Who...? // Yoonmin;

Impotente

Estaba escondido en un armario de limpieza intentando controlar el dolor. Ya tenía rato que las lágrimas dejaron de caer pues sentía que ya no podía llorar más, como si hubiera llorado de una sola vez lo de toda una vida, simplemente ya no podía llorar más. Eso no significaba que no doliera más, porque dolía y mucho. Sentía que estaba muriendo, como si todo fuera perdiendo sentido poco a poco y se desvaneciera en el aire dejándolo vacío.

Respiro con dificultad, le dolía el cuerpo y la cabeza y se sentía mareado, pero aun así se obligó a levantarse. Tambaleo un poco pero no se detuvo ya era hora de irse, tenía que seguir, no podía quedarse ahí hecho bolita llorando como mártir, o así lo veía él. Por eso quizá fue que eligió hacerlo en la empresa y no en casa. Necesitaba una razón para moverse y seguir, si hubiera sido en casa seguramente habría llorado tendido en su cama y no habría querido salir de ahí nunca más, se conocía muy bien por eso no lo hizo en casa donde podría haber sufrido más tranquilo, no, lo hizo en la empresa para no hundirse en un abismo.

No es como que hubiera planeado ser rechazado, pero era una posibilidad y como lo sabía hizo su plan. Aun así en ningún momento creyó ser rechazado o aceptado, ahora se preguntaba qué era lo que esperaba realmente, que había pensado que pasaría, se rio un poco.

Aun cuando había hecho un plan se dio cuenta que no estaba realmente preparado, solo había saltado al vacío con los ojos cerrados esperando volar, pero solo choco contra el frio y duro piso. Era tan triste y patético lo que había hecho y había arriesgado todo por eso. Ahora tenía miedo.

¿Qué haría Jungkook ahora? No, la pregunta era ¿Qué haría él ahora?

Se reunió con su compañero, no sin antes pasar por un baño y borrar todo rastro del llanto. Tenía suerte sus ojos no estaban tan hinchados y rojos como creyó y ese día no los habían maquillado por lo que podría ocultarlo fácilmente. Lo que no podría ocultar era la expresión en su rostro y el brillo ausente en sus ojos. Se veía tan... sombrío, que por un momento no se reconoció a sí mismo.

Una vez con sus amigos vio como Jungkook desviaba la mirada al verlo, fue como un golpe en el rostro. Pero aun así fingió estar normal. Converso, rio, jugó y actuó como si nada hubiera sucedido. Como si no hubiera pasado más de 30 minutos llorando escondido en un armario. Se sorprendió a si mismo por poder hacer aquello y frente a Jungkook, no sabía que tan buen actor podía llegar a ser.

Regresaron a su casa para dormir, aunque solo seria 5 horas de descanso pues al día siguiente tenían una grabación para un show donde presentarían su nueva canción "I need you". Entro a su cuarto que compartía con su hyung Min Yoongi se subió a la litera de arriba y se desplomo en ella. No tenía fuerzas para nada mas estaba exhausto, física y emocionalmente, pero sobretodo la segunda.

No tardo en oír la puerta abrirse y como entraba su compañero de habitación.

-Jimin, si te vas a dormir por lo menos quítate esa ropa o mínimo tiéndete bien en la cama y no dejes colgando tus piernas en el aire.- Su voz era serena, no estaba realmente molesto, más bien casi indiferente.

-Si hyung.- su voz casi era un susurro y se escuchaba ronca, lo que llamo la atención del mayor. Jimin era un chico energético y alegre pero parecía decaído.

-¿Está todo bien Jiminie?- dijo preocupado, algo le decía que no lo estaba, pero no sabría decir porque, o como lo sabía.

-Si hyung.- aunque había dicho eso, Yoongi no le creyó, sobre todo porque el menor no se había movido ni un centímetro de donde estaba con la cara escondida en su almohada y su voz casi se quebraba en llanto.

-Jimin...- no supo que decir, como animar al chico si ni siquiera sabía que le pasaba. Arg!!! Era tan complicado preocuparse por las personas. Pero era su superior, no podía solo ignorarlo y ya. Aunque eso fuera lo único que quería hacer.

