🍃Adelize__________________________________________
Entonces una fuerte y fría brisa sopló en el camino que lleva al gran Palacio, el polvo rebotaba en nuestras frentes y las cadenas que me ataban ponían rojas mis muñecas causando una leve lesión de incomodidad. Los nervios, la oscuridad, la desesperación y el miedo eran constantes en mi corazón y causaban que este rebotara sin control.El camino hacia el Palacio era enorme y empinado, el cansancio de pronto se hizo evidente en mí, y solo en mí pues, los súbditos ya deben estar acostumbrados a subir esa cuesta arriba... Y me miran con una sonrisa burlona mientras yo exhalo exhausto por el frío y el sudor que causan una terrible combinación.
Desde este punto Bella Brisa se ve preciosa, aunque la oscuridad opaca algunos puntos atractivos, aún se percibe su inmensa estructura, y eso la hace un lugar asombroso. Cuanto desearía que hubiese luz para aclamarla con la vista.
Por fin, después de tanto jalón de muñecas y exclamaciones de apuro de parte de los súbditos, llegamos a una enorme reja perfectamente diseñada con una Corona en la cima y miles de arreglos en forma de hojas, Ángeles y curvas que la hacen ver magnífica, digno de un reino honorable. Y mi vista se queda fija en las figuras de luz que salen encima de la Corona de hierro.
-Bienvenido fugitivo. Este es el Palacio del Soberano Benazir. ¡Abran la reja!- exclama el capataz.
-¡A la orden capataz!- gritan unas voces de encima de unos pilares que sostienen la artística reja.
-No harás presencia con el Rey si no tienes permiso del propio. Así que tendrás que esperar unos momentos, tenemos que explicarle que tú has caído de aquel agujero de luz.
-¿Cuánto tiempo es "unos momentos"?- pregunto.
-Unas pocas horas...
-¿Horas?- exclamo con ojos abiertos- no quiero esperar tanto.
-Las respuestas requieren de tiempo. ¿Lo tomas o lo dejas?.
-Esta bien... Como ordene el Rey- respondo con el cansancio en forma de sudor.
-Así se habla Aah... ¿Cuál es tu nombre?.
-Verty Escamilla...
-¿Qué..?.
-Adelize...
-Que feo nombre.
-No es el único que me lo dice.
-En fin, esperaras aquí afuera con los súbditos. Trataré de ser rápido- y se esfuma en la inmensa puerta del Palacio.Cuando el capataz se hunde en la inmensidad del Palacio me recuesto sobre la pared, cierro los ojos y respiro profundamente, quitándome el cansancio que la cuesta arriba me dejo sobre el pecho. Después de unos minutos me levanto para recorrer el enorme lugar.
-¿Puedo... Andar?- le pregunto a uno de los súbditos.
-Iré detrás de ti.
-Claro.Y comienzo a caminar por las finas figuras del sendero del Palacio mientras que dos súbditos me vigilan las espaldas. Inclino la mirada, me asomo por las orillas y examino una a una las esculturas del lugar. Tras unos minutos paseándome, encuentro un lugar realmente bello. En ese sitio se halla una fuente enorme, del tamaño de una laguna y los chorros de agua bailan majestuosos sobre la bella figura que se levanta en medio de la fuente. Así es, es la viva imagen de Benazir. Me pongo a verla lentamente y está perfectamente esculpida, tal como es él, tal como lo conocí. Sus bellos ojos, su fina nariz y su cabello quebradizo, a excepción de que esta figura le incluye una vestimenta muy extravagante: Una capa larga y detrás unas especies de plumas enormes que rodean su espalda y su Corona también, pantalones ajustados y al extremo extiende una enorme espada. Es la escultura más bella que haya visto, no sólo por qué representa a Benazir sino que los detalles en verdad son bellos. Creo que me va a fascinar ver a Benazir vestido de Rey. En verdad es guapo y sorprendente de esa forma.
Procedo mi andar y todas las flores están cerradas y marchitas. Los grillos cantan por todas partes y apenas la luna deja caer su brillo. Y el frío aire resopla en todo el lugar.
-¿Te gusta el Palacio?- pregunta uno de los súbditos.
-Sería más hermoso si la luz del día se reflejase en él.
-La mayor parte del Palacio está recubierta de oro puro. Imagínate cómo se veía cuando la luz solar chocaba con la superficie.
-Debería ser un gran espectáculo.
-¡Claro que lo era! Los Reyes de las otras islas aclamaban la belleza del reino y todo gracias a este enorme Palacio.
-Supongo que la luz dejaba volar un sin fin de maravillas en Bella Brisa.
-Es por eso que Belial nos arrebató esas alegrías. El pueblo anhela volver a ver la luz pronto.
-Me imagino que sí. Apenas he estado unos días aquí y ya me harté de no ver nada claro.
-Nosotros llevamos años así. Algún día nos va a matar.
ESTÁS LEYENDO
In Love Enemies
Teen FictionAdelize Verty Escamilla es un chico común y corriente que vive sus primeras semanas en una vida normal universitaria. Gladis, una compañera de su misma carrera parece ser el complemento ideal en la vida de Adelize sin embargo un accidente muy extrañ...