d o c e

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    Me quedo en el baño toda la jornada de la mañana. Entonces cuando creo que todos salieron, cuando creo que todos se fueron salgo de mi escondite, avergonzado y cabizbajo.

    Dios, ¿cuándo resulté tan patético?

—Vaya, no creí a Harry cuando me dijo que estabas aquí—doy un brinco en mi lugar y miro a la pared opuesta, cualquier parte menos él—. ¿Por qué no me miras? Oh, vamos, Niall, no seas infantil—su mano cálida se ciernen sobre mi mandíbula con suavidad y cuando mueve mi cabeza a su dirección cierro los ojos—. Dios, eres un niño.

—¿Q-Qué si lo soy? Es verdad, soy muy inmaduro y actúo como un niño pequeño y malcriado, no sé cocinar y, uh... también soy increíblemente malo en los deportes, mis calificaciones son terribles y soy realmente torpe—balbuceo cerrando mis ojos fuertemente, apretando mis párpados tan fuerte mientras intento no sentir su presencia tan palpable, no sentir su embriagadora colonia masculina o su suave respiración cerca de mi mejilla.

—¿Esos son tus defectos?—Susurra y me estremezco, aún así asiento, esperando que cambie de opinión, al ver lo inútil y tonto que resulto ser puede que incluso deje de quererme y se arrepienta—. Niall, mencionandome eso sólo me dan ganas de cuidarte, protegerte y quererte más—trago saliva, sintiéndome repentinamente confundido.

—¿Qué demonios eres, Zayn?—Y sin darme cuenta en un descuido abro mis ojos, mierda, al instante cedo al ver los achocolatados orbes de Zayn, tan profundos y... Demonios, lo odio. Como puedo me suelto de su agarre y me distancio de él.

—Soy tu futuro novio, Niall, eso soy—siento mis mejillas sonrojarse antes sus seguras palabras.

—Y-Yo... Yo no te quiero—miento tratando de mantener su firme mirada, él sonríe avanzando lentamente, yo retrocedo—. Zayn, detente, no avances más... ¡Deja de dar pasos!—Al final termino acorralado entre la pared y su cuerpo.

—Si no me quieres te haré cambiar de opinión, soy realmente muy insistente e irritante cuando me lo propongo—confiesa y suspiro abrumado, sus ojos ahora parecen más oscuro, su respiración luce desigual y porta esa maldita sonrisa de par en par que me gustaría...

—Ya lo creo—admito para mi mismo en voz baja, deteniendo mi tren de pensamiento—. No te entiendo para nada, primero me alejas, luego me besas, luego me dices que me quieres... ugh, odio las cosas complicadas—admito mientras bajo mi mirada hacia su corbata, sé que si lo sigo mirando a sus ojos haré algo imprudente. Tragando saliva tiemblo levemente cuando su mano con la que ahueca mi mejilla me hace mirarlo... vaya, sus pupilas si que están dilatadas.

—De verdad que siento que valdrá la pena luchar por ti, Niall, no me hagas cambiar de idea—dice y me besa, maldición, quisiera correrlo, empujarlo, lo que sea... pero de verdad que sus besos logran derretirme, logran hacerme olvidar donde estoy parado y hacer que siga mis sentimientos, sin preocuparme por nada.

   De repente lo atraigo más a mi, como si una necesidad ferviente e insaciable se despertara dentro mío. Sin aliento rodeo con mis brazos su cuello y ahogo mis manos en su abundante y suave cabello, acariciándolo. Su lengua entra sin permiso a miboca y es recibida con gusto, mi respiración se vuelve agitada y tener las manos de Zayn en mi cadera y espalda no ayuda. Quiero... pienso, pero luego reflexiono: ¿Qué quiero? Necesito... ¿qué necesito? Y la respuesta es tan simple que me asusta. 

    Lo quiero a él, lo necesito a él... 

   Una de sus piernas se cuelan entre las mías y gimo cuando hace algo de presión en esa parte, maldición, me siento tan nervioso e inexperto, como si fuera mi primera vez. Zayn deja de besarme y su boca se dirige a mi cuello, desanudando mi corbata y desabotonando mi camisa. Yo estoy algo demasiado extasiado para siquiera pedirle que pare pero luego recuerdo que estoy en el instituto, ambos con el uniforme y apunto de hacerlo en un baño. Bueno, hubo sitios peores, pienso al acordarme en los lugares en que lo he hecho. Quiero parar, pero los besos de Zayn en mi cuello y su escurridiza lengua... Mierda, me estoy perdiendo.

Difícil de deducir |z.h.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora