Anime One-Shots

|Jean Kirschtein| Celestina

[Y/N] - tu nombre
[E/C] - color de ojos

Aviso: puede que vomitéis arcoiris.

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Celestina
Jean Kirschtein

          [Y/N] alzó la cabeza en busca de los culpables de interrumpir su lectura. Al localizarlos, suspiró resignada. Como no, Jean y Eren estaban discutiendo nuevamente. ¿Cuál sería el motivo esta vez?

          Con curiosidad, la joven se acercó a ellos y, al ver como la discusión cada vez iba a más, trató de separarlos. Sin embargo, los chicos no parecieron percatarse de su presencia.

          —¡No vuelvas a acercarte a Mikasa!— gritó Eren con tan mal suerte que, al intentar empujar a Jean, golpeó a [Y/N] haciendo que esta cayese al suelo.

          De inmediato, ambos dejaron de discutir y miraron con preocupación a la chica.

          —¡[Y/N]! ¡Lo siento! ¡No te había visto! ¡Lo siento [Y/N]!— se apresuró a disculparse Eren que parecía no saber que hacer.

          —¿Estás bien?— preguntó Jean, agachándose para quedar a su altura y extendiendo su mano hacia ella.

          —Claro que sí, Kirschtein. Es solo que gusta caerme al suelo al menos una vez a la semana— respondió sarcástica.

          Jean la miró confundido. ¿Por qué la chica se mostraba tan hostil? Rechazando la mano que el castaño le ofrecía, [Y/N] se levantó y tras despedirse de Eren y decirle que no pasaba nada, se fue de allí sin mirar atrás.

          Una vez que estuvo lo suficientemente lejos, la oji-[E/C] se sentó en el suelo y dejó salir las lágrimas que había estado conteniendo desde el momento en que escucho la palabra 'Mikasa'. No hacía falta ser muy listo para notar que Jean estaba enamorado de la Ackerman. [Y/N] estaba muy segura de que la mayoría de sus discusiones con Eren eran por ese motivo y eso le dolía. Le dolía saber que el idiota del que se había enamorado estaba enamorado de otra. Porque eso es lo que Jean era, un idiota del que tenía que olvidarse.

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          Jean observaba cómo la chica de ojos [E/C] comía silenciosamente, sin intercambiar ninguna palabra con sus compañeros de mesa lo que le parecía extraño. Llevaba actuando así desde que Eren la empujó. Sin embargo, estaba seguro de que eso no era lo que le pasaba a la chica ya que seguía juntándose con Eren y los demás y no parecía guardarle rencor al ojiverde. Tenía que ser algo más.

          «Claro que sí, Kirschtein»

          Esas palabras de la joven no dejaban de repetirse en su mente una y otra vez. La forma en que le había llamado por su apellido, como si fuese algo que le desagradase. No entendía el por qué de su actitud borde con él y eso le molestaba.

          —¿Sabes? En vez de mirarla cómo un acosador deberías ir y decirle que te gusta— dijo Marco interrumpiendo sus pensamientos.

          Jean no tardó en sonrojarse ante el comentario de su amigo y apartar la mirada de la chica. ¿Tanto se notaba?

          —N-no puedo hacerlo— respondió cabizbajo. —Creo que me odia— añadió.

          Marco enarcó una ceja. ¿Odiarle? Estaba bastante seguro de que no era el caso. El moreno había visto como la chica miraba de reojo a su amigo cuando creía que nadie la veía y no era con odio precisamente. Esos dos tórtolos estaban enamorados el uno del otro pero ambos parecían estar demasiado ciegos cómo para notarlo.