Capítulo 14

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Abrí los ojos y estaba todo iluminado, por lo menos no seguía lloviendo, me estire y... Uhm, esperen, acá falta algo. Me senté en la cama y mire para todos lados ¿Donde estaba Niall? Toque el lugar en la cama donde estuvo acostado y seguía tibio, cuando iba a tomar mi celular vi el suyo arriba de mi escritorio, acto seguido salió del baño mirándose la remera. Levantó la vista y me sonrió.

-Buen día -Me dijo mientras se sentaba a mi lado en la cama.

-Hola -Me acerque dejando un beso en su mejilla -Gracias por quedarte-

-Eres muy insistente, y me convenciste cuando dijiste que no te gusta estar sola con una tormeta afuera. Como soy todo un hombre protector debí quedarme contigo -Infló el pecho e hizo pose de superheroe.

-Oh, gracias por protegerme noble caballero -Dije conteniendo la risa.

-Bueno, debo irme -

-¿Por que? -Mi risa se corto de golpe.

-Debo ir a trabajar en una hora y debería pasar por mi casa -

-¿Que hora es?-

-Las 8:OO AM, y mi abuelo abre a las 9:OO AM -

-¿Las 8?, wow, es muy temprano para un sábado -

-Si, lo se. Pero si deseo tener dinero, debo trabajar y la verdad hacerlo con mi abuelo no es tan malo -Hizo una media sonrisa que amo.

-Por lo menos dejame prepararte el desayuno, ya que me has cuidado -Me levante rápido de la cama y casi me caigo.

-¿Estas bien? -Niall estaba arrodillado sobre mi cama.

-Si, solo me levante muy rápido y me maree -Le sonreí -Bueno, vamos que te haré el desayuno, no me sentiría para nada bien si te vas a trabajar sin comer -

Él se limitó a sonreir y a asentir con la cabeza.

Fui al baño me arregle un poco el pelo y me puse mis pantuflas de conejo. Quizás son de niña pequeña pero a mi me encantan. 

Cuando baje Niall estaba sentado en el desayunador de la cocina con la cara entre las manos.

-¿Quieres un té y tostadas? -Le pregunté

-Si por favor -Niall tenía la cara más adorable del mundo cuando recién se levantaba. Se le notaba cansado.

-¿Dormiste bien? -Le dije mientras preparaba las tostadas -Tienes cara de que no pasaste buen descanso -

-Dormi genial y muy cómodo. El único problema fue una pequeña chica que habla dormida -

Me quede inmóvil, cuando hablo dormida digo cosas que no deberían salir de mi mente. Me di vuelta lentamente y lo mire.

-¿Que dije? -

-Oh, no mucho, al principio no se te entendía nada, era como un gemido o un balbuceo -Me sonrío y paso su lengua por sus dientes como disfrutando de mi nerviosismo.

-¿Y luego?-

-Luego, uhm... Dijiste algo de arrancarme la remera y tocar mi abdomen -Sonrío seductoramente

No podía moverme, no podía creer que haya dicho algo así y que él lo haya escuchado. Estaba roja como un tomate y sentía calor en todo el cuerpo. En ese momento desee no haberle preguntado nada y desaparecer.

-¿Nicole? ¡Nicole las tostadas! -Niall me saco de mis pensamientos y vi el humo que salía de la plancha 

-Oh demonios -Saque las dos tostadas del fuego y estaban completamente negras -Ughh, ahora hago más -

Moments. (Louis Tomlinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora