La vida en frambuesas.

Comienzo

Llegamos al aeropuerto y como no, mi madre, que por cierto se llama Rous se entretiene hablando con no sé quién de no se qué, yo mientras, entro y miro detenidamente el aeropuerto, es como en las pelis.
Yo nunca había venido a uno será la primera vez que me monte en un ¡¡avión!!
Mi madre se acerca a mi y juntas hacemos todos esos pasos que se suele hacer cuando vas a ir de viaje.
Poco después(horas) nos bajamos del avión ya en Toulouse, y claro, me puse a pensar en lo que me dijo mientras íbamos en el taxi mi madre me explicó el por qué debíamos irnos; mi padre se fue de casa cuando yo tenia muy pocos años, yo recuerdo muy poco de el, pero algo se me ha quedado, mi madre le quería mucho, pero cuando eso pasó nosotros nos fuimos a vivir con mis abuelos y ella dice que para no molestar a los abuelos, nos hemos ido de allí, yo no creo que eso sea el motivo, pero dejémoslo estar, no importa, aunque echaré de menos a mis abuelos, ahora vamos a vivir con mi tía Mia osea, la hermana de mi madre, con la que mejor se lleva, tengo otra tía que se llama Adelaida, pero con ella me llevo mal, apenas la he visto pero lo poco que ha sido, hemos acabado mal siempre.

Cuando salimos del aeropuerto, Mia estaba esperándonos en su coche morado, al principio no la reconocía ha cambiado mucho desde la ultima vez que la vi, pero sigue teniendo sus curvas a mi me gusta que sea como es, y no como las chicas con "anorexia" tan delgadas en la tele, es guay que alguien se sienta bien con su cuerpo sea como sea, y ella es así, y le gusta serlo, eso es lo mejor.
Ella se da cuenta de que estamos ahí y se baja del coche, mi madre le abraza fuerte, como si solo la hubiese visto 1 vez en su vida, y luego se acerca a mi, me da dos besos, y las tres nos dirigimos al coche rumbo a su casa.
Me imagino la casa de mil maneras, ordenada desordenada, con tonos oscuros, claros, decorados, colores chillones, muchos muchos colores.
Yo cuando tenga una casa la decoraré muy única así como que solo se note que sea mía.
...
Al rato nos bajamos del coche y empezamos a hablar sobre lo que hemos estado haciendo estos 2años, y llegamos a su casa.

Entro por la puerta y me quedo sorprendida, con la boca abierta, se me cae la maleta y el bolso al suelo, esto es increíble, no me lo puedo creer...