Capítulo 3.

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Nunca en su vida, al menos que ella recordará, había dormido tan bien como ese día. Aún se sentía molesta por sus planes arruinados, pero ella estaba decidida a darle fin.

Revolvió su cabello y se levanto, todo era tan tranquilo aquí, tal vez Julian aún no se despertaba. Fue a la sala y sobre la gran mesa encontró una nota. Se sentó en el sillón.

Chris:

Tuve que salir a arreglar unas cosas, te veré más tarde. Espero y para cuando despiertes Dan ya haya llevado la comida.

Julian.

Había dos cosas que se preguntó después de leer esto. ¿Quién era Dan? Y ¿por qué diablos la llamaba Chris? Ella odiaba que la llamaran así, no se lo permitía ni a su madre.

Dejo la carta de lado, no había pensado en su madre, ¿ya se habría dado cuenta que no estaba en casa? O quizás eso tampoco le importaba. Se recargó en el respaldo y dejo su cabeza hacia atrás. Pensar que todo esto se originó por ella.

Busco su celular pero recordó que lo había dejado en casa, ¿alguien ya se habría preocupado por ella? Algún compañero de universidad preocupado porque no había asistido a la escuela hoy tal vez. Necesitaba una laptop para poder revisar su Facebook o Twitter.

Se paró del sillón dispuesta a buscarla, en algún lugar de este penthouse tenía que haber una laptop. Busco, busco y busco por casi todo el departamento sin éxito, solo había un lugar en el que no había buscado, el cuarto de Julian.

Camino tímida por el pasillo que había señalado Julian el día anterior, la puerta estaba entre abierta, la abrió un poco más para poder asomar la cabeza y poder asegurarse de que no había nadie en la habitación. Esta era el doble de grande que la suya y tenía muchísimas más cosas, la cama era más grande y tenía un jacuzzi en el gran balcón. Busco y busco y de nuevo no encontró nada ¿en serio no había una laptop?

Si Christina era una chica fría y distante, que parecía darle igual todo el mundo, pero ella necesitaba amor , en el fondo lo pedía a gritos aunque quisiera aparentar otra cosa, que alguien se preocupara por ella. Aunque no quisiera admitirlo, por eso buscaba desesperadamente la laptop.

En su último intento por encontrar algo, registró la habitación con la mirada pero algo llamó su atención. Había un frasco naranja con tapa blanca sobre la mesa de noche, eran pastillas para dormir.

¡Bingo!

"Hazlo, ¡HAZLO!" -gritaba su voz interior- "tienes otra oportunidad, no lo arruines. Termina lo que empezaste. Termínalo"

Sostuvo el frasco entre sus manos, era tan fácil, como no lo había pensado antes. Este era el momento para dejar de ser una carga para todos. Fue a la cocina a buscar algo con que beberlas, al abrir el refrigerador se encontró exactamente con lo mismo que Julian había dicho ayer, cervezas viejas y poco más. Tomó una de ellas y la abrió. Puso un puñado de patillas en su boca y tomo de la cerveza.

Su estómago empezó a doler demasiado, su vista comenzó a nublarse hasta caer al piso.

~

Golpeó tan duro la puerta de la habitación al entrar que hizo que la doctora pegara un brinco del susto.

-Christina

Fue a la cama a tomarla de la mano directamente, ella estaba dormida, tan pálida. De nuevo había tratado de suicidarse.

-señor no es necesario que se altere, ahora ella estará mejor

Better Off Dead (Julian Casablancas) {The Strokes} #Wattys2016 |Terminada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora