Intento de Chico Popular

Capitulo 39

CAPITULO 39

ALEX POV

-Podrías haberme esperado- digo besando su hombro. Esther me sonríe y besa mis labios- ¿Puedo ducharme?- pregunto levántandome. Estaba desnudo pero eso no me importaba, ella conocía mi cuerpo tanto o más que yo.

-Sí, ve- dice, vuelvo a la cama y beso sus labios una vez más y me dirijo al baño.

Me ducho lo más rápido posible porque quería estar más tiempo con Esther. Enrollo una toalla en mi cintura y salgo.

Esther seguía en la cama pero esta vez estaba con un portátil encima. Me apoyo en el almohada y ella me observa de arriba a abajo.

-Puedes quedarte así, por mí no hay ningún problema- río y beso su frente.

-Yo tampoco tengo problema pero enfermaré si sigo así- ríe y se levanta.

-Tuviste suerte que cuando te dejé no hice la famosa escenita de tirar todas tus cosas a la basura o hacer un fuego con ellas- río y me levanto. Veo que se agacha para abrir uno de los cajones de su armario. Me entrega una camiseta verde y unos pantalones. También me entrega unos bóxer.

-Menos mal que no- susurro y antes de cambiarme ella enrolla mi cuello con sus brazos. Reposo mis manos en su cintura.

-Podrás aguantar unos minutos más- afirma y asiento. Devoro su boca mientras ella se cuelga de mi cintura. La llevo a la cama mientras observo como quita su camiseta.

-¿Esther, estás despierta?- escuchamos a través de la puerta. Esther instantáneamente tapa mi boca. Escuchamos pasos, creo que era Mel. Esther quita su mano de mi boca y yo me levanto.

-¿Por qué no se lo decimos?- pregunto vistiéndome.

-Cuanta menos gente sepa lo que pasa mejor- dice y asiento. Tiene toda la razón.

-¿Pero entonces que somos?- pregunto ya vestido.

-Siempre fuiste mío- dice en un susurro, arqueo las cejas- y sé no va a cambiar.

-Que posesiva...- sonrío y se acerca a mí. La tomo de la cintura y nuestro alientos se mezclan- quiero que volvamos a ser novios- susurro y me mira con emoción.

-Yo también lo quiero- la vuelvo a besar pero mi móvil empieza a sonar. Lo cojo lo antes posible para no hacer ruido.

-¿Qué quieres?- sueno borde porque se trataba de Harry.

-Escúchame- dice en tono preocupado, me separo de Esther y espero a que siga- saben que tú has estado preguntando.

-¿Lo saben?- pregunto anonadado, miro a Esther- ¿qué pasará si me encuentran?

-Deberías desaparecer, al menos quédate en tu piso, no te muevas en unos días. Que no te vea nadie, no te juntes con nadie- dice.

-Está bien- trago duro y el miedo invade mi cuerpo.

-Buscaré una solución- dice y lleno de ira le contesto.

-Por tu culpa estoy así- cuelgo.

Esther me mira preocupada.

-¿Qué ha pasado?- me pregunta.

-Es mejor que no lo sepas- la abrazo- ¿cuando podré verte?

-Esta noche tengo que ir con Jase a una fiesta- frunzo el ceño- tranquilo, todo ha cambiado.

-Lo sé, ¿dónde es?