Mi Pequeña Nerd

¿Cita?

POV ETHAN:

Encendí el auto tomando el autopista.

En el trayecto, Anna se la paso cantando, me encantaba su voz, su rostro, sus ojos, su sonrisa, sus chistes  y definitivamente, me encantaba ella, completamente.

Nos topamos con una glorieta, decidí dar y dar vueltas en aquella glorieta, hasta que Anna me pidió que parará entre risas porque estaba mareada.

Salimos de aquella glorieta, y gire para ver a Anna, se estaba mordiendo las uñas, se notaba preocupada.

-¿Qué pasa Ani?- pregunté

-Mi mamá, va a matarme- respondió

-Claro que no, yo no dejo...- dije riendo -Dame el número de tu madre- saque mi móvil.

-Mira- dijo Anna mientras me mostraba el contacto en su móvil.

Marque el número, y seguidamente contestaron.

-¿Hola?- dijo la otra línea.

-Hola señora Mackenzie, soy yo, Ethan, la llamaba para que no se preocupara- dije

-¡Oh!, cielos, estaba preocupada por que no llegaba, ¿ella esta contigo, verdad? - preguntó

-Si señora, ya vamos llegando- dije

-Bien, aquí los espero- dijo

-Hasta luego señora Mackenzie- dije por último y colgué.

Mire a Anna y le dije:

-Tendremos que apurárnos-

Acelere el auto y en menos de siete minutos, estamos aparcando en el garaje de la casa de Anna. Quite mi cinturón mientras Anna me imitaba, abrí rápidamente la puerta y rodee el coche, abrí la puerta de copiloto, y le hice una reverencia, acto que ocasiono una risita de parte de Anna; la risa más hermosa que he escuchado.

Tocamos el timbre, y la señora Mackenzie abrió en seguida.

-¡Hola muchachos!- dijo

-Hola- dije amablemente.

-Hola, mamá- dijo Anna dándole un beso y un abrazo.

-Bueno, el almuerzo espera- dijo la madre de Anna y nos dispusimos a entrar.

Una vez adentro, podía ver como la mamá de Anna corría de un lado a otro poniendo cosas en la mesa, acto de seguido de un pedido de Anna.

-Ayuda le- dijo sonriente señalando a su mamá.

-Está bien- dije mientras me levantaba.

Cuando volvió el recorrido la detuve y tome los platos que tenia en sus manos, me mostró una ligera sonrisa, para volver a la cocina. La seguí y le fui pasando cada plato, mientras servía, la comida emanaba un delicioso olor, lo que proporciono que mi barriga hiciera rebeldías del hambre que empezaba a hacer.

Pase el almuerzo a la mesa, y levante mi cabeza para toparme con Anna viéndome fijamente desde el sofá, con una gran sonrisa en su rosto, me levanto su dedo pulgar y me guiño un ojo de una manera que nunca había visto, o tal vez sólo era mi cabeza que lo hacía ver así,  mi corazón latió como nunca y trate de mantener la cordura ante aquella situación, pero falle.

Al voltear me, mis torpes pies se enredaron, sentí caer al piso, pero algo me detuvo; una mano. Recorrí la mirada de todo el brazo a el rostro del que me había sostenido. Era un hombre de cabello negro con unos cuantos cabellos blancos, ojos verdes, traje elegante y un maletín en su mano.

-Ten cuidado muchacho- me dijo mientras daba pequeñas palmadas en mi espalda.

-Si señor- respondí firme.

-¡Papá!- gritó Anna saltando del sofá hacia el hombre.

"Con que ese era su padre, del que tanto me hablo"

-Hola mi vida- dijo besando sus mejillas y arreglando su cabello - Cómo has estado, ¿Me extrañas te?- preguntó su padre.

-Muy bien, te extrañé mucho- dijo Anna abrazando a su padre- Papá, el es Ethan-

-Mucho gusto Ethan, soy Will, el padre de esta hermosura- dijo observando a Anna, con anhelo.

-Mucho gusto señor Houston- extendí mi mano y el la estrecho.

Volví a la cocina, donde estaba la madre de Anna.

-Su esposo...es- dije, sin saber agrupar las palabras.

-No te entiendo cariño- me dijo amablemente mientras tomaba dos vasos en su mano y se disponía a salir de la cocina.

-Espere, tengo una pregunta- dije rápidamente.

Ella se volteo y sonrió.

-Preguntame- dijo

-Su esposo es de temperamento- pregunté.

-Verás- dejo los vasos otra vez en el mesón- Depende de lo que lo haga enfadar- dijo recostándose en la pared.

-Am...- la mire, levante las cejas y apreté mis labios.

- Oh, tu te refieres a...- me miró y abrió los ojos.

-Si, bueno... más o menos- dije un poco apenado.

-En cuanto a eso, es muy sobre protector, deberías hablar con él sobre eso- dijo calmadamente.

- Señora Mackenzie, si no he podido decirle a ella, como se lo diré a él- dije preocupado.

-¿No se lo has dicho?- preguntó

-No señora- dije

-Mira, la mujer da señales de que, lo que tu sientes ella lo siente también, de lo contrario si lo dices, dañaras esa linda amistad, trata de enamorarla, hacerle ver que es la única en su vida, que harías todo por ella, y más que todo, lo mas importante, la primera impresión es la que cuenta- dijo.

-Quiere decir...- pregunté recordando cada cosa que dijo.

-Si, una cita, la primera de todas la citas que querrás con ella- dijo tomando de nuevo los vasos- Te preguntarás porque te estoy diciendo esto yo, como madre de Anna- preguntó y asentí.- Porque se nota que la quieres, porque ningún amigo de Anna a llegado a esta casa a traerla a esas horas de la que las trajiste tu, y el estado en el que estaba, da muestras de que la cuidaste bien, ningún otro hubiera estado acá con un padre como el de Anna, tienes valor, y eso es lo que cuenta, y a mi esposo le agrada eso- término de decir eso y salió.

Quede un rato reflexionando sobre lo que me acababa de decir.

¿Una primera cita?

Tendría que pedirle más concejos para que todo saliera bien, no quisiera estropearlo todo.