Narro io bel (Belen)
El siguiente mes pasó con rapidez.
Donghae y yo estábamos en el mejor momento de nuestra relación, por así decirlo, pasábamos casi todos los días juntos, disfrutándonos el uno al otro.
En un mes terminaríamos el año de secundaria y eso era algo deprimente para ambos. Yo sabía perfectamente que me tendría que cambiar de escuela, aunque me obligaba a no pensar en ello, no aun.
Estaba contestando un e-mail cuando mi móvil comenzó a sonar.
La imagen de Donghae y yo en la playa alumbro la pantalla.
-Bebe- Saludo Donghae dulcemente.
-Cariño, ¿cómo despertaste?- Pregunte poniéndome de pie.
-Bien, ¿y tú?
-También.
-En fin, princesa... quiero invitarte almorzar a un lugar particular- Hablo con timidez.
-Estaría encantada de almorzar contigo, Donghae- Dije mientras sacaba un enterito de mi closet.
-Que bien porque almorzaremos junto a mi familia... en Carlos paz.
"Y eso si que no me lo esperaba", pensé.
-Oh, estaría encantada- Hable amablemente.
-Paso por ti en media hora- Pude sentir el alivio en su voz.
Debería estar aterrada ante el hecho de que conoceré por primera vez a la familia, casi secreta, de mi novio. Pero me siento totalmente distinta, me siento feliz.
Donghae me confesó que ninguna de sus anteriores novias había conocido a su familia, ya que él no estaba seguro con ninguna de ellas de lo que verdaderamente sentía. Hasta hoy.
Me visto con un simple pero bonito vestido salmón. Me coloco mis botas texanas marrones y me recoge el cabello en una coleta alta. No me maquillo, solo me coloco un brillo labial.
Me perfumo con el favorito de Donghae, que huele a menta y rosas. Me veo por última vez en el espejo, acomodándome el vestido y retocando el brillo labial.
"Si a Donghae le gustas así, a su familia también" Me digo a mi misma para relajarme.
Escucho el ruido de la motocicleta de Donghae aparcar frete a la entrada principal.
Bajo las escaleras rápidamente, acostumbrándome a mis zapatos. Tomo mi bolso y abro la puerta, Donghae está apoyado contra su motocicleta con su gran chaqueta negra y una remera blanca debajo.
Levanta la vista de su móvil y yo me encuentro con los ojos más bellos del mundo, el sonríe.
-¿No tienes un casco más elegante?- Dije mirando el casco de protección.
-Es negro, creí que te gustaría- Bromea estirando su mano con el casco.
Me subo a la motocicleta detrás de Donghae, me coloco el casco y abrazo a Donghae por la cintura.
-Mi color favorito es rosado- Susurro en su oído.
El suelta una leve risita y enciende el motor de la motocicleta. Yo lo abrazo con más fuerza y Donghae comienza el viaje hasta Calos paz.
No sé cuánto tiempo ha pasado cuando Donghae aparca frente a una vieja casa. He cerrado los ojos durante todo el camino, por lo que no sé exactamente donde me encuentro.
Donghae me ofrece una mano y yo me bajo de la motocicleta, que resulto un cómodo y rápido vehículo. Dejamos los cascos colgados de la motocicleta, yo me acomodo la coleta y el vestido.
Donghae me toma la mano y me conduce hasta la pequeña puerta blanca, se vuelve a mirarme y yo asiento demostrándole que yo estaré para el si algo sucede. Gira el picaporte y ambos entramos a la gran casa.
Dos niñitas corren hasta nosotros y abrazan a Donghae por las piernas.
-¡Tío Donghae!- Chillan ambas.
-¡Pequeñas!- Donghae se arrodilla y abraza a las gemelas.
Estas me miran confundidas, luego sonríen.
Ambas son rubias con rizos, ojos mieles.
-Tío... ¿ella quien es?- Pregunta una de las niñas.
Donghae me mira y sonríe, haciéndome sonrojar.
-Ella es mi novia, Belen
Ambas niñas se miran entre sí, luego miran a Juan y se van corriendo hacia la cocina llamando a su madre.
Donghae se pone de pie y me toma la mano otra vez, caminamos unos pasos más adentro de la casa hasta llegar a la cocina donde una muchacha habla con las niñas, debe ser su madre.
-¡Donghae!- Grita la muchacha. Yo retrocedo unos pasos atrás mientras ellos se saludan.
-Tú eres Belen ¿cierto?- Pregunta una voz detrás de mí, yo me giro y me encuentro con un niño de seis o siete años.
-Así es- Hablo algo nerviosa.
-Eres muy bonita, podrías dejar a Donghae y salir conmigo.
Recorro de pies a cabeza al niño con la mirada y luego estallo en risas. Siento una manos rodearme las caderas y por la delicadeza en que lo hace sé que es Donghae.
-¿Así que me quieres robar a mi novia, Romeo?- Pregunto Ryeowook mientras yo intento dejar de reír.
El niño mira a Donghae temeroso, niega con la cabeza y corre hasta el jardín. Ambos estallamos en risas otra vez.
-Te quiero presentar a dos personas muy especiales...- Susurra en mi oído y me conduce hasta el jardín donde una señora y otra muchacha están sentadas en una mesa mirando a los niños correr y jugar.
Ambas se ponen de pie al instante y corren a abrazar a Ryeowook. La mujer más grande, de cabello mono, abraza y besa la mejilla de Juan con ternura. La otra muchacha, pelinegra, lo abraza con ternura.
Donghae y las dos muchachas se vuelven a mirarme, el asiente y ellas sonríen.
-Amor, ella es mi madre, Marlli- La mujer mayor se acerca y me saluda con un beso en la mejilla, luego sonríe y me abraza. Yo correspondo el cálido abrazo- Y ella es mi hermana, Manuela.
-Por fin tengo el placer de conocerte, Belen, hemos escuchado maravillas de ti- Nos damos un cálido abrazo.
Una de las niñas nos informa que la comida esta lista, Marlli y Manuela nos conducen a una gran mesa en la casa.
Comemos pollo asado con ensaladas de distintos tipos, explico que debido a mi incidente con las drogas no puedo comer demasiada carne y ellos lo aceptan, lo que me deja comiendo ensalada sola.
-¿Y cómo se conocieron?- Pregunta el niño de hace ratico, que si mi memoria no falla es el primo de Donghae.
Limpio mi boca y miro al resto de la mesa que aguarda mi respuesta, sonrió nerviosa.
-La primera vez que nos vimos fue en clase de biología pero- Miro a Donghae quien sonríe- esa misma noche, el me busco de una fiesta.
-Advino- Habla Manuela- Estabas demasiado borracha para conducir y llamaste a Donghae para que conduzca.
La mesa suelta una risita, mis mejillas toman color, mi expediente de alcohol no es el mejor.
-De hecho, no- Confieso- Yo estaba con mi anterior novio, Kiseop- Donghae frunce el ceño al oír su nombre- Y estábamos muy ebrios, yo había decidido irme cuando Donghae apareció y me convenció de que no haga una estupidez.
-¿Y ahí nació el amor?- Pregunta Marlli con sus dedos entrelazados, enternecida.
-No- Continua Donghae- Belen y yo no teníamos una relación no muy... "amigable", yo solo la había ayudado como a cualquiera pero al verla dormida en mi cama, solo con mi remera me di cuenta que sentía algo por ella- Me toma la mano y yo sonrió- Pero las cosas fueron difíciles, tuvimos que pasar por mucho para llegar a ser lo que somos hoy.
Y me besa.
