De Amor y Otras Adicciones

Capítulo 5: Acercándose

Este capítulo es bastante parecido al anterior y sé que por ahí lo van a encontrar un poco repetitivo, pero quería darles a conocer un poco la perspectiva de Bella sobre todo el asunto.

Gracias a Sofiroldan y a Carlabernengo por los comentarios! Y a los que le dieron votos o siguen la historia :)

Disfruten el cap!

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Capítulo 5: Acercándose

 “La distancia sólo es cuestión de perspectiva.”

 Bella Pov:

 Llegué a casa con minutos de sobra para ducharme y vestirme. Me metí en el baño y empecé mi rutina de aseo. Unos minutos después, salí del baño con una toalla alrededor de mi cuerpo para ver a Alice sentada en mi cama con una sonrisa de suficiencia en su rostro mientras inspeccionaba sus uñas con aire desinteresado. Rodé mis ojos y en medio segundo me vestí convirtiéndome en un borrón alrededor de mi habitación conforme buscaba cosas para ponerme. Terminé con unos jeans ajustados negros que resaltaban mi figura, unos tacos azules y una remera escote en V del mismo color para hacer juego.

–¿Qué pasa Alice? – pregunté sentándome a su lado en la cama.

–Bueno esto ha traído muchos cambios positivos – dijo haciéndose la distraída.

–¿Qué cosa? – respondí entrecerrando mis ojos.

–Si tan sólo hubiera sabido que solamente necesitaba un chico lindo para motivarte a que te vistieras bien, me habría ahorrado un montón de discusiones contigo – respondió sonriendo.

–No seas idiota Alice, simplemente me sentí con ganas de usar tacos – dije indignada.

Vio a través de mi mentira como si fuera agua cristalina.

–Isabella Marie Swan Cullen nunca en su vida y existencia – recalcó – se hubiese puesto tacos por su cuenta. Ni siquiera hubiera tenido “ganas” de ponerse algo considerado “decente” entre mis estándares.

Me paré, evitándola sin disimularlo, y fui a buscar mi bolso y abrigo a mi closet. La enana se levantó y se encaminó a la puerta.

–Si planeas ir a ver a Edward todas las noches te aconsejo que vayas a cazar seguido para mantener tu sed bajo control. Seguro no va a pasar nada, pero no te confíes – comentó mientras salía de mi cuarto con sus andares de bailarina.

Me volteé, nuevamente indignada, a verla. Ella miró por encima de su hombro sonriéndome y me guiñó el ojo. Oí una risa escandalosa abajo. Suspiré. Maldición, Emmet no dejaría esto en paz por al menos el resto de la semana. Bajé las escaleras para encontrar a mis hermanos esperándome. Saludamos a Esme con un beso en la mejilla cada uno y subimos al convertible de Rosalie. Alice había anunciado que no llovería así que era seguro llevar el auto descapotable. Durante todo el trayecto pude ver que Emmet se estaba muriendo por decir algo. Traté de no prestarle atención y miré el paisaje mientras pasábamos.

Llegamos a la escuela y nos paramos enfrente del auto a charlar para pasar un poco el rato hasta que se hiciera la hora de entrada. Emmet me miró con diversión. Estaba planeando algo, ahora no cabía duda.

–Dime Bella, ¿qué es mejor para ver en la oscuridad, unos binoculares nocturnos o visión térmica? – preguntó con aire distraído.

–¿De qué rayos estás hablando?¿Por qué me preguntas eso?  – pregunté confundida.

–No, nada, es que como ahora eres una acosadora full time pensé que sabrías mejor de esto que nadie – respondió para después largarse a reír con Jazz.