VII

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Mis manos se encontraban sudorosas, sentía mi cuerpo entumecerse por las posición en la que me encontraba. Y él, solo se quedaba allí observandome, miraba cada movimiento que hacía, eso me ponía nerviosa, no se que espera que haga.

Quería hablar en este momento, esta situación era algo "incómoda", pero no me atrevía, además, mi voz se había ido, tenía un nudo en la garganta que apenas me dejaba respirar.

Tome un poco de aire, cerré los ojos por un momento y me relaje, debía estar tranquila.

-¿Donde me encuentro? -pregunté mirando al hombre con la máscara de metal.

-Ahora mismo estas en una nave bajo el mando de la Primera Orden -respondió, aún sin dejar de observarme tras esa máscara.

¿Primera orden?, ¿que se supuse que...

-¿Quién más aparte de ti posee la fuerza? -preguntó él, interrumpiendo mis pensamientos.

-No se de que me hablas- repondí confundida.

-Tratar de engañarme será en vano, la he sentido en ti.

- En serio, te juro que no se de que me hablas -insistí, no sabía a que se refería, conocía varios términos de la fuerza, pero no entendía a cual de tantos se refería y meno eso de que yo la poseo.

Por un momento no hubo respuesta de su parte, aunque sabía que esto no acabaría aquí, se encontraba tenso, eso me alertó.

- !Mientes! -gritó enfurecido -¿¡Quién más tiene la fuerza?!

- Y-yo... - su gritó me sobresalto, no sabía que decir en éste momento, sólo observaba como mi silencio lo impacientaba cada vez más.

Mis ojos se abrieron como platos al darme cuenta que él se dirigía hacía mí. Esto no era bueno...

- !En s-serio no se de q-que me hablas!... -dije casi suplicante, en serio no entendía a lo que se refería con eso de la "fuerza",pero él no lo entendía.

- !Aagh¡ -grite de dolor cuando sentí como mi cabello era jalado hacía atrás haciendo que me diera un fuerte golpe en la cabeza.

- !Por favor!, en s-serio no se nada...

Aumento la fuerza de su agarré obligándome a traer mi cabeza en su dirección.

Gemi de dolor, mi cabeza ardía y mi cuerpo estaba entumecido.

Intenté apartarme cuando vi como colocaba una de sus manos al lado de mi mejilla, casi rozandola, lo cual hizo que su agarré se intensificará, si seguía así arrancaría mi cabello, pero eso era lo que menos le importaba.

De repente una fuerte presión se instaló en mi cabeza, esta cada vez se hacía más fuerte. El dolor aumentaba con cada segundo.

- !Para por favor! -solloze de dolor, las primeras lagrimas comenzaban a formarse, el dolor que sentía era indescriptible.

Él no paraba, no le importaban mis súplicas.

- !En serio te lo juró, por favor! -grite por última vez antes de caer desmayada.

...

Comencé a despertar,mis cabeza dolía como a mil demonios, intente llevarme una mano a mi cabeza pero aún me encontraba sujeta.

De pronto sentí como aquella presión en mis brazos y piernas desaparecía. Caí al suelo, aún tenía mi cuerpo entumecido y adolorido, así que no pude hacer nada para evitar la caída.

Levante mi rostro y él aun se encontraba ahí.

Rapidamente me coloque de pie, alcé mi cabeza encontrándome con lo que se podría decir su mirada, si no trajera ese casco puesto.

STAR WARS: Luz Y OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora