11. Harmony

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Al ver muy bien el lugar en el que me encontraba, corrí atraves de las atracciones las cuales se veían en un muy perfecto estado,al llegar a la salida y al hacerlo me encuentro en la zona del accidente del cual yo supuestamente había muerto, todavía estaban ahí los vagones del tren y su carga por todos lados al parecer no les importó moverlos ya que es un lugar desolado. Después de quedarme un rato ahí pensando me fui corriendo hacia el bosque ya que si mal no recuerdo algo estaba detrás de mí y al adentran me al frío bosque en plena media noche me encontré con una cabaña y aun que no fuera la mejor de las ideas entrar ahí era mi mejor opción, me acerqué a la vieja cabaña y abrí la puerta para encontrarme con una sala llena de muebles y cosas llenas de polvo, cerré la puerta y aun que no me gustaba estar aqui no tenía de otra, mi idea era esperar a que esas cosas que me seguían se desaparecieran pero al observar por las ventanas todo parecía estar tranquilo pero al observar más detalladamente entre la oscuridad de los árboles veía a gente entre ella, personas que me esperaban a que saliera de esa cabaña y tanto fue la espera que entre a una habitación a dormir porque el sueño me había dominado. La habitación se veía bien Hasta que voltee y vi esos retratos de personas con rostros deformados y no sólo eran dos sino que estaban por toda la habitación y lo peor era como si observarán directo a la cama en la que estaba trate de no prestarles atención pero fue mas que imposible hasta el punto de taparme con las cobijas.

Abrí mis ojos al sentir la luz entrar por las ventanas, ya había pasado la noche y al levantarme de la cama recordé que en esta habitación no habían ventanas. Y al observar bien el lugar, los retratos con las personas ya no estaban porque realmente eran ventanas!! En tan solo pensarlo me daba un escalofrío y mejor decidí salir de esa cabaña de una vez por todas e irme a casa.

Al salir del bosque regrese a la ciudad y mientras caminaba por la plaza del centro pude distinguir a una chica a lo lejos, estaba de espaldas pero me parecía conocida y al moverme de ángulo pude observar su rostro y sentí una gran alegría al ver de quien se trataba, era delea y estaba tan bella como siempre lo fue aunque hayan pasado meses yo aun la recordaba igual y mi único impulso fue correr hacia ella entre la multitud y darle un enorme abrazo pero a tan sólo unos pasos de ella un chico se le acercó con dos helados en sus manos, a delea le saca una sonrisa y el chico se le acerca a sus rostro para darle un beso en sus labios. No pude evitar sentir rabia e impotencia de ir y separarlos pero tanto como esos sentimientos me sorprendió el hecho y luego se sentaron en un banco mientras se comían sus helados felices. Habia comprendido que ella tenía un novio, ella ya me habría olvidado. Me fui de ahi antes de que me viera y mientras tome un tren a mi casa trataba de evitar que las lágrimas que se posaban en mis ojos salieran.

Al llegar a mi casa me senté en el sofa a pensar en lo que mis ojos vieron pero eso me dolia cada ves mas, necesitaba hablar con alguien pero no tenia a nadie, ni siquiera sabía donde estaba michael. Mientras pensaba en mi miseria escuche el ruido de algo romperse que provenía de la biblioteca, me levante temeroso del sofá y no sabia si ir a buscar que fue lo que ocurrió ya que eso nunca resulta bien pero quedarme ahí y hacer como si nada paso tampoco era una opción,《Bueno, ya que, después de todo lo que eh visto no creo que me aterre》pensé y me fui acercando a la puerta y la abrí y todo estaba tal como lo recordaba encendí la luz y con la mirada buscaba que fue lo que se rompió pero no habia nada, pues tal parece no fue ahí y me dirijo a la puerta que lleva a una pequeña sala y que en esta está ubicada la puerta trasera, al abrir la puerta me encontré con tres chicos vestidos de negro con unos linternas no tarde en darme cuenta de que eran unos simples vándalos que al verme se quedaron atónitos por un segundo y luego de verme bien dos de ellos se fueron corriendo por la puerta trasera que habían roto para entrar pero uno de ellos se quedo ahi parado viéndome como si no lo creía y debajo de su capucha que le cubria la cara dijo: - Eres tú !! - muy impresionado. Su voz me parecía familiar y el lo que hizo fue quitarse la caucho que dejó ver su cara y era na a más y nada menos que Michael!!

No Mires Atrás 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora