Ignacio

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-Será un hermoso niño, señores- anunció el doctor con una enorme sonrisa.

Aura estaba llorando levemente por su alegría y Noah irradiaba felicidad. Los dos estaban extremadamente felices, enamorados y agradecidos con la vida por haberles permitido criar a un bebé.

-Un varón- suspiró Aura para evitar que más lágrimas rodaran por sus mejillas- muchas gracias, doctor John.

-No es nada, ya pueden retirarse- dijo amablemente para luego despedir a ambos jóvenes con un abrazo. Ellos realmente estaban emocionados.

Cuando salieron de la clínica optaron por tomar el camino hacia el departamento en el cual se debía atravesar el parque.

-Esto es tan... mágico, hasta parece irreal- dijo Aura jugando con las hojas de los árboles cuando pasaron por debajo de uno.

-Te aseguro que esto es lo más real y magnífico que he vivido en toda mi vida- afirmó Noah y pasó su brazo por sobre los hombros de su novia.

-Sí- murmuró Aura mientras besaba los labios de Noah- esto pesa- rió mirando su estómago redondo y grande- nunca estuve tan feliz de tener panza- Noah rió.

-Sos hermosa de todas formas, pero tengo que admitir que verte con esa pancita redondita me hace verte aún más hermosa- definitivamente estaba loco por la persona que tenía a su lado.

-¿Sabés que cada día te amo más?- Aura hablaba realmente enserio.

Ella siempre se sentía especial al lado de su preciado rubio de ojos azules, se sentía sumamente amada y protegida. Él la amaba y se lo hacía saber cada vez que tenía la oportunidad para hacerlo. Noah era sumamente romántico y cursi, todo en él gritaba inocencia y cariño y era exactamente eso lo que había logrado enamorar a Aura. Su forma de ser con todo el mundo; amable.

Noah siempre tenía un punto de vista positivo de todo lo que ocurría, siempre lograba encontrarle lo bueno a todo y eso era lo que a Aura le hacía falta. Ella era insegura, miedosa y lo único que notaba en situaciones desesperantes eran aspectos negativos.

Ambos se complementaban.

-No sé que haría si no te tuviera en mi vida- dijo Noah deteniéndola frente a una de las tantas fuentes que decoraban toda Virídiam- te amo y sé que siempre lo voy a hacer. Pasamos por muchas cosas geniales estos cinco años de noviazgo y quiero que el resto de mi vida siga siendo así, por lo tanto- se arrodilló frente a Aura, que no dejaba de sonreír con un brillo en sus ojos, y tomó una de sus finas manos- ¿querés casarte conmigo, Aura?

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Aloo!! ¿Cómo están? ¿Les gustó el capítulo??

#Puesto17Chick-Lit!

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Mil millones de gracias por todo!!! Nos leemos mañana!!!

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