegancia y escupe saliva con cada grito que lanza al aire.
-¡Ese maldito debe tener a Adelize!.
-¿Pero qué dices? Acabas de decir que esta muerto.
-¡Por qué Lucas debió haberlo matado!.
-¿Lucas está vivo, Benazir?.
-Si, esta vivo. Yo hablé con él por el celular. Y el desgraciado respiraba la tranquilidad más bella de todas. Me pidió que no me acercara al Puente. Estuve unas horas esperando respuestas de los oficiales, y me dijeron que no había pista de gente viva. Volví a llamar a Lucas y el bastardo no me contestaba el maldito celular. Lo había apagado.
-No lo sé Benazir, no podemos sacar conclusiones aún.
-Pero Lucas es capaz de hacerlo.
-¿Dejas que me encargue de esto, Benazir?- exclama con serenidad Rexxar quien al mismo tiempo levanta al chico del suelo.
-No lo sé Rexxar- exclama exhausto Benazir- no sé si exista alguna solución.
-Mira, el sol no tarda en salir. Descansemos un poco y esperemos a que la luz del día encuentre a los dos muchachos, ¿qué te parece?- dice Rexxar.
-No tengo ni una sola pizca de sueño- tartamudea Benazir.
-Ooh vamos, yo te conozco muy bien. Eres un chico fuerte y positivo... Mira, tu chófer te está esperando, toma un té y deja que tu cama te arrulle.
-No quiero...

Benazir en verdad está estropeado y en su mirada se le refleja el tremendo dolor que siente. Al observar su aspecto me ofrezco a darle posada en mi apartamento el cual está solo en estos instantes:

-Quédate a dormir aquí Benazir, tú también Rexxar. Creo que ambos necesitaremos ayuda.
-¿En serio Gladis?- exclama un poco tranquilo Benazir.
-Claro que si. Toma un baño si quieres y vamos a beber algo caliente, ¿te parece?.
-Sólo permíteme avisar a mi chofer para que vaya a descansar- dice el arruinado chico mientras se levanta del suelo apresurado para ver a su chofer.
-Que amable eres Gladis- dice Rexxar mientras coloca su mano sobre mi hombro- Lamento mucho que no sepas nada de Adelize, verás que estará bien.
-Espero con ansias eso- y me doy media vuelta para abrir la puerta de mi casa.

La nostalgia resulta dominante sobre mi pecho. Mi enorme vestido se halla lleno de polvo y sangría que me han derramado de alguna copa. Pero anhelo con ganas quitarme esta pesada prenda de encima. Me tallo un ojo con el guante y se mancha rápidamente. Esa bella prensa pasó de ser dorada y luminosa a un trapo sucio y negro como el carbón. En este mismo instante siento así mi corazón. Y me duele.

-Ya se ha ido el chofer- dice con voz débil Benazir.
-¿No tienes frío Benazir?- le pregunto mientras abro la puerta.
-Bastante, no sé cómo soportas tener la espalda descubierta.
-En las madrugadas el frío es terrible- interrumpe Rexxar.
-Gracias por adelantarme la información- exclamo con una pequeña sonrisa, pero no puedo evitar mi tristeza. Y Rexxar sonríe también, pero al mismo tiempo comparte nuestro dolor.