El hilo rojo del destino

La boda

Capítulo 5 La boda

Disclaimer: Inuyasha no es mío, los personajes aquí utilizados son de Rumiko Takahashi

Y ahí en primera fila estaba ella, en la boda de la persona a la que por primera vez amó, vestía un vestido color negro hasta los muslos, tacones del mismo color, accesorios a juego y su cabello rizado. Todo estaba bien organizado en una hermosa iglesia repleta de rosas blancas y muchas personas, entre ellos estaban Sango, Miroku, el mismo Koga, la familia de los novios más algunas personas cercanas a la familia. Y ahí junto a ella sentada en primera fila estaba Sesshomaru.

- Solo alguien como tú se llega a enamorar de Inuyasha- le dijo con su tono frio mientras miraba a los novios.

- ...

Todo transcurrió normal, los novios hicieron sus votos y fueron declarados marido y mujer hasta que la muerte los separe. Luego de las felicitaciones se dirigieron a la recepción que sería en el gran jardín de la mansión Taisho. Todos estaban felices y celebrando. Kagome no despegaba la vista de los novios, se veían tan felices que en un momento dudó algún día encontrar una felicidad así, a lo que se acerca Izayoi a ella.

- Kagome, ¿cómo estás?

- Suspiró- Hacen linda pareja- ignoró la pregunta

- Si- Izayoi pudo ver la tristeza en sus ojos por lo que decidió cambiar el tema- Inu me dijo que ya te había comunicado que debes mudarte para el año de servicio

- Si, ayer recién me lo dijo

- ¿Has hecho las maletas?

- Aún no.

- Debes hacerlas pronto ya que parten en unas horas, Sesshomaru tiene una reunión importante mañana. Perdona la rapidez

- No hay problema, al contrario, he esperado por esto mucho tiempo, muchísimas gracias- dijo emocionada mientras la abrazaba

En ese momento iba pasando Koga, así que Izayoi decidió presentarlos.

- Koga – llamó la mayor

- Señora Izayoi, ¿cómo ha estado? – dijo mientras la abrazaba

- Muy bien, quiero presentarte a alguien. Ella es Kagome, es la chica que te recomendamos

- Mucho gusto Kagome- dijo mientras besaba una de sus manos

- El gusto es mío- respondió algo sonrojada

- Los dejare hablando, vuelvo en un rato. Kagome, no te preocupes, estarás en buenas manos.

- Gracias- respondió la pelinegra y sin más Izayoi se perdió entre las personas.

- Entonces señorita Kagome

- Llámame solo Kagome- interrumpió Kagome

- Bien, Kagome. ¿En qué área te gustaría especializarte en un futuro?

- Me gustan los niños, así que he pensado en pediatría

- Me lo imaginé- dijo mientras sonreía- Me encargaré de asignarte en esa área para que te sientas cómoda.

- ¿Enserio? Muchísimas gracias- De tanta emoción se abalanzó sobre el pelinegro- Lo siento mucho- dijo avergonzada

- No te preocupes- dijo mientras le sonreía. Continuaron hablando alrededor de media hora.

- ¿Entonces tendrás que vivir con Sesshomaru por ese tiempo?

- Si, algo así me comentó el señor Taisho

- Koga, que dice Inu No Taisho que vayas a su despacho- interrumpió Sesshomaru

- Ahora te tienen como muchacho de mandado- dijo burlándose del peli plateado

- Cállate- dijo para luego marcharse

- Kagome, te deseo buena suerte este año con este ogro

- Te escuché- gritó Sesshomaru

- Yo no he dicho nada Sesshy- dijo mientras intentaba alcanzarlo

- No me llames así

Y así se perdieron entre la multitud con sus peleas, a Kagome solo le pudo salir una gota estilo anime. Luego de despedirse de sus amigos decidió ir a arreglar las maletas para el viaje.

- Kagome, hija- dijo Naomi mientras tocaba la puerta de la habitación de su hija

- Adelante mamá

- ¿Quieres que te ayude?

- Está bien, ya terminé, no te preocupes

- Te extrañaremos

- Yo también los extrañare a ustedes- dijo mientras la abrazaba- vendré lo más pronto posible, lo prometo.

Después de despedirse de su familia, se dirigió a la casa de los Taisho donde ya todo había terminado y los novios se habían marchado, eran cerca de las 12 de la noche.

- Kagome, te extrañare mucho.

- Yo también la extrañare- dijo mientras correspondía el abrazo que le había dado

- Nos vamos- interrumpió Sesshomaru

- No es tan malo como parece. Tenle paciencia – le susurró Izayoi

- Lo intentaré- dijo para luego tratar de alcanzar al mayor

Tras haber guardado el equipaje parten hacia su destino, era tarde de la noche así que el transito estaba ligero, llegarían antes de las 4 horas. El camino entero iba sumido en un silencio, Sesshomaru conduciendo mientras Kagome miraba el paisaje nocturno.

- ¿Te puedo preguntar algo?

- Ya lo hiciste

- Otra cosa

- Hmp- lo tomó como un si

- ¿Por qué el día de la cena saliste a buscarme?

- Sino lo hacia Izayoi se iba a preocupar- dijo fríamente

- Entiendo- dijo mientras cerraba los ojos para intentar dormir

La pelinegra se quedó profundamente dormida, no sintió las veces que Sesshomaru la veía, no sintió cuando el secó las lágrimas que derramó entre sueños y mucho menos sintió el roce de labios entre ambos. Al amanecer se encontraba en una habitación desconocida para ella, su equipaje a un lado de la cama y la misma ropa de la noche anterior. Se levantó a explorar el lugar, era un gran apartamento, exactamente el Pent-house, 3 grandes habitaciones, una gran cocina, sala, área de lavado y una habitación de juegos pero lo realmente fascinante era la vista que daba el balcón de la gran ciudad. Respiró profundo el aire fresco de la mañana y no pudo evitar preguntarle al viento, que sería de su vida en este nuevo año.