No sé cuánto tiempo paso pero me desperté con mucha hambre y demasiado agotada, no me acordaba que estaba dentro de una jaula. Tenía que ponerme a pensar cómo salir de ahí. Miles había dejado unas cadenas dentro de la jaula, me di cuenta que los barrotes eran un poco débiles, así que decidí usar las cadenas para halar hacia cada lado y abrir un espacio entre los barrotes, me puse en esa tarea, y funciono a la perfección, Salí por el pequeño espacio que había abierto y después fui a la cocina a hacerme algo de comer, estaba muerta de hambre, mire el reloj y eran las 3:00 a.m. y lo peor era que tenía que levantarme temprano para ir a la universidad entonces decidí acostarme.
Cuando me levante escuche mi teléfono sonar, era la alarma, salí hacia el baño me arregle lo más rápido posible para que miles no llegara y me llevara, no quería otra vez que me gritara. Ya estaba lista para salir cuando en ese instante se abrió la puerta de la casa y yo salí corriendo a esconderme, sabía que eso me iba a salir caro pero no tenía opción, Miles me busco por toda la casa y se fue. Entonces salí y me fui en mi auto, faltaban 5 minutos para que entrara.
Por suerte llegue faltando 1 minuto, ese día no quería salir de la universidad, no quería que miles me recogiera.
Cuando sonó el timbre de salida yo me quede un rato hablando con el profesor para no salir, pero tenía que hacerlo entonces me fui en dirección al auto cuando alguien otra vez me agarro por el brazo, me ericé.
-Ana te he estado buscando estos últimos días- descanse era Lisa.
-Lisa que susto me has dado…-
-¿Dónde has estado?¿por qué no has ido a las clases de canto?-
-porque…he estado ocupada, ya tu sabes con lo de la universidad y esas cosas- intente irme
-ummm, ¿por qué será que no te creo?-mierda, ya iba a empezar a contarle cuando me acorde de que no podía decir nada
-pero te estoy hablando en serio-
-Amor mío con que aquí estabas- llego miles abrazándome por la espalda
-Miles que sorpresa-dijo Lisa
-si no te importa me llevare a Ana a casa.-miles fulmino a lisa con la mirada
-claro no hay problema, al fin y al cabo es tu novia- dijo lisa en tono irónico y se fue, lo que me faltaba que mi mejor amiga se enojara.Miles me llevo a casa y empezaba otra vez con la rutina de siempre…
-¿le has dicho algo a Lisa? – me agarro del cabello
-no, te lo juro que no-
-eso espero nena, pero eso no te salva de lo que te hare hoy-
-no me vayas a pegar- le suplique, no quería otra cicatriz mas
-mucho peor que eso…nena…mucho peor-Me tomo de los brazos y me llevo a la cocina, encendió la estufa y puso mis manos allí encima, gritaba del dolor, me estaba quemando las manos y al parecer él lo disfrutaba.
-Miles para por favor-dije llorando y gritando al mismo tiempo
-lo hare si prometes no volver a escaparte-dijo entre dientes
-esta bien pero ya suéltame por favor-
-maldita perra-dijo y por fin me solto…me mire las manos y estaban totalmente quemada y ahora que iba a hacer. Salí corriendo al cuarto a mojarme las manos y vendármelas para que mañana estuvieran mejor…Miles llego por mi espalda, lo vi reflejado en el espejo.
-todavía no he acabado contigo, ¡maldita zorra!-dijo echándome una olla de agua caliente en el cuerpo. Grite hasta no poder más, esto tenía que parar, yo no podía soportar todo lo que él estaba haciendo conmigo. Él salió y se fue como siempre dejándome ahí sola otra vez, pero prefería eso que estar con él. Me metí a la bañera y abrí el agua fría, de verdad que descanse cuando sentí el agua fría recorrer cada una de mis quemaduras.Fui y me acosté, mañana no tenía que ir a la universidad, pero aún así hubiera preferido ir, que estar aquí con el maldito sádico que solía llamar “novio”.
Cuando amaneció me removí en la cama y sentí el ardor de las quemaduras por el agua caliente, e intente doblar mis manos pero estaban demasiado doloridas, decidí quedarme en cama un rato más hasta que tuve una idea. Pero todo se vino abajo cuando llego miles…
-Querida-entro en el cuarto-he traído comida para que te alimentes-dijo tirando una bolsa en mi cama
-gracias- dije en voz muy baja, no quería hablar tan fuerte
-ya que estas tan adolorida y bien merecido…hoy he decidido que no te hare algo tan fuerte…-descanse pero a la vez estaba asustada... ¿algún día iba a parar?Salió del cuarto y trajo una bolsa con muchas bebidas…
-bebé esto- me pasó una botella con un líquido extraño
-¿qué es?
-eso no te importa, solo bébelo-Lo bebí y al cabo de unas horas empecé a ver mal, tenía ganas de vomitar y mareo, mire mis manos y estaban tornándose azules…me desmaye.
Cuando desperté estaba en el hospital, Lisa estaba allí y por desgracia Miles también, en ese momento llego el médico.
-le chica esta intoxicada por ingerir metanol, ¿se puede saber cómo llego a esto a su organismo?-dijo el médico mirando a Miles.
- No lo sé, cuando llegue a casa ella estaba en el suelo con esa botella y la traje aquí-
-bueno, además la señorita tiene graves quemaduras en las manos y el cuerpo, también tiene serias cicatrices, ¿esto a que se debe?-miles trago saliva, estaba realmente nervioso.
-estaba cocinando y cogí la olla sin los guantes y me queme, solté la olla con agua caliente y me cayó encima…-interrumpí para que el médico no sospechara.
-debe tener más cuidado la próxima vez, ahora le pregunto ¿por qué bebió metanol?-
-ehhh-me quede pensando- es que…yo soy bastante torpe y había guardado el metanol en la nevera para llevarlo a la universidad mañana y lo confundí con agua-
-esta bien, puede irse mañana, por ahora le haremos un lavado gástrico- entendía bien esa forma de hablar, al fin y al cabo estudiaba medicina.
-solo uno de los dos le puede hacer visita-dijo el médico saliendo de la habitación
-me quedo yo-dijo Lisa, Miles salió enojado pero no importa.Cuando Miles se hallaba fuera de la habitación lisa me miro y se cruzó de brazos
-¿sabes? No te creo ni pizca de lo que le has dicho al médico-
-pues estas en lo correcto-abrió los ojos de par en par-Miles me obligo a tomar esa bebida, el fue el que me tiro agua caliente y me golpeo hasta dejarme cicatrices…-
-Ana ¡¿pero qué estás diciendo?!… ¿por qué no me lo habías dicho antes? –
-porque miles me tenía prohibido hablar con los demás-baje la cabeza y puse mis manos en la cara y me solté a llorar-me dijo que si yo hablaba…me iba...Me iba-
-me iba a que Ana?-dijo interrumpiéndome
-me iba a matar lisa-
-ese maldito va a saber quién va a matar a quien-dijo parándose de su silla, yo la agarre del brazo y la volví y la senté
-lisa no hagas una estupidez, además yo ya tengo la venganza planeada y tu me vas a ayudar-
- a ver cuente pues-
-ya veras, solo me tienes que encubrir…
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un sádico romance
Roman d'amourAnabeth una estudiante de medicina en londres conoce a Miles, su amiga intenta advertirle sobre el pasado oscuro de este, pero ella decide no hacerle caso, una mala decision. Las cosas iran cambiando poco a poco hasta que anabeth se da cuenta de por...