La Viuda Negra

El secreto olvidado de León

Narrador Omnisciente
León BellaNegra iba caminando por los pasillos de la mansión pensado en todo lo que esta ocurriendo a su alrededor y se sentía inútil ya que no podía hacer nada después de todo era tuerto y recién empezaba a recuperar la cordura que había perdido en ese manicomio, en su camino por los pasillos algo le detuvo más bien un sollozo que provenía de alguna habitación de por aquí, siguió el ruido hasta que encontró la puerta de donde provenía ese llanto y rápidamente la abrió encontrándose adentro con Kassandra que lloraba desconsoladamente en el suelo apoyada contra su armario de madera.

Sostenía un papel entre sus manos que aferraba a su pecho como si su vida dependiese de ello, León se acerco cauteloso hasta estar frente a ella, se arrodillo para quedar a su altura y le dijo dulcemente:

-Que pasa señorita? Le ocurrió algo?. -Lo pregunto en tono preocupado-.

Kassandra levantó la vista y le miro fijamente a los ojos, a León le parecieron familiares esos ojos que ella tenía como si los hubiera visto en alguna parte pero hace mucho tiempo:

-No mi señor solo que recordé unos errores del pasado que marcaron mi vida.
-Le contestó Kassandra melancólica-.

-Errores?. -Pregunto León confundido-.

-Si como el que cometí hace 23 años que fue el haberme entregado a usted, solo era una mocosa de 15 años que no quería perder la virginidad con ese ser tan despreciable, nunca debí dejarme llevar por el deseo, nunca debí. -Kassandra comenzó a llorar más fuerte-.

-No entiendo, que esta queriendo decir con eso?. -León ahora estaba claramente peor que confundido-.

-Se que usted no debe recordarlo pero yo si lo recuerdo, aun tengo en mi memoria a mi padre quitándome a lo único de lo que no me arrepiento el haber tenido.

León estaba teniendo un dolor de cabeza por el enredo que se estaba formando en su mente, luego obligándose a si mismo logro recordar de lo que hablaba Kassandra, ahora León estaba recordando su más grande secreto que olvidó el día en que Carmela comenzó a torturarlo, el origen y nacimiento de su hija Felicia.

23 años atrás
A los 15 años cumplidos de Kassandra su padre Felipe Suarez la a comprometido con el señor Lucio Valenzuela en contra de su voluntad, Kassandra siempre a amado la vida y no quería casarse con ese ser tan despreciable que para su padre era un santo pero todo el pueblo sabía que la riqueza de ese tipo la producía su sucio y cruel trabajo que no ocultaba a nadie, el transporte de esclavos de todos los países por donde pasaba en su barco, el robo y lo peor era que era un asesino frío a sueldo que nada le importaba.

Una noche Kassandra daba un paseo por el bosque de las tierras de su padre pensando en la vida que le tocara vivir si llega a convertirse en la señora de Valenzuela, era un destino muy cruel para ella y más si tenía que darle su virginidad, ella no quería eso, siempre soñó con casarse con el hombre de su vida y entregarse a el por amor y no por obligación, pero Kassandra no tenía derecho a negarse después de todo su padre era el que decidía con quién casarla y el la iba a entregar a alguien que le convenciese y Lucio era rico y muy poderoso así que era el esposo perfecto para ella según su padre.

Kassandra iba caminando tranquilamente cuando encontró la cascada en donde siempre olvidaba sus penas al introducirse en esas aguas cristalinas, el lugar estaba bien escondido así que nadie la vería por allí, se despojó de todas sus ropas y las dejo en el pasto, camino como dios la mando al mundo y saltó al agua hundiéndose completamente, Kassandra quería olvidar por un momento su miserable vida y este era el mejor lugar.

León BellaNegra en esos tiempos estaba sufriendo mucho por su mujer ya que ella era infeliz sin su hijo desaparecido Javier, la pequeña Paula fue como una bendición cuándo nació pero no podía lograr curar el corazón roto de su madre, León quería hacer algo, encontrar a Javier era la única solución pero nadie sabía quién lo habían secuestrado, no había ninguna pista y hasta tal vez hasta estuviera muerto pero León tenía la esperanza de que su hijo estaba vivo en algún lado pero vivo al fin y al cabo, y lo que no podía soportar era el despreció que ahora sentía Verónica por el, el amor que existía en ellos se a ido acabando desde esa desgracia y ya nada podrá curar eso.