Capítulo 11: Aléjate de mí

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-Bombón,despierta- Es lo primero que escucho,pero no quiero obedecer. Me cubro con las mantas y me volteo.- Es enserio Astrid,debes irte.
- ¿A dónde?- abro un ojo para verlo.
- No lo sé, ese es tu problema. Vete.-Me levanté rápidamente
-¿Qué?¿Por qué?- Estaba desconcertada.
- No preguntes,simplemente obedece- mi desconcierto pasó a ira.
-Disculme,pero creo que no escuché bien.- lo miré desafiante.
- Si me oiste bien. Vete. AHORA- las lágrimas se acumularon en mis ojos,pero no iba a permitir que me viera llorar.
-Bien- oí su gruñido
-Rápido...- me apresuró.
Tomé un bolso para juntar todas mis cosas,pero estas ya se encontraban en uno. Preparado y listo para mí.
-Si quieres te ayudo con eso- Se ofreció de forma amable,pero cortante a la vez.
-No,puedo sola- contesté con la voz entrecortada, aunque por dentro simplemente rogaba porque fuera una de sus estúpidas bromas y que me besara hasta perder la conciencia.
-Bien- estaba totalmente serio
- No entiendo esto- dije firme
-¿Qué cosa?- se hizo el desentendido
-Esta actitud de hombre de hielo que tomaste de repente- el dolor era notorio en mi voz
-No tienes nada que entender,pero si quieres, te lo explico. No es tan dificil...- tragué fuerte y cerré los ojos rogando con todas mis fuerzas que no fuera lo que estaba pensando. Pero mis suplicas fueron en vano.
-Dilo- dije resignada- quiero oirlo de tí.-
-Solo aléjate de mí lo más que puedas mi amor - llevé una mano a mi pecho,justo sobre mi corazón. Sus palabras se sintieron como una puñalada.
-¿amor? ¿MI AMOR? ¡Eres un estúpido cínico! -Lo miré a los ojos. Si mi mirada pudiera matarlo...- Tú -piqué su pecho con mi dedo índice- no tienes ni la menor idea de lo que es el amor...- las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos. Tuvo la intensión de secarlas,pero alejé mi rostro.- NO. No vuelvas a acercarte a mí nunca. - Me di la vuelta para irme.
-Si eso es lo que quieres,lo haré- Se oía el dolor en su voz. O eso me pareció,pero no fui lo suficientemente fuerte como para asegurarme.
Al llegar a la puerta ya había un auto esperando transportarme y con mi peor pesadilla. Ailin. ¿qué hacía ella aquí? Como si fuera su casa entró y besó a Adam,quien se quedó estático y luego respondió a este.
-Mi vida,¿ya le dijiste lo de sus padres?- dijo en un tono alegre y cantarín.
-Calla- ordenó Adam
-Vamos cariño,merece saberlo.- Él la miró con odio
-¿Saber qué?- indagué
-Nada- dijo cortante- vete.
-Dimelo Ailin- exigí. Ella lo miró divertida y gozante.
- Tus padres no ayudaban a los padres de Adam,los cazaban. Los persiguieron durante años y años hasta que finalmente dieron con ellos y... Los mataron. Como venganza, Adam mató a los tuyos y te sedujo. Tu te entregaste a él,enfocaste tu energía en la manada mientras todos nos reíamos de tí... -Lo miré
-No es cierto. ¿Como podría serlo si mis padres dijeron que confiara en él?- dije segura
-En realidad,utilicé una especie de control mental para que oyeras eso- confesó el- tu madre solo dijo que te amaba.
Toda la información recibida estaba asfixiándome. Mi estómago se contrajo sin importarme nada tiré mi bolso y comencé a correr hacia el bosque. Corrí y corrí. Lo hice hasta que mis pulmones quemaron. Entonces me di cuenta de que no sabía dónde estaba,ni qué hora era. Me dejé caer en el piso y lloré. Me rompí en mil pedazos. Mi alma entera lo hizo. Estaba sola. Absurda y completamente sola. Me hice un bollito en el suelo y me dormí.

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