A Little More Deep (Completa)

Epílogo

En el camino a casa no aparta su mano de la mía ni un segundo, sé que mis nervios se pueden notar a kilómetros y el intenta relajarme. Me refugio dentro de su saco que me queda bastante grande, y tuve que doblar las mangas para adaptarlas a mis brazos.

— No sé qué hacer con el auto, sigue en casa y mis padres no me van a dejar llevármelo — Su pierna derecha está en constante movimiento y sé que él está igual o peor que yo.

— Puedes usar el mío.

— ¿Tienes auto? — Me mira fugazmente con sorpresa, y vuelve su vista a la calle.

— Si..., está guardado desde que llegamos, mi padre lo mandó a arreglar luego del accidente. Parece que no quedó tan mal.

Aparca delante de mi casa y corremos al interior a buscar las llaves.

— Bien, tu espérame aquí, te mantendré informada — Me pide.

Vamos al garaje que por poco está vacío, solo está mi auto.

— ¿Un Jaguar XF? ¿Quién te compró esto? — Pasa su mano por la pintura negra de las puertas de este.

— Mi padre, apenas pude comenzar a conducir insistí en que me lo comprara.

— Vaya... esto será interesante — Entra del lado del conductor.

Enciende el motor, el cual ruge como solía hacerlo. Una sonrisa altanera se me escapa, era genial conducir esto.

— Voy contigo — Digo con decisión.

Subo del lado del acompañante sin pensarlo, pero el me niega enseguida.

— Ni en broma Ash, no iras conmigo.

— Tienes solo diez minutos para comenzar, si das muchas vueltas llegaras tarde, deja de discutir y arranca.

— No haré esto Ashley, baja del auto.

— No me quedaré como idiota a esperar que llegues. Vamos juntos o nada.

Se que intenta protegerme, pero prefiero estar a su lado y no sin hacer nada sentada en el sofá.

— ¿Estás segura que aguantaras la velocidad?

— Intenta no estrellarlo y estamos bien. Quiero venderlo cuando esto termine.

El asiente con un poco más de seguridad y hace que el auto avance. Al principio respeta las señales y la velocidad establecida, pero cuando comenzamos a alejarnos de las casas y nos acercamos a la parte un poco más desértica, la velocidad aumenta haciendo que los arboles que pasamos sean solo sombras borrosas.

Estaciona el auto en el punto de partida, aun faltan unos minutos para largar, pero el no quiere que ninguno de nosotros bajemos, no estamos vestidos adecuadamente.

El golpeteo en la ventana nos hace girarnos, el la abre apretando los botones y el rostro de un tipo bastante mayor aparece. Su sonrisa siniestra y un poco amarillenta es lo que más me asusta, tiene la piel tapada de tatuajes hasta su cuello y algunos en la cara, puedo notar su edad porque no tiene ni un solo pelo en la cabeza. Algunas arrugas y ojeras adornan sus inquietantes ojos que están entrecerrados en dirección a Jack.

— Así que es verdad, esta será tu última vuelta — Su voz es espeluznante, al punto que mis vellos se erizan a toda velocidad.

— Lo será R — Jack parece no inmutarse por la persona que tiene en frente y habla con un tono de voz mucho más grave de lo normal —. Ganaré y me iré, tal como dijiste.