Loving You | Nick Jonas

OO2

                  

—Tranquila Izzy, tranquila, no quieres que Nick piense que estás loca... bueno lo estás, pero no quieres que él lo sepa aún —hablo conmigo misma mientras camino de un lado a otro debajo del árbol de cerezas.

Golpeo mi celular nuevo contra la palma de mi mano, buscando calmarme, pero no parece funcionar, los nervios me están matando. No debí llegar antes de la hora acordada.

— ¿Izzy? —Me detengo, es su voz, lo sé. La he escuchado infinitas veces durante los últimos ocho meses. Inhalo y exhalo mientras me giro hacia él.

Se ve mucho más guapo en persona que a través de una pantalla, además de un poco más alto. Qué bueno que no me puse tacones. Sonrío al darme cuenta que él también lo hace y que además se está acercando a mí. Guardo mi teléfono en el bolsillo de mi abrigo.

—Nick, hola —Quiero pellizcarme, para probar que no es un sueño y por lo horrenda que ha sonado mi voz, pero no lo hago.
—Hola Izzy —Sin más me abraza. Me dejo envolver por sus brazos e inhalo su dulce aroma, no sabía que una persona pudiera oler tan bien. Tampoco sabía que un abrazo me haría sentir tan segura y feliz. Presiono mis manos sobre su espalda, arrugando un poco su abrigo, no queriendo dejarle ir nunca. Él parece tener la misma idea pues siento como sus manos hacen presión en mi espalda—. He soñado con este día infinitas veces, incluso despierto —confiesa, no puedo evitar sonreír.
—Imagínate yo —Mi voz suena amortiguada y temblorosa—. Solo que antes me imaginaba llorando.

Él ríe y entonces se aleja un poco de mí. —Que bien no estás llorando entonces, no sé qué hacer cuando las personas lloran.

—Ni yo, así que tampoco tú vayas a llorar —le advierto, haciéndolo reír.
—Lo prometo —dice, levantando su dedo meñique derecho, levanto el mío y lo enredo al suyo—. ¿Quieres que vayamos por un café? No sabía que iba a estar tan frío cuando te cité aquí.
—No, estoy bien —Sonrío—. A no ser que tú quieras uno, entonces podemos ir.
—No, estoy bien —repite mis palabras—. ¿Caminamos? —Asiento y bajamos del área verde, que por ser otoño ahora estaba seco y repleto de hojas marrones, amarillas, rojas y naranjas.

Caminamos siguiendo el camino pavimentado. Nick va contándome sobre su gira actual, de la cual se ha tomado un descanso para venir a Dallas y conocerme. Mi corazón se agita de solo recordarlo dándome la noticia hace unas semanas.

—Entonces Tori es buena onda —Me aseguro de poner atención a sus palabras. Nick asiente.
—Si, además es una gran cantante ¿has escuchado alguna de sus canciones?
—Estaría mintiendo si dijera que si —Eso lo hace reír—. Aunque tampoco es que esté segura de ello, probablemente haya escuchado una canción de ella en la radio y no lo sepa.
—Puede ser —Se detiene y se sienta en la banqueta, palmea el espacio a su derecha y con piernas temblorosas me siento a su lado, dejando unos dos pies de distancia entre nosotros.

Trataba de no mostrar cuan nerviosa estaba ante su presencia y su cercanía mientras caminábamos pero al estar quieta en un solo lugar temo que vea los temblores de mis extremidades.

No es que luego de ocho meses de estar mandándome mensajes de texto o video chatear con él me siguiera enloqueciendo como toda una fanática, había superado esa etapa luego de dos semanas. Ahora lo que me ponía nerviosa era él como persona, no como artista. Y es que hacía un mes que su nuevo sencillo había salido en la radio y sinceramente no sabía que pensar al respecto aún, porque la canción no era únicamente de amor, sino que en ella hablaba sobre los últimos cuatro meses. La única diferencia, en la canción mi nombre había sido cambiado por Allison y era su novia.

Así que cuando Nicholas me dijo que tomaría un descanso de su gira única y exclusivamente para conocerme mi corazón se saltó un latido o dos. De no ser porque era algo que me llenaba de alegría seguramente habría tenido un ataque de pánico.