Cuando Bea, la novia de Grace, aparcó y nos dirigimos a la entrada del recinto, nos encontramos con una pequeña cola formada por más o menos una veintena de adolescentes. Nos acercamos extrañadas, ya que aún quedaba una hora para el comienzo del show y no pensábamos que habría chicas tan deseosas de verlos y estar en primera fila que estuvieran allí desde hacía tiempo. Pero allí estaban, dando botecitos y gritando de vez en cuando.
-Perdona, ¿esta es la cola para ver a 5 Seconds of Summer? - Preguntó Grace cuando llegamos al final de la cola, y la chica que estaba delante nuestra se giró hacia nosotras y asintió. Era adolescente, varios años más joven que yo sin duda. Aún así era muy alta, de pelo largo, castaño claro y liso. Iba vestida con una falda negra cortita y eso fue lo que más me chocó: Casi todas íbamos con jeans o leggins, cómodas para disfrutar de las canciones saltando y brincando si podía ser.
-Dicen que los chicos ya han llegado, que están dentro preparando los instrumentos. - Explicó con una sonrisa esperanzada. - Pasaron antes con el coche por aquí delante, vi a dos de ellos, el que conducía y el copiloto. ¡Son guapísimos! Ya los había visto una vez en twitter cuando anunciaron el concierto aquí, pero en persona parecen mejores. - Sonrió ilusionada y di un codazo a su amiga, que dejó su conversación con otras chicas y se giró hacia nosotras. - Malia me convenció para venir. ¿Vosotras sabéis cómo son sus canciones? Ninguna de nosotras los escuchó nunca.
-Creo que es su primer concierto. - Aventuró la otra chica, Malia, correctamente. - Pero prometen.
-¿Y desde cuándo estáis aquí? - Pregunté. - ¿No sabéis nada de ellos pero estáis más de una hora esperando a entrar?
-En realidad sí, pero las chicas de delante igual llevan dos. - Se encogió de hombros. - Es emocionante. Y vosotras también estáis aquí antes de tiempo.
No sabía si sería buena idea decir que Luke, de la banda, era mi novio. Y que no me había pasado comiendo chucherías toda la noche, si no que estaba embarazada de mes y medio por su culpa. Cierto es que había procurado llevar una sudadera cerrada ese día, para simularla un poco junto con un gran pañuelo que caía por mi barriga y el abrigo. Pero al final no lo dije, ni mencioné que conocía al resto, ni que Ashton era mi mejor amigo.
-Voy al baño. - Me escurrí por las vallas de la fila mientras Grace y Bea quedaron en el sitio, guardándolo y hablando con las otras dos chicas. Avancé por la corta cola que poco a poco crecía y al llegar al comienzo de ella me topé con un guardia ante unas vallas que daban a un gran espacio, frente a un pequeño escenario. En él había gente aquí y allá, corriendo por un lado y por otro, seguramente preparando las cosas de última hora. Después vi a Calum rodando por el suelo, literalmente. Estaba tumbado en la pista, donde estaría yo al comenzar el concierto, y rodaba como una croqueta hacia un lado y hacia otro. Escruté el lugar intentando forzar la vista, ya que el escenario estaba bastante lejos del final de la pista, pero logré distinguir a Luke con una guitarra eléctrica en la mano. No movía la cabeza y parecía estar mirando a un punto muerto, mientras una de sus piernas iba arriba y abajo. Necesitaba hablar con él antes de que empezara el concierto y tranquilizarlo.
-Disculpe, señorita. -Dijo el guardia y se acercó a mi, alzó una mano como protegiendo la vaya. - Debería alejarse e ir a la cola, el concierto aún tardará unos cuantos minutos en comenzar.
-Oh, disculpe, es que necesitaba hablar con uno de los chicos de la banda.
-Ya. - En la cara del guarda apareció una sonrisa socarrona. - Eso dicen todas.
-Lo digo de verdad. Conozco al rubio. - Me crucé de brazos mientras hablaba en un tono algo bajo, confidencial.
-No me tome por tonto, señorita. He estado trabajando en conciertos del propio Justin Bieber. No sabe la imaginación que tienen sus fans a la hora de intentar pasar a verlo.