Infantil

Capítulo 6.

- ¡Derek! Mueve tu puto trasero de la cama o llegarás tarde.

- ¡JUSTIN NO QUIERO IR!- si... ya era lunes, ayer no pasó nada especial, solo vimos películas y series.

- ¡O te mueves o te tiro al agua helada!- nada. Frustrado entré al baño y abrí el agua helada. Volví a la habitación y volví a intentar- O te mueves Derek o de verdad, no estoy jugando, te tiro al agua helada- nada, el mocoso creyó que jugaba. Enojado lo tomé en brazo, él empezó a forcejear mientras lloriqueaba. Ni siquiera lo pensé, lo tiré dentro de la ducha.

- ¡¡JUSTIN!!- grito furioso luego de dar el grito más afeminado de la historia.

- Bañate y baja a desayunar.

Bajé e hice el desayuno. Al poco tiempo bajó Derek. Estaba enojado se notaba a kilómetros. Llevaba en su mano su peluche de panda.

******

Estábamos en la entrada del instituto.

- Ya, Der, no te enfades.

- Te comportaste como un idiota Justin- tenía un puchero en sus labios. Me pareció tierno y quise besarlo. Lo pesque de la nuca y lo traje a mis labios. Primero mordí suavemente su puchero. Y luego la besé, el correspondió el beso dejando paso a mi lengua, estuvimos así un tiempo. Dios, amo sus besos. Nos separamos en busca de aire- Te vendré a buscar hoy.

- Esta bien.- me dio un corto beso en los labios y desaparecido junto a su amiga Aria.

*****

Después de una tarde aburrida en el trabajo. Llegó la hora de ir a buscar a Derek.

Ya había pasado un tiempo desde que la última persona salió del recinto. Empezaba a preocuparme. Pero luego salió Derek junto a un chico, era lindo, de pelo rojo, notablemente más alto que Derek. Lo besó en la mejilla y se fue. Derek observó de un lado a otro y luego me divisó, corrió hasta mi y entró en el auto. Con un leve rubor en sus mejillas me saludo.

- Hola Justin- quiso besar mis labios pero lo aparté.

- ¿Quién era él?- pregunté algo molesto. Él sonrió.

- ¿El gran Justin Bieber está celoso?- dijo alzando una ceja divertido. Al ver que hablaba en serio se removió incómodo- Él me felicitó por sacarme una buena calificación en su clase. Es el profesor de biología.

- Ah...- me sentí celoso de un profesor...- Bueno ahora te llevaré a comer.

- ¡SI! ¿Un helado?

- Derek, esta nublado- chasqueo la lengua.

- Vamos por comida rápida y comamos en casa.

*****

- ¿Qué desea pedir?

- Yo quiero...- puso su dedo en sus labios dando la ilusión de pensar- una amburguesa con papitas.

- Yo quiero lo mismo.

La cajera sonrió coqueta y eso a Derek pareció molestarle porque sin darme cuenta atrapó mis labios en un beso. La sonrisa de la cajera dio paso a una mueca de incomodidad.

- Derek- lo miré con finjido enojo, él solo sonrió.

- Su orden.

- Gracias.- le guiñe el ojo.

- Vuelve a hacer eso y te arrancaré el puto ojo, Justin- Lo miré divertido. Al salir por la puerta divisé las nubes negras del cielo. Iba a llover. Irónico, hace unos días estaba muriendo de calor. El auto quedó a 5 cuadras de aquí. Íbamos caminado tomados de la mano. De repente una gota impactó en mi rostro. Luego otra. Y luego muchas. Llovía fuertemente y con Derek corrimos a un techo para cubrirnos de la lluvia. Reíamos como maniáticos. Nos miramos aún riendo.

- Te quiero.- dijo Derek y luego se lanzó a mis brazos.

- Te quiero, también- lo besé. El beso que inició lento se tornó rápido y desesperado. Derek enredó sus piernas en mis caderas y yo lo apoyé en la pared y seguí besandolo. Me separé de él con la respiración agitada. Y luego reímos un poquito más.

Después de que la lluvia parara un poco corrimos al auto. Iba  mojar mi bonito auto. Entramos y encendí la calefacción, pero aún así Derek tiritaba de frío. En un semáforo bajé del auto rápidamente y saqué del maletero un bolso que tenía ropa y una manta. Subí al auto y se lo entregué a Derek.

- ¿Qué es?

- Ropa seca, puedes ponertela o cubrirte con la manta, tienes los labios morados.

- No me mires Justin, solo me pondré la manta.- se quitó la polera y el abrigo y pasó la manta de polar por su pecho, la estiró en sus piernas y bajó sus pantalones junto a sus bóxers. Yo seguía sus movimientos de reojo- ¡Te dije que no me miraras!- tiritaba levemente.

- Es que Derek, te cubriste demasiado- reí levemente.

- No quiero que me mires sin ropa- frunció el ceño y yo lo mire maliciosamente. Él se sonrojó y yo reí.

Al llegar a la casa Derek ya estaba dormido. Se veía lindo. Tomé su ropa mojada y la eché a una bolsa. La lluvia ya había disminuido considerablemente. Bajé del auto y saqué a Derek quien aún dormía. Corrí a la casa para no mojar a Derek. Entré a la casa y al llegar a mi habitación lo acosté en la cama. Empecé a desvestirme. Cuando ya estaba completamente desnudo. Escucho una risita ahogada. Al darme vuelta me encontré con la enorme mirada de Derek.

- ¿Disfrutando la vista?

- Idiota.- su voz salió temblorosa. Aun cubierto con las frazadas tenía frío. Terminé de vestirme y entré al baño para buscar un secador de pelo.

- Siéntate para secarte el pelo.

- Si...- sus labios estaban morados. Se sentó dejando al descubierto su torso y si bajaba la mirada de por espalda podía ver el inicio de su trasero. Besé su hombro. Su piel estaba un poco helada y encendí el secador en el aire caliente. Enrede mis dedos en el cabello de Derek y este se relajó ante mano tacto. Cuando su cabello ya estuvo seco le pedí que me secara el cabello. El asintió y salio de las frazadas. Llevó todo mi auto control no mirar hacía abajo mientras salía. Sus dedos se enredaron en mis cabellos y empezó a masajear mi cabeza mientras en aire caliente. Empecé a sentir apretados los pantalones.

- Der, iré a calentar la comida.- lo besé en los labios y salí de la habitación lo más rápido que pude. Calente la comida y volví a la habitación. Derek estaba acostado mirando a la puerta. Me metí bajo las frazadas con él, dejé las bandejas sobre la cama y con la intención de arreglar las frazadas que quedaron dobladas toqué la piel desnuda de Derek, esté se tensó y yo me levanté para traerle ropa interior. Se la tiré en la cara y me volví a acostar en la cama. Derek sin pudor (lo cual me extrañó) salió de la cama dándome la espalda, comenzó a subir sus boxers. Que trasero más redondo. Pensé y antes de que pudiera subirlos del todo le dí una "suave" nalgada.

- ¡Justin!- solo me reí y empecé a comer.

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N/A

Perdón si hay faltas de ortografía.

Nos leemos♡.