Pequeñas Black y la Cámara de los Secretos [II] [Harry Potter] (TERMINADA)

1. "Los Dursley y los Weasley"

Las niñas, los primeros días luego de regresar de Hogwarts, estaban algo deprimidas: extrañaban a sus amigos.

-Ya me dijeron que están deprimidas porque no ven a sus amigos. Pero ya me dijeron que uno de sus amigos vive a dos calles de aquí... ¿Por qué no le envían un corr... una lechuza para encontrarse? ¿No les dijo su dirección? ¡Podrían ir a visitarlo! -dijo Demetria, cansada del comportamiento de sus hijas adoptivas.

-Ya, mamá, pero le hemos enviado muchas cartas con Emily y no responde. Y él dijo que su familia no toleraría que le visitemos: lo detestan, y detestan todo lo que tenga que ver con el mundo mágico -explicó Maddie.

-Creo que sus padres deben tener un serio problema de ira.

-No son sus padres, son sus tíos -dijo Maddie.

-Sus padres murieron cuando Vol... -comenzó Noa pero Maddie le dirigió una mirada asesina -...vían, cuando volvían del trabajo para buscarlo a él en la guardería y tuvieron un accidente automovilístico. Fue muy trágico.

-Sí que lo debe de haber sido, Pauline.

-¿Mamá? En Hogwarts comenzaron a llamarme por mi segundo nombre: Noa. ¿Podrías llamarme así? Es la costumbre. Y suena mejor -dijo Noa.

Demetria suspiró.

-Como tu digas, Noa.

-¿Podemos ir al parque, mamá?

-¿Maddie, acaso estás pidiéndome ir al parque? ¡Pensé que aquí sólo te gustaba ver a tu vecina!

-Oh, sí que te lo estoy pidiendo. La vecina es muy agradable, te lo aseguro. Pero quiero ir al parque.

-Pero a ti sólo te gustaba ir al bosque a encontrar animales o encontrarte con tu vecina o con tus amigos del colegio. ¡Paulin... Noa siempre fue la que prefería ir sola al parque o ir a la casa de la abuela o encontrarse con sus primos! ¿Qué pasó contigo?

-El año me ha cambiado, mamá. Lo ha hecho.

Caminaron al parque, y se encontraron con el niño de la cicatriz de rayo y los anteojos redondos, ahora arreglados. Él las vio y les dirigió una sonrisa.

-¡Harry!

-¡Noa! ¡Maddie!

Se dieron un abrazo entre los tres.

-¡Cuéntanos! ¿Cómo va tu familia, Harry?

-Horrible. Mi tío ha guardado todas mis cosas en el armario. No me las devolverá hasta que haya que volver a Hogwarts. Mientras tanto estoy asustando mucho a mi primo. Le digo palabras sin sentido y sale corriendo. ¿Y ustedes?

-Nada especial -dijo Noa.

-Enseñándole a nuestra madre adoptiva sobre el "No me digas Pauline, dime Noa" y el "extraño a mis amigos" y ella frustrándose. Nada especial -explicó Maddie.

-¿Irás con los Weasley, Harry?

-Lo intentaré. No soporto a mi familia muggle. Les cuesta aceptar que soy un mago, pero que sigo siendo humano. Me esconden. Es horrible.

Durante las dos primeras semanas de verano, se encontraron con Harry en el parque, pero en la tercera semana, no volvió a aparecer.

El día del cumpleaños de Harry, ellas estaban decepcionadas de no haberlo encontrado.

-Hijas, vengan por favor.

-¿Qué pasa, Albert? -preguntó Maddie.

-Dime papá, suena mejor.

-Lo siento, papá Albert.

Albert suspiró y las niñas rieron.

-Hoy tengo una cena importante. Voy a necesitar que vayan. Es por aquí cerca. Con un hombre de negocios y su familia. Me ha invitado a cenar. Creo que quiere cerrar un trato.