La Viuda Negra

Una tarde interesante parte 2

Bueno pues María me anduvo contando sobre la tienda nueva que me había hablado pero también de otras tiendas muy interesantes, el cochero nos llevó a la tienda nueva que María le indicó, Se llama París y parece que mucha gente la visita, le pedí de favor a María que comprara la ropa por mí, ya que no quiero llamar mas la atención, Edmundo la acompañó ya que ella quería que alguien la ayudase a escoger, bajaron del carruaje y yo me quedé algo sola con mis pensamientos, estaba tan absorta en mis pensamientos cuando escucho que alguien tocaba mi puerta, abrí un poco la cortina dejando ver a Manuel que me dijo:

-Su merced la señorita Laureana del Castillo desea conversar con usted claro si vos quereís. -Dijo respetuosamente-.

-Esta bien déjala pasar. -Dije sin darle importancia-.

El asintió y abrió la puerta dejando pasar a Laureana que venia con un vestido blanco y su sombrero (Foto de arriba), si inclino como pudo y yo indiqué con mi mano que se sentará, estoy aburrida así que no tiene nada de malo conversar con la hija del alcalde, estuvimos en silenció un rato y luego ella habló:

-Perdoné que sea tan descortés en interrumpir su venida aquí pero quería platicar no se un rato con voz. -Dijo educadamente-.

-No te preocupes y sobre que querías hablar?.

-Bueno venía a contarle que la próxima semana el lunes para ser exactos sera mi cumpleaños y aquí esta mi invitación para ti y los tuyos, espero que no falten, porque me simpatizan. -Dijo sonriente y entregandome una invitación dorada-.

-No creo que pueda ir no soy de fiestas y esas cosas aun me extraña que le simpatize, claramente debería darle miedo. -Dije extrañada de su actitud hacía mi-.

-No me da miedo para nada además me encanta tu estilo y lo mejor es que no te da pena usarlo, y porfavor ven estoy segura de que te divertirás. -Dijo sonriendome demasiado, esta chica es muy rara-.

-Que mas da pero no prometo nada aunque si no voy te mandare un regalo. -Dije fríamente aunque no me salió muy bien-.

-Te estare esperando entonces, por cierto como se llama el chico ese que vigila la puerta parece que te protege mucho.

-Te refieres a Manuel si a el le gusta protegerme.

-Es que no esta mal y como se llama?. -Dijo algo nerviosa, tenía las mejillas algo sonrojadas, hay Manuel creó que le gustaste-.

-Se llama Manuel hijo de Yamir  y Fedora, el no sabe cuál era el apellido de su madre, aunque no le interesa mucho. -Dije mirandolo a través de mis cortinas-.

-Es una pena, bueno debo irme ya que sino llego antes de que caiga el sol padre se enojara conmigo si no voy. -Dijo parandose-.

-Te acercamos un poco?.

-No gracias tengo un carruaje que me llevara.

-Esta bien, buena suerte. -Dije parandome e inclinandome hacia ella-.

-Gracias. -Dijo inclinandose también-.

Estaba por bajar del carruaje cuándo se escucharon los ruidos de caballos que galopaban haciendo temblar el piso, en mi carruaje se escuchaba el galope, Laureana se quedó quieta y yo también, luego de eso escuchamos un alboroto de afuera, gritos de gente y disparos, Manuel abrió la puerta del carruaje y sacó a Laureana y luego me saco a mi, nos llevó hacía la tienda y nos quedamos parados alli enfrente, luego observe lo que pasaba, al parecer Los Implacables estaban huyendo a todo galope de los oficiales que los seguían disparandoles si podían, pasaron frente nuestra como almas que se las lleva el diablo, Manuel nos sostenía de la cintura para protegernos, aunque a mi me tenía sujeta del hombro a Laureana la tenía de la cintura, el último forajido que paso con otro mas llamo mi atención a pesar de que iba muy rápido vi sus ojos fijamente eran muy azules como el agua, este me devolvió la mirada pero fue por muy poco rato, ya que inmediatamente volvió su vista hacía el camino y corrió a todo galope hacía el bosque o la salida de Santa Julia no lo se, todo el mundo se calmo después de eso, Laureana me movió la mano en la cara haciéndome reaccionar:

-Que pasa?. -Dije mirandola mientras bajaba la mano-.

-Nada es que se quedo como una estatua en otro mundo. -Dijo excusandose-.

-Verdad, Manuel ya esta todo bien ¿nos puedes soltar?. -Dije mirando su mano en mi hombro.

-Así como lo siento. -Nos solto y pude ver que Laureana estaba avergonzada-.

-No es nada. -Dijo Laureana algo nerviosa-.

Fue en ese momento cuándo María y Edmundo salieron de la tienda con muchas cajas que por supuesto Edmundo cargaba sin problema aunque María llevaba 2 bolsas en sus dos manos, se acercaron hacía nosotros, Maria estaba muy feliz como si no se hubiera enterado de nada y se puso frente mío mostrándome lo que compro:

-Mira Viuda Negra compramos Muchas cosas para Felicia, estoy segura de que le encantara todo, por cierto de que me perdí?. -Dijo con cara de "Yo estaba en otro mundo así que no me entere de nada-.

-Nada importante, trajiste los velos blancos?. -Dije mirandola seriamente-.

-Bueno creó que de eso se acordó Edmundo, yo me acordé de lo demás. -Dijo inocentemente-.

-Bueno yo voy a casa fue un gusto verlos hoy. -Dijo Laureana inclinandose-.

-Igualmente. -hablamos todos a la vez que nos inclinabamos-.

Laureana se fue en un carruaje Blanco que llego a recogerla, yo solo susurre "Que chica mas rara" y bueno subí al carruaje, Manuel ayudo a Edmundo con las cajas y María se sento al lado mío para enseñarme todo, llegamos a casa y comenzo a llover, mire al cielo y supe que nada bueno iba a pasar, entre a casa con los demás detrás mio y las sirvientas se encargaron de subir las cajas y ordenar la ropa en el armario, fui con María al salon y pedí una taza de té para las dos y algunas galletitas, cuando nos sirvieron todo, invite a María a sentarse y yo hice lo mismo, Edmundo estaba en su recamara comenzando con su investigación y Manuel hacía su trabajó, y así comenzamos a conversar con María sobre cosas triviales y otras de importancia.

Narrador omnisciente
Las sirvientas entraron a la habitación de Felicia y fueron directamente al armario y ordenaron todo, Kassandra seguía con Felicia que ahora se puso a cantar una canción que su hermana le cantaba de pequeña:

Eres todo ahora en mi vida significas tanto en miii
Tanto amor que tienes solo
Para mi,

Kassandra le siguió ya que se sabía la letra:

No hay temores
Ya en mi vida
Cuanta luz yo tengo en tii,
Antes me sentía sola ahora
Te tengo junto a mi,

Felicia continuo muy sonriente:

Estare contigo
Siempre
Eres mi unica razón
Y aunque el tiempo
Nos separe tienes tu
Mi corazón,

Las dos empezaron a cantar juntas y era extraño ya que sincronizaban bien:

Eres tu mi
Gran amor
Tienes tu mi corazón
Duerme ya que estoy aquí
Cuidando yo de ti
Y ya eres parte de
Mi ser nunca yo
Te dejare
Duerme ya que estoy aquí
Cuidandote a ti!!!.

Felicia seguía cantando mientras que Kassandra cantaba también:

No hay temores ya en
Mi vida cuanta luz yo tengo
En ti antes me
Sentía sola
Ahora
Te tengo junto a mi estare contigo
Siempre
Eres mi única razón
Duerme ya
Que siempre estare cuidandote
A ti!!!

Terminaron juntas como si fueran madre a hija cantando, Felicia tenía la voz de una niña pero igual era muy hermosa su voz, Kassandra se quedo sorprendida y muy sonriente, cantaba tan bien y las dos lo hacían mejor.

Paula y María escucharon la canción completa, Paula no podía creer que su hermana se acordara de esa canción, se la cantaba cuando pequeña para recordarle que su madre en donde quiera que este siempre estaría protegiendolas, La viuda Negra se sentía en paz por primera vez y María la miro sonriente, Felicia podía ablandar hasta el corazón mas frío del mundo por un momento.

Gracias por sus votos y comentarios es primera vez que una novela le gusta a tanta gente bueno la cantidad que tengo me emociona a seguir escribiendo, gracias les prometo que se pondrá mas interesante la novela aún falta un montón, no olviden dejarme sus comentarios a ver que opinan.