A Little More Deep (Completa)

Capítulo 6

6.Nunca quise ser así

Estoy en el sofá de la sala mirando a la nada, y aunque el volumen de la tele está lo suficientemente alto y la película que puse está en su máxima tensión, la conversación o más bien el escándalo que hace mi hermano mientras habla por teléfono con Jane, no me deja oír absolutamente nada.

Ya pasaron dos semanas desde la fiesta, y están tan raros que ya no los entiendo. La semana pasada estaban bien y parecía que era el comienzo de algo lindo, después de unos días prácticamente ya no se hablaban y un par de días después otra vez los veías de la mano. Hace rato que les deje de seguir la corriente.

— Bueno Jane, pero eso no fue mi culpa — Se lo escucha bastante enojado—. Si hubiera sido un secreto ¿no crees que lo hubiera ocultado? ..., ¡Pero si no es nada Jane! — Grita sobrepasado y enseguida su cara cambia de enojo a arrepentimiento.

Tira el celular al sillón y suspira muy fuerte. Esa es la señal de que necesita hablar así que le saco el volumen a la película y centro toda la atención en el.

— ¿Qué pasa ahora?

— No sé, ella cree que estoy con alguien — Se tapa la cara y habla con tono de resignación.

— ¿Por qué cree eso?

— Había una foto con Ana en mi celular — Ruedo los ojos ante su confesión, mi hermano puede ser un poco tonto —. No lo hice para recordar nada, solo olvidé que estaba ahí.

Ana fue su novia durante algunos meses cuando estábamos en Londres, cuando tuve mi accidente Alex se enteró que ella estuvo involucrada y se separaron. Fue horrible porque me sentí culpable por un tiempo, pero el me dejó en claro que no debía hacerlo.

— ¿No podías explicarle eso y ya está todo olvidado?

— Es que no se — Se pasa las manos acomodando el pequeño jopo de su cabello con irritación —, es tan complicado. Las chicas son complicadas.

— No somos complicadas, somos iguales a ustedes con sus vueltas para todo — Pongo los ojos en blanco.

— ¿Y ahora qué hago? — Frunce los labios como un niño haciendo pucheros.

— No sé qué haces aquí parado, tendrías que estar en la puerta de su casa pidiendo perdón.

— ¿Perdón? ¿Por qué?

— Por tratarla así, aclara lo de la foto y hablen tranquilos, sin gritar. No puedo creer lo poco que sabes — Golpeo su hombro.

— Nunca estuve así de perdido con una chica.

— Hombres — Suspiro mientras niego con la cabeza por su torpeza, a lo que él se queda mirando — ¿Qué miras? vamos galán

Lo empujo un poco para que se levante, el asiente, toma su chaqueta y unos segundos después escucho el sonido del motor encendiéndose. Me recuesto otra vez en el sofá, tomo el control, vuelvo a subir el volumen a la película y al fin puedo verla tranquila. Hasta que un llamado interrumpe el único momento de paz que tuve en todo el día.

El nombre de Jack aparece en la pantalla de mi celular. Desde la detención que hablamos más, solemos comer juntos entre conversaciones vagas acerca de exámenes y explicaciones sobre cómo funcionan algunas cosas en el pueblo, colabora con el trabajo de historia en cada detalle, y hasta me ofreció ayuda para el examen de matemáticas de la semana que viene; la cual acepté dejando en claro por milésima vez que solo seremos amigos, ya que la última vez que fui a su casa para seguir con el trabajo, sus besos repentinos no nos dejaron escribir más de dos páginas.