El menor se bajó de la cama y se fue a cambiar ignorando el llamado de su compañero, pero sentía que si lo volvía a llamar con ese tono de voz, lo único que lograría es que se pusiera a llorar de nuevo. Lo mejor era alejarse. Tomo su ropa y al final decidió darse un baño y eso hizo.

Cuando volvió a su cuarto, Yoongi ya estaba acostado durmiendo plácidamente. Jimin sonrió un poco, después de todo Yoongi era así, pero le daba gracia la facilidad con la que se dormía.

Subió a su cama, un poco solo un poco más animado distrayendo su mente con la imagen de Yoongi durmiendo. Pero todo fue inútil una vez su cabeza toco la almohada. Por más que intentaba pararlo, no podía dejar de repasar todos y cada uno de los recuerdos de ese día. Recordaba y repetía una y otra vez las palabras de Jungkook, una y otra vez podía ver en su mente la imagen que se había grabado en él de cómo lo miraba el menor. Sintió arder su estómago y sus entrañas. Nuevas lágrimas brotaron de sus ojos, eran silenciosas pero quemaban su rostro y sus mejillas. Creía que no podría llorar más pero se había equivocado.

Comenzó a sollozar quedamente y su cuerpo temblaba débil e indefenso. Se sentía tan mal y más aún porque no podía controlarse. Se creía más fuerte que eso, pero se dio cuenta que no lo era. No era más maduro o fuerte. Solo era un chico con el corazón roto.

-Jimin...- escucho la voz de su hyung y se tensó dejando de respirar.- ¿Estas llorando...Jimin?- Dicho eso el menor no pudo más y lloro con más fuerza. Intentaba controlarse pero simplemente no podía.

El mayor se levantó y se asomó a la cama de arriba. Se quedó quieto, sobrecogido y abrumado de ver aquello. Aun cuando le daba la espalda el menor estaba temblando y podía ver como este se abrazaba a si mismo intentando mantenerse unido pero los sollozos no paraban.

No supo que hacer, jamás había visto al menor de esa manera y le dolía. Acerco su mano a Jimin pero se detuvo justo antes de tocarlo. ¿Qué planeaba hacer? ¿Qué podía decir? ¿Por qué todo era tan complicado? ¿Qué lastimaba a Jimin?

Estaba confuso y no sabía qué hacer para calmar al menor, jamás se había visto en una situación así, lo odiaba, siempre lo hizo, odiaba lo complicado que podía ser estar relacionado a otros, odiaba lo complicado de los sentimientos. Él era frio y calculador, o así se consideraba, por eso mismo se mantenía alejado de los demás, si eran amigos pero no más allá de eso. No quería tener que verse en medio de situaciones así. Pero...

No podía dejar al chico así como estaba. Quiso suspirar, pero el aire no salía. Se subió a la cama del menor y se recostó a su lado, rodeándolo con sus brazos. No sabía que decir y probablemente si decía algo solo lo empeoraría, así que decido dejar al chico llorar.

Jimin sintió el calor de los brazos de Yoongi y una pequeña y delicada presión alrededor de su cuerpo. Se sorprendió de ver que el más amargado del grupo estuviera abrazándolo. Y después de eso lloro con más fuerza y confianza. No estaba solo. Aunque Yoongi no supiera que le pasaba, estaba ahí para él. "Puedes llorar..." se dijo a sí mismo. Y así lo hizo.

Yoongi no supo cuando fue que Jimin dejo de llorar y se quedó dormido en sus brazos. Se quedó quieto escuchando el tranquilo respirar del menor. Sintió en su pecho como la espalda de Jimin se movía con cada respiración. Había sido difícil, escucharlo llorar y no poder hacer nada más que abrazarlo. Estaba cansado y el sueño se coló demasiado rápido tras sus parpados. Debía bajar a su cama, pero no quería dejar al muchacho solo, y por alguna razón se sentía cómodo con el menor entre sus brazos, como si encajara a la perfección.

El aroma de Jimin, su calor y el sonido de su respiración terminaron por embriagar a Yoongi hasta quedar dormido casi al instante.