Belén.
Había pasado un mes y medio desde que comenzamos nuestra relación, ya salimos de clases, y comenzamos a prepararnos para nuestro último año de instituto, Willon comenzó una relación con Luke, de Terrence no hemos sabido nada desde que se fue.
Ahora, estábamos en mi casa, mi madre no estaba, y tampoco Julián, estábamos solos. Tony y yo escuchábamos música, exactamente a Yo-YoMa. Notaba que Tony se comenzaba a quedar dormido, así que comencé a moverlo.
-No te duermas-lo empuje, este cayó del sofá.
-Pero que agresiva cariño-sonrió, se acercó a mi, y comenzó a hacerme cosquillas.
Él estaba sobre mi, yo reía desesperadamente, le suplicaba que parará, pero claramente no lo hacia, lo traté de empujar, pero no funciono, solo logre que me hiciera más y más cosquillas, hasta que se cansó, entonces me miro a los ojos, y luego bajo su vista a mis labios, los comenzó a besar desenfrenadamente. Yo le correspondí inmediatamente.
Se separó de mis labios, y comenzó a besar mi cuello, solté un pequeño gemido, él río. Siguió un camino de besos desde mi cuello hasta el escote de mi playera, sus manos entraron por mi playera acariciando mi torso, yo apretaba sus brazo, y revolvía su cabello. Esto se estaba saliendo de control, pero me encantaba. Me siguió besando, sacó su camisa negra, dejando al descubierto un perfecto y fornido cuerpo, comenzó a besarme nuevamente. No se cómo, ni cuándo, pero acabamos ambos desnudo en el sofá de mi casa besándonos con sólo la luz de la luna que bañaba todo el lugar. Estaba muy agitada, me faltaba el aire y estaba nerviosa.
-To..Tony, yo...yo jamás...-no me dejo terminar.
-Tu solo relajare, yo te guiare-sonrió, y volvió a besarme.
Y ahí, a la luz de la luna, mientras sonaba la canción The swan de
Yo-YoMa, lo hicimos, y fue lo mejor que he echó en mi vida. Al acabar, dijo que me amaba, me lo confeso, incluso lloro un poco, dijo que jamás había sentido algo como lo que siente conmigo, algo "tan intenso", dijo, que es algo tan fuerte y difícil de explicar, el dijo que estaba enamorado de mi, yo también se lo dije. Luego subimos a mi habitación, y ahí nos dormimos, abrazados dentro de mi cama.Tony.
Amo a esta chica. Nunca la dejare. Espero nunca ser tan estúpido como para dejarla. Además que siempre recuerdo la promesa que le hice a la pequeña Sophia, de que nunca la dañare ni dejare. No quiero jamás romper esa promesa.
Escuche que la puerta de entrada sonaba. Me salí de la cama con cuidado para no despertar a Belén, quien parecía un ángel entre las sábanas. Se veía hermosa.
Baje las escalera una vez me puse los pantalones y la playera. Camine hacia la cocina, y ahí estaba Julia. Me saludo tan cariñosamente como siempre.
-¿Cómo estas cariño?-pregunto besando cada una de mis mejillas.
-Muy bien Julia-sonreí.
-Espero quieras hacer otra sección de fotos para promocionar mi ropa, estas perfecto con esa cara somnolienta para una línea de pijamas-comenzó a reír. Yo la seguí.
Esta mujer sabe como reír verdaderamente. Tal vez eso es lo único que le falta a Belén para ser cien por ciento perfecta. Reír.
-¿Dónde esta Belén?-pregunto luego.
-Esta en su habitación, estaba cansada y se quedo dormida-sonreí-Luego saldremos a caminar, así que la deje recuperar fuerzas para recorre después.
-¿Qué estuvieron haciendo los tórtolos una vez me fui?-pregunto.
Casi me atraganto con mi propia saliva. ¿Qué se supone que le diré? Hice el amor con su hija. Claramente no le diría eso.
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El amor en tiempos de depresión.
Roman pour AdolescentsDicen que tener depresión es difícil, sin siquiera tener depresión, dicen que el amor es complicado, sin siquiera poseer ese "amor" del que tanto hablan, Tony tú eres mi "hasta el final", porque así espero que sea, porque te quiero, y espero que tu...