Capitulo 14

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- Deberías estar orgullosa de ti misma por ser hija mía, tú madre por lastima - dijo Cora con un tono egocéntrico.

- Eres una maldita. No te cansas de herirme? - preguntó Regina con el corazón partido, las palabras de su madre la estaban matando cada vez más.

- Porque no me matas de una vez Swan. O intentas? - dijo Cora desafiante.

- Porque creo que Regina merece una oportunidad de decirte cuánto te desprecia para que mueras sabiendo que la mejor mujer en el mundo que es tu hija y no supiste valorar te odia - le gritó Emma moviendo los brazos de un lado a otro enfurecida.

Hook seguía sentado en una roca sacándose la sangre de la nariz y viendo la guerra ente madre, hija y Emma.

- Que diga todo lo que quiera, sabe que no me importa su opinión y que nunca me ha importado - dijo Cora.

- Hija de perra hasta aquí llegaste - gritó Emma caminando hacia Cora y dándole un golpe en la cara dejándola en el suelo, Emma se puso sobre ella y estaba a punto de golpearle la cara otra vez pero Regina la detuvo.

- Emma, si la matas no podremos salvar a David, cuando lo salvemos tendrás bastante tiempo para matarla, pero espera - Emma estaba con puño en alto lista para dar el golpe, escuchaba a Regina y no sacaba su mirada de Cora, dio un respiro y se levantó.

- Juro que si haces otra, esta vez no hay compasión.

- Ni que la necesitara - dijo acomodando de mandíbula - chica fuerte la que te elegiste - dijo dirigiéndose a su hija.

- Si, la mejor - dijo Regina en un tono vencedor.

- Ahora a lo que vinimos. Dónde está David? - dijo Regina, al parecer odiaba a su madre pero aún quería darle una oportunidad, muy en el fondo pero lo quería.

- Por aquí- dijo Cora señalando un camino con una mano y con la otra tomada su boca.

- Cuídate si no quieres otro - dijo Emma al pasar por su lado.

Mary estaba por entrar a la mina cuando vio a Cora y se hizo a un lado, se quedó escondida hasta que Emma y los demás se fueran más adentro de la mina.
Cora guió a Emma y Regina hasta la parte en donde David estaba sentado y atado a la silla.

- Papá - dijo Emma queriendo correr hacia David pero nuevamente Cora la detuvo con su magia.

- Emma! - dijo David con una gran sonrisa al ver a su hija.

- Ya suéltame! - gritó Emma.

- Cuando ya hayamos hecho el trato - dijo Cora arreglándose el cabello.

- Qué trato? - preguntó Regina enojada.

- Por lo que se de mis escasos conocimientos de este mundo - mirando sarcásticamente a Emma - cada secuestrador pide un rescate ¿no?

- Qué quieres? - preguntó Emma.

- A ti hija mía.

- A mi? Qué para que, para hacerme como Zelena? - preguntó Regina a punto de enloquecer.

- No, para hacer sufrir a todos en este patético pueblo - decía Cora mientras Mary estaba viendo todo desde detrás de la entrada, miraba a dacd con los ojos vidriosos y con una lagrima que recorría su mejilla. David la vio pero ella le hizo un gesto de silencio poniendo su dedo sobre sus labios, el puedo entender al instante y siguió haciendo como nada.

- No te as a llevar a Regina, ni siquiera sobre mi cadaver te la llevarás hija de perra - dijo Emma defendiendo a Rgegina.

- Bien, entonces que el show comience - Cora estaba ahogando a David con su magia.

- Basta! - gritó Emma.

- Que ella - dijo Cora señalando a Regina - venga conmigo.

- Ahhhhhhh - sonaba entrecortado el poco aire que podía pasar por la garganta de David.

- Bien, iré contigo pero déjalo a él y a todos en paz - dijo Regina.

- Esa es mi niña - dijo Cora.

- No Regina, no, no voy a dejar que hagas esto, no sé que te podría hacer, Regina, no soportaría perderte, por favor no hagas esto, vamos a encontrar otra cosa que hace, tiene que haber otro modo.

- Emmmm... Un príncipe encantador muerto...

- Emma, tú dijiste que tu trabajo era hacerme feliz porque me amabas, ese es mi trabajo contigo también, porque te amo y no voy dejar que pierdas a tu padre solo porque mi psicótica madre quiere que vaya con ella.

- No Regina, no hagas esto - dijo Emma llorando como un par de cascada pegadas a sus ojos.

- Tengo que hacerlo, te amo, jamás lo olvides - dijo dándole un gran y apasionado beso en los labios.

- Aghhhhh - dijo Hook que estaba observando cómo idiota recostado contra la pared.

- Adiós Emms.

- Adiós Gina.

- Adiós David - dijo Cora desapareciéndose a ella, Regina, Hook y las ataduras de David.

Emma corrió hacia David para ayudarlo a levantarse pero el parecía no reaccionar, estaba en shock, no se movía sólo miraba al lugar en donde los labios de Emma y Regina se habían juntado en el aire hasta que miro a Mary que seguía escondida, en shock también y luego dijo:

- Ahora lo entiendo todo. Era con ella con quien te escapabas en las noches, por eso trabajabas tanto con ella y me ocultabas cosas en la comisaría - Emma hizo que no escuchaba lo que su padre le decía y dijo.

- Vamos con Whale para que nos diga qué estás bien - dijo forzando su voz para que no pareciera que estaba llorando destrozada, con el corazón partido, hecho pedazos por su amor, por su amada. Lo ayudó a levantarse y al darse la vuelta vio a su madre - ayúdame - dijo en voz baja haciéndose la que no pasaba nada y que el beso no había ocurrido, que ella y Regina se dijeron te amo y dijeron adiós, eso que uno nunca le quiere decir a nuestra otra mitad, nuestro amor.
Emma, Mary y David caminaron fuera de la mina, se subieron al auto de Mary y fueron al hospital, Whale lo examinó mientras Emma pensaba "Acabo de perder al amor de mi vida. Qué le voy a decir a Henry? Cómo voy a vivir con este dolor dentro de mi? Como voy a hacer para pasar cada noche de mi vida lejos de Regina?"

A SwanQueen adventureDonde viven las historias. Descúbrelo ahora