La Viuda Negra

padre

Al otro día me levante como siempre lo hago, me vesti, me puse mi velo junto a mis guantes y salí de mi cuarto, ahora lo que quiero es conversar con mi padre y pasar mas tiempo con el, es increible que hace tan solo 9 años yo lo único que quería era casarme con Emiliano para ser libre de todas las ordenes de mi padre, como todo un BellaNegra era estricto y sobreprotector, muy apegado a los modales y frío como una roca, ahora ya no queda nada de ese hombre que alguna vez admiré, yo también cambié y mi hermana también aunque de la peor forma.

Una empleada me llevo a su cuarto que estaba junto al de Felicia, entre allí sola y vi a padre acostado en su cama mirando a la nada, me acerqué a el y me senté al lado suyo, padre dirigió su mirada a mi y con su mano acarició mi cara que era tapada por mi velo:

-Nunca supe porque pero de alguna forma sabía que te convertirias en la Viuda Negra mi pequeña Paula. -Dijo mientras acariciaba mi mejilla-.

No respondí a lo que dijo ya que tenía razón como siempre y no iba a negarlo.

Felicia entró por la puerta y corrió a abrazar a padre que la recibio con los brazos abiertos, sonreí un poco al ver a mi hermanita tan feliz abrazando a nuestro padre como si la vida se le fuera en ello, María se acerco a mi y me susurró en el oído:

-Mi señora el doctor Tobias esta abajo esperando por vos.

-Pues guiarlo hasta aquí, tiene a un paciente a quién ver. -Le orde-
ne en silencio-.

-Como usted ordene. -Iso reverencia y salió del cuarto de papa, creó que venía acompañando a Felicia-.

El doctor no tardo en subir a la recamara y cuándo llego nos saludo haciendo una reverencia y nosotros que estabamos sentados saludamos con un "Buenos días" y un asentimiento de cabeza, el puso su maletín en la cama y saco sus herramientas de trabajo, Felicia se separo de papa y yo la lleve a una silla para dejar que el doctor hiciera su trabajo.

No demoro mucho que digamos, le revisó la temperatura, vendo algunas heridas que tenía, le vio el ojo que tapaba su parche y casi me desmayo al ver que no tenía un ojo, solo estaba una marca de un cosido muy mal hecho, Tobias le puso una hierva en ese lugar y le limpio esa herida, le puso el parche otra vez y saco de su maletín una libreta en donde anoto unas cosas y luego me lo paso a mi:

-Aquí tiene unos remedios para su padre, y también necesita bastante reposó, el señor tiene demasiadas heridas por muchas partes de su cuerpo y al parecer alguien le saco su ojo derecho a sangre fría, pero por lo menos puede ver con el otro.

-Gracias doctor pero se pondrá bien verdad. -Pregunto Felicia preocupada-.

-Nuestro padre estubo en un manicomio, creé que su condición mental este bien?.
-También estoy preocupada-.

-Claro que esta bien solo necesita descanzo y todo el cariño que ustedes puedan brindarle. -Dijo despreocupado-.

-Eso esta muy bien. -Se paró y corrió a sentarse juntó a papa-.
Escuchaste papa, te pondras mejor si te esfuerzas y nosotros te ayudamos. -Dijo feliz abrazandolo-.

-Claro mi pequeña recuerda que soy un BellaNegra y puedo hacer lo que sea. -Dijo feliz devolviendole el abrazó-.

-BellaNegra?.

El doctor estaba mirandonos confundido y extrañado y luego al parecer recordó algo ya que nos miró sorprendido y su mirada fue dirijida a mi padre:

-León BellaNegra. -Al pronunciar su nombre todos quedamos en silenció y sin habla-.

Lo reconoció pero como es eso posible, talvez se habrán conocido hace mucho tiempo o escucho sobre el en algun lado.

-Como conoce a mi padre?.
-Pregunto Felicia extrañada-.

-Nunca lo había visto pero mi padre hablaba mucho de el al parecer eran buenos amigos.
-Dijo Tobias levantandose y guardando sus cosas-.

-Su padre era amigo del nuestro?. -Dijimos las dos al unísono-.

-Si aunque nose si el señor recuerda. -Sonrió y guardo sus cosas-.

-Tu sonrisa me recuerda a la de Tomasia, así que eres hijo de mi buen amigo Fabián Del Monte, hace mucho que no lo veo ¿como esta?. -Suspiro melancólico-.

-Bien señor BellaNegra con mucho trabajo en la hacienda, bueno me voy sus mercedes pero volveré para ver como esta todo.
-Finalizó-.

-Gracias por su visita espero que su padre pueda visitar al mío para revivir viejos tiempos.
-Dijo Felicia muy feliz-.

-Le prometo que lo hará cuándo pueda Señorita. -Dijo sonriente-.

Felicia apoyo su cabeza en el hombro de papa y yo solo nege con la cabeza, no tengo idea que esta pasando aquí y la verdad es que me no me dan ganas de saberlo.

Edmundo entró por la puerta sin avisar y me entregó una carta con unas invitaciones de parte de Laureana, ahora que me acuerdo estuvimos tan deprimidos y ocupados que se nos olvidó ir a su baile y creó que a ella se le olvidó organizarla, que cosas no?, bueno pero al parecer ahora si estamos obligados a ir y creó que si no vamos se va a enojar, no puedo creer que Yo La Viuda Negra valla a decir esto en un momento como este:

-Familia les tengo un avisó.

Los dos pusieron sus ojos en mi y dije:

-Nos han invitado la hija del Alcalde Laureana del castillo a un baile que se realizara en su casa en 3 días más y se que nadie aquí tiene ganas de salir pero tenemos que ir para que no se sienta mal.
-Finalize no muy entusiasmada por la idea-.

-Por mi esta bien así papa se divierte un rato aunque yo no recuerdo como se bailaba. -Dijo Felicia feliz aunque después se puso pensativa-.

-Tranquila Kassandra te puede enseñar pasos básicos de baile en 2 días. -Dije sin darle mucha importancia-.

-Kassandra?. -Dijo mi padre confundido-.

-Es nuestra empleada de mas confianza, ya te contare mi historia. -Le dije a mi padre-.

-Como digas. -Dijo mi padre sonriendo-.

El doctor se fue muy rápido y sin despedirse algo muy extraño ya que siempre se despide como todo un caballero, bueno talvez nunca lo sepa.

-Bien ahora debemos arreglar nuestros atuendos para esa noche y padre enserio quieres ir?.
-Dije arrodillandome frente a mi padre-.

-Claro hija ya perdí mucho tiempo de mi vida y quiero estar con ustedes los 9 años que no estube mis niñas. -Nos abrazó a las dos cariñosamente-.

-Nosotros también padre. -Dije sinceramente-.

-Bien ahora tenemos que prepararnos para esa fiesta.
-Dijo Felicia emocionada-.

-Es verdad además quiero tener un baile especial con mi linda pequeña. -Dijo mi padre viendo con ternura a mi hermana-. Y también con mi linda Viuda Negra. -Dijo ahora viendome a mi-.

-Yo también padre, sera un honor. -Dije feliz-.

Hay dios ayudame con ellos.

Buen día mis lectoras, espero que les guste mi novela y que la disfruten, estoy muy feliz de que a muchas les haya gustado el principio de la novela, la verdad es que estaba inspirada, bueno los vere en el próximo capítulo, Pasenlo bien y recuerden:

"Mi nombre es Bond, James Bond" y A Dios pongo por testigo de que jamás volveré a pasar hambre".

A ver si adivinan de que películas son estas frases,

Chao.
Por ahora.