El amor en tiempos de depresión.

¿Cuidarias a mi hija?

 Tony.

No esperaba esa reacción en ella, al final no sacamos las fotos es la "oficina", por lo menos no con ella. Me hicieron posar a mi y a otra chica, claro que las fotografías no eran tan pegados como antes. Al final usarán todas la fotografías, con eso ya están arreglados, el problema es que Belén salió corriendo junto a Anthony, y tenía lágrimas en los ojos, me siento horriblemente culpable por ello.

Lo bueno es que podría hablar con ella hoy, ya que Julia me dijo que tendría que hacer un viaje y volvería mañana, y Julián saldría con unos amigos a una fiesta y no volvería, por lo que yo cuidare a Belén, sonreí ante ese pensamiento. Creo que es un pretexto de Julia para que esté con su hija, pero me parece una idea fantástica.

No saben cuantas ganas tenía de besarla, por eso la bese el día anterior, ¡además ella me estaba provocando!, No se imaginan hasta que punto hubiese llegado si no hubiesen estado esas persona ahí. Tampoco se imaginan la locura que hubiese echo si no la besaba pronto, me estaba volviendo loco, loco por probar esos labios con ese peculiar sabor a chocolates y menta que tienen y que tanto me gustan, es la droga que no puedo dejar.

-Ma, hoy tengo que ir a cuidar a la hija de Julia, recuerda que me pidió que no la dejara sola-sonreí-así que ya me voy.

Le di un beso en la mejilla.

-Esa chica te tiene enganchado ¿no?-pregunto mi madre, me pare en seco.

-¿Por.... por que dices eso?-pregunte tratando de esconder mi nerviosismo.

-Por como hablas de ella-mi madre sonrió ampliamente-te gusta, ¡Oh por dios!-chillo emocionada-¡Le gusta una chica, y no sólo de la forma para llevársela a la cama!-¡¿Qué acaba de decir?!

-¡Mama!-chille como niño pequeño-ella no me gusta, sólo es la niñita hija de Julia, hermana de Julián-sonreí para darle "tranquilidad", aunque creo que era para mi propia tranquilidad.

-Okay, ¿llevas la pijama?-se puso a reír.

-Mama, ya no soy un niño pequeño-mi madre río aún más.

-¿Pero llevas la pijama o no?-pregunto nuevamente.

-Sabes que no huso pijama, pero llevo ropa de cambio-le sonreí.

-Así que te pasearás en bóxer en la casa de una chica sin ningún otro ser viviente, que los detenga si se les ocurre....tu sabes-subió y bajos las cejas sugestivamente mostrando el doble sentido.

-Si abra otro ser viviente, y no se me ocurrirá nada con esa chica, es más, podría decir que hasta me cae mal-mi madre frunció el ceño.

-Ya veté antes de que me arrepienta de dejarte quedar con una chica tan guapa como ella-algo no me calzaba de lo quede decía, mi madre no conoce a Belén.

-Pero tu no conoces a Belén, ¿como sabes que es guapa?-mi madre se carcajeo, ¿han notado que ríe mucho?, Pero me gusta que ria.

-Me acabas de confirmar que te gusta-sonrió y se acerco a mi-ahora vete.

Me abrió la puerta y me empujo por ella cerrándola en mi cara, ¡en mi cara!

Tome mi motocicleta y me encamine hacia la casa de Belén.

Narra Belén.

Yo estaba esperando que mi hermano saliera del baño, enserio tenía que hacer mis necesidades.

-Vamos Julián, que demoras tanto-le gritaba mientras golpeaba la puerta.

-Dame un segundo-reí, lleva diciendo eso hace unos treinta minutos.