Rodeada De Idiotas

14. Positiva, Sam. Siempre sé positiva.

SAM'S POV

Toda la semana siguiente a mi "accidente" con Daniel fue horrible. El lunes anterior me había vuelto a sentar con el en Biología pero no había accedido a hablarle en ningún momento. El resto de la semana el intentó hablar conmigo pero yo no paraba de evitarlo y el cada vez se ofendía más y cuando rechacé ir a por un café el sábado termino de enojarse.

Y supongo que no había perdido tiempo ya que pasado una semana entera y vuelto a ser lunes lo vi en los pasillos del internado coqueteando abiertamente con una pelirroja. Aghj, ahora la enojada era yo y ni siquiera sabía por qué si nosotros solo habíamos salido una vez, pero no importaba eso porque de todas formas me sentía furiosa y celosa. Y lo peor, ahora me tocaba biología. Tienes que ser positiva, Sam -me dije a mi misma- siempre positiva.

Entré en la clase y miré los asientos libres. Cameron ya no tenía su lugar libre como de costumbre ya que Lily lo acaparaba siempre; y tal como los dos lunes anteriores los asientos libres eran la "Bad Girl" que daba miedo, la chica esa Anderson a la que no quería enfrentarme ya que debía odiarme por haberle conseguido un castigo, y... Daniel.

Uhg, no quería pasar otra hora evitando a Daniel y que encima estuviera furiosa con él, y la otra chica me daba miedo. De acuerdo, es hora de enfrentar a Anderson, quién sabe, quizá sea amigable. Se positiva Sam, siempre positiva.

- Ehm hola. Puedo sentarme aquí- Anderson giró su cabeza hacia mí.

- Si, claro. Siéntate antes de que el profesor entre y te castigue por estar parada- Dijo con una falsa sonrisa y me senté algo incómoda- Hablando de castigos, tu eres la chica que  me consiguió uno y yo ni siquiera lo pedí.

- Soy Sam- Sonreí exageradamente y estiré mi brazo hacia ella ignorando un poco su comentario, ella no tomó mi mano como saludo. En su lugar gruñó y miró para otro lado. Probé insistir un poco más.- Y tú eres?

- Alguien que no te incumbe ni quiere que le hables- Ella era una persona poco positiva. Positiva Sam, siempre se positiva.

- Y tu nombre es?- Gruñó una vez más pero esta vez contestó.

- Cassidy.- Respondió secamente. Decidí no intentar iniciar una conversación. Eso iba a ser demasiado complicado.

*

Al terminar las clases decidí salir al parque con Thomas. Ambos teníamos una redacción que hacer para el día siguiente de física.

Nos fuimos a el lugar donde siempre nos reuníamos, que era la parte más alejada del campus, detrás de la escuela a donde nadie iba y nos sentamos bajo "nuestro árbol". Y digo "nuestro árbol" porque en el primer año que estuve en este instituto grabamos un corazón con nuestros nombres en él en ese árbol bautizándolo como nuestro lugar especial. Si, ya lo sé, muy cursi.

Al cabo de una hora Tommy estaba apoyado con la espalda sobre el árbol leyendo un libro aunque sus ojos ni siquiera se movían como si ya no pudiera concentrarse, y yo estaba recostaba sobre mi estómago sobre el césped apoyando mi cuerpo sobre mis codos flexionados escribiendo en mi cuaderno los distintos usos del Magnesio.

De repente Thomas se incorporó y soltó el libro de golpe. Asustada, solté el bolígrafo haciéndo que aparezca un fino rayón en mi hoja de trabajo. Genial, ahora tendría que pasarlo. Mi amigo entreabrió la boca como si fuera a decir algo pero lo único que salió fue aire, me miró fijamente. Yo conozco esa mirada. Es la mirada de 'necesito a una amiga para hablar'. Momento de charla de chicas, o de chica y su mejor amigo gay, como sea.

- Hay algo que no te he contado...- Y de su boca volvió a salí aire.

- Suéltalo ya Tommy.

- De acuerdo...- Me miró con cuidado tanteando el terreno para saber si hablar o no- Este fin de semana he ido a una fiesta universitaria. Y ahí conocí a un chico- Esperen qué?- El chico se pasó la mayor parte de la fiesta hablando conmigo y, a mi parecer, ligando también.
»El era lindo y divertido y no paraba de sonreirme y apoyar su mano en mi rodilla y esas cosas. Cosas que yo interpreté como coqueteo- No me gusta para donde está llendo esta historia. Tengo un mal presentimiento- Al estar en una fiesta universitaria a la que me había colado gracias a un amigo me convencí de que no volvería a ver a nadie de allí; mi amigo había subido con una rubia y los demás eran puros desconocidos así que decidí mostrarme al mundo por una noche... Y lo besé...