|| MI ANGEL GUARDIAN ||

Capitulo 23

Su voz profunda fue tomando un tono normal, él de siempre.

Me alejé un poquito de él y giré mi torso para poder ver a los ángeles que tenía detrás de mí.

— ¿No tiene salvación?

Pregunté mirando al ángel de cabellos oscuros y un poco más bajo que él otro. Este solo miró a su compañero el cual tenía una sonrisa de oreja a oreja.

—Tal vez si...Quizás no...

—No me des esas respuestas por favor

—No lo sé, veo que su aspecto demoniaco ha desaparecido, pero siempre que tenga rabia o celos volverá a hacer así.

—Fue más que eso...

Habló Kris mirando a Mikel con un semblante suave.

—No quería aceptar la idea de que mi pequeña no me recordara y que estuviera en las manos de otro hombre, ahora mira lo que soy, no puedo vivir en la tierra como alguien normal, ¿Verdad?

Mikel negó por unos segundos para luego mirarle a los ojos.

—No soy Dios, no sé qué va a pasar

— ¡Exacto!

Kris miró a todos lados levantándose mientras se acercaba a ese ángel y se arrodillaba ante él, en modo de súplica tomando con sus manos las ropas aquel ángel y apretarlas.

—Quiero ver a los superiores, déjame verlo, si me das permiso puedo verlo.

—Kris.... —este tomó su rostro entre sus manos y asintió—Eric has lo tuyo...

Eric saco su espada enterrándola en la tierra mientras caminaba con ella haciendo un círculo encerrándonos en este.

Sin perder tiempo Mikel hizo unas señas raras con las manos haciendo que aquel círculo empezara a brillar.

Sentí mis ojos pesados y mi cuerpo débil, solo pude ver como Kris se volvía a acercar a mí y me abrazaba con ternura.

* * * * *

Desperté algo aturdida, miré a mi costado y noté a Eliel dormido a mi otro costado estaba Eric y Mikel de rodillas y al frente a Kris, el cual estaba atado de las manos y con su aspecto demoniaco, el corazón se me encogió al verle nuevamente así.

Me levanté y me acerqué a él abrazándole de la espalda, una vez más mi cuerpo quemaba el de él, este solo tenía la cabeza gacha mientras sollozaba.

Alcé la vista y vi a un ser de grandes alas el cual emanaba una gran calma, mantenía una bella sonrisa en su rostro y lentamente se fue acercando a mí.

— ¿Quién eres?—pregunté atontada por ese poder tan puro que nacía de su cuerpo—

—Me llaman Ekiel.

— ¿Ekiel?

—El ángel de la sabiduría y la justicia, Niel

— ¿Qué ha pasado?

—Kris se enojó porque no puedo permitirle ver a Dios, tuve que amararlo.

— ¿Por qué no puede verlo?

—Los demonios y Nefilim lo tienen prohibido, él no es un ángel ni mucho menos humano, por eso el mismo todopoderoso me ha dado la labor de actuar en este caso.

—Y ¿Qué harás?

—Dime. ¿Tú crees que tiene salvación?

— ¡Sí!

Contesté sin vacilar y muy segura de mi respuesta mientras le miraba directamente a esos lindos ojos Gema, sabía muy bien que Kris era un ser de buen corazón.

Su sonrisa se hizo más grande y preciosa mientras me señalaba.

—Toma su rostro entre tus manos...

Rápidamente hice lo que me pidió y un pequeño vapor salió de nuestro contacto, estaba calcinando su bello rostro.

—Deja un beso en su frente...—me ordenó Ekiel—

Miré a mi contrario y acerqué mansamente mis labios a su frente mientras cerraba un poco mis ojos. Dejé un suave beso y me separe aun sin abrir estos.

—Un beso en la frente para que todo mal pensamiento sea arrancado y nunca más vuelva.

Escuché sus palabras atenta sin despejar mis manos de su rostro.

—Ahora deja un beso en sus labios...

Obedecí inclinando un poco mi rostro mientras juntaba sus labios con los míos de manera muy dulce.

-Un beso en los labios para sellar todas las palabras llenar de odio y venganza, Niel besa su pecho.

Entre abrí mis ojos y tomé entre mis manos aquellas prendas rompiéndolas más de lo que ya estaban, su cuerpo estaba lleno de heridas y de símbolos raros que giraban de manera escalofriante por toda su piel.

No dude, me acerqué y besé su pecho como ordeno Ekiel.

—Y un beso en su pecho para que su corazón se purifique...

Alejé mis labios de su pecho y lo abracé fuerte pegando mi frente en su hombro.

— No Niel... ¡Aléjate!

Al escucharlo me alejé, Mikel, Eric y Ekiel, me rodearon en un abrazo cubriéndome con sus alas, buscaban protegerme.

<< ¿Qué pasa? >>

Después de varios minutos esos ángeles se fueron alejando y mi vista, en ese instante, se fijó en Kris, una luz color azul poco a poco fue desapareciendo dejando ver su cabello un poquito más castaño, su cuerpo claro y sin heridas, sus labios sanos y con un lindo color escarlata.

Me acerqué, desatándome de los otros ángeles y acaricié su piel, tierna y tersa como de bebé, lentamente abrió sus ojos, estos tenían un lindo color áureo muy sutil con toques cárdeno.

—Tus ojos...

Kris me miró algo desconcertado, mientras yo giré para ver a los seres alados detrás de mí.

—Niel él ya no es un ángel ni un demonio completo, es intermedio

Asentí ante sus palabras mientras volvía la mirada hacia Kris.

<<Un hibrido>>

— ¿Podemos estar juntos?

—Pues, dime tu, los Nefilim solo tienen prohibido entrar al cielo para ver a su superior. ¿Qué te da a entender eso?

Concebí lo que me quería decir y solo le sonreí ampliamente a Kris, el cual no decía palabra alguna pero me sonreía de una manera hermosa.

<< Siempre Juntos ~ >>

Nota: Ya casi acaba, espero que les haya gustado mucho el capitulo de hoy, hasta el proximo